"¿En serio?" Lex y Rosalie gimieron simultáneamente en voz baja al oír el ruido de una motocicleta que se dirigía a la casa. Aunque el olor aún no les había llegado, era obviamente Jacob. Literalmente, no conocían a nadie más que anduviera en moto.
Si Jacob estaba apareciendo, el resto de los lobos iban a descubrirlo, si es que no lo habían hecho ya. Y por mucho que Lex quisiera tener una relación de respeto mutuo con ellos, sabía que sólo habría problemas si se enteraban del embarazo de Bella. Incluso Edward, el cocreador del feto, no estaba de acuerdo con toda la situación. Y si él no lo estaba, ¿por qué iban a estarlo los lobos? Así que, sí, ni Lex ni Rosalie estaban entusiasmadas con la aparición de Jacob.
"¿Qué pasa?" preguntó Bella desde su posición en el sofá. Llevaba dos semanas en casa y tenía un aspecto terrible. Tenía la piel más pálida de lo habitual, las mejillas hundidas y los ojos con profundas bolsas moradas. Parecía un extra en una película de zombis.
"Alguien viene a la casa", murmuró Rosalie.
Antes de que nadie pudiera responderle, Carlisle había abierto la puerta.
"¿Es cierto?" Jacob entró furioso.
"Hola, Jacob", saludó Carlisle. "¿Cómo estás?"
Jacob se paseó inquieto por la habitación. "Escucha, dímelo directamente".
"Jake, ¿eres tú?" Bella llamó desde donde estaba el resto de los Cullen. Lex pudo ver cómo Rosalie se tensaba ligeramente cuando Bella llamó la atención de Jacob. Se inclinó más hacia la chica rubia en un sutil intento de consolarla.
"¿Está aquí?" preguntó Jacob a Carlisle en la otra habitación.
"Llegaron a casa hace dos semanas", suspiró Carlisle. Los pasos de Jacob se acercaron mientras se apresuraba a buscar a Bella.
"Jake", trató Carlisle de llamar su atención, pero Jacob lo ignoró y siguió subiendo las escaleras. Todos se pusieron de pie y observaron atentamente cómo Jacob se adentraba en la habitación. Lex ni siquiera necesitó mirar a Rosalie para saber que estaba preparada para atacar si hacía el más mínimo movimiento en falso.
"Me alegro de que hayas venido", dijo Bella, mientras Jacob intentaba mirarla más de cerca. Rosalie se negó a apartarse, ya que se había mostrado muy protectora con el bebé desde que Bella había vuelto a casa.
"Ya está bien", dijo Rosalie mientras daba un paso adelante. Los ojos de Lex se concentraron en la situación: no iba a permitir que le pasara nada a su compañera. No le importaba si eso significaba herir al chucho de Bella.
"¿Cuál es tu problema?" Preguntó Jacob, sin romper el contacto visual con la vampiresa rubia.
"Rose, está bien", habló Bella. Lex resistió el impulso de poner los ojos en blanco. El hecho de que Rosalie ayudara a proteger al bebé no significaba que ella y Bella fueran de repente amigas. Lex había sido testigo de primera mano de lo mucho que le había costado a su compañera toda esta situación, y Bella se conformaba perfectamente con dar órdenes y apodos. Era una mierda.
Como sea, pensó Lex. Mientras Rosalie estuviera bien, no tenía motivos para causar problemas. Pero si algo cambiaba y Rosalie decidía que ya no podía manejar esto, entonces Lex iba a ser la primera persona en respaldarla. Incluso si eso significaba dejar a los otros Cullen.
Rosalie permitió que Jacob pasara junto a ella.
"Tienes un aspecto terrible", le sonrió a Bella. Lex sintió que una cantidad irrazonable de ira se hinchaba dentro de ella. Jacob la irritaba. Bella se había casado literalmente con otro chico y Jacob seguía jodidamente obsesionado con ella. El hecho de que se viera a sí mismo como un "buen tipo" no significaba que Bella, o cualquier otra persona, le debiera nada. Era patético.
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Too Close Rosalie Hale
FanficLex (diminutivo de Alexandrine, pero se niega a llamarse así) Holloway estaba teniendo el peor cumpleaños de su vida. Incluso se atrevería a decir que era uno de los peores cumpleaños de la historia de los cumpleaños. Primero, su novio la deja de re...