XV

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—... Concluyendo, la razón por la que los rescatistas acuáticos tienen experiencias infantiles relacionadas con el ahogamiento, que contribuye a la conformación de un trauma, pero aún así deciden estudiar y seguir con su carrera, que juega constantemente con el límite de su propio estrés, es porque como humanos siempre buscamos superarnos a nosotros mismos, y eso... — pausa dramática — es la característica más humana que puede haber.

Minho terminó de hablar, recibiendo los aplausos y la ovación de pie de sus compañeros, y también de sus profesores, incluso el Señor Choi lo felicitó.

Dejó una copia de su trabajo en la mesa de sus profesores.

— Para ser un trabajo que preparaste en cuatro meses está muy bien — dijo el Señor Choi.

— Gracias — respondió simplemente, como si fuera un verdadero cumplido.

Salió de su clase y, como siempre, volvió a su cuarto, donde estaba su lindo novio, que lo recibió con suaves besos y cupcakes de chocolate.

— Hola, precioso — dijo, mientras el menor lo abrazaba por el cuello, sus manos fueron a su cintura.

— ¿Cómo te fue en tu exposición final? — ladeó su cabeza, su cabello largo estaba medio rizado y desordenado, se veía muy bien.

— Excelente, por supuesto — dijo —. ¿Cuando es la muestra de tus fotografías?

— Es la muestra de toda la clase, no solo mía...— corrigió — Y empieza el lunes.

— Fabuloso, tenemos cita el lunes — dijo, guiñando su ojo con encanto.

No habían vuelto a tener alguna pelea, ningún incidente, simplemente funcionaban muy bien juntos, y a demás, Minho solía usar tácticas psicológicas para hablar cualquier conflicto de forma tranquila, no había nada que no pudiera arreglarse sin hacer sentir mal a nadie.

A veces Felix se sentía mal consigo mismo, o con la relación, a veces tenía muchísimo miedo, y cargaba con muchas inseguridades, más de las que realmente pudiera notar, pero Minho era muy bueno con él, no dejaba que nada pasara a mayores, no dejaba que llorara demasiado, o que se estresada mucho, y le encantaba cuidarlo.

Los dos estaban felices, compartiendo su vida y su cuarto, las vacaciones y el fin del año estaban cerca, aún no sabían que harían, pero no se quedarían en la universidad durante el receso, principalmente porque esta cerraba.

Por eso, por la incertidumbre, disfrutaban de cada momento compartido.

Felix no quería pensar mucho en eso, porque no quería correr el riesgo de nuevo, de creer que Minho lo abandonaría.

Le daba muchísimo pánico, y tenía ese amargo sentimiento en su estómago de que Minho lo dejaría en algún momento.

Minho sabía que él no lo hacía a propósito, que era algo triste, pero que el rechazo había sido gran parte de su vida, sólo estaba pensando lo que mejor conocía.

Por eso, Minho solía decir cosas como "¿Qué tal si en verano hacemos un viaje juntos lejos de la cuidad?", "¿A dónde te gustaría ir para festejar el primer año juntos?", "¿No quieres adoptar un gatito conmigo en el futuro?"!

Todas cosas que llevaban tiempo, que no estaban cerca, para que se acostumbrara a la idea de que sea dentro de unos meses, o de unos años, él estaría allí.

Ya verían qué harían después, de todos los planes hipotéticos que Minho inventaba.

Por el momento lo que más inquietaba a Felix es que Minho decidiera irse a otro lado durante las vacaciones, que no quisiera verlo, o que lo abandonara, que pasara sus días lejos de sus besos y de sus abrazos, y que lo extrañaría más que a nada en el mundo.

ଘ ᵀʰᵉ ᴬˡᵗᵉʳˢ ଓ - ᴍɪɴʟɪx      [𝐀𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐜𝐢ó𝐧]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora