Foto con flash (Jihan/Jeongcheol)

Resignación

A Seungcheol le gustaba escribir, eso lo tenía en claro. Desde pequeño esperaba con entusiasmo sus clases de lengua o literatura, leía en sus tiempos libres y escribía sus pensamientos antes de dormir. Su gusto por ello, le abrió puertas de pequeño, desde cargos importantes en la escuela hasta competencias victoriosas ;sin embargo, como todo niño "estrella" llegó a su punto más alto... ahora estaba a la deriva.

— No puedes seguir trabajando aquí, Choi. Lamentablemente tus artículos no llaman la atención y seguir dejándote esta sección significa una pérdida de dinero, tiempo y espacio en la revista. —

Hace exactamente 3 meses, Choi Seungcheol, fue despedido de la revista "Politics & People" debido a su "falta" de imaginación, interés e ingenio. Y no es como si pudiera mandar a la mierda a la revista, ya que, después de unos largos 3 años trabajando para una entidad tan reconocida y bien remunerada no lo había dejado mal parado ante el mundo laboral, probablemente, conseguiría trabajo rápidamente... O eso, creyó hasta leer las supuestas "recomendaciones" de su anterior empresa.

Ahora, mientras trabajaba de medio tiempo como un pollo de restaurante y de noche en una tienda de convivencia , se preguntaba seriamente: ¿Qué mierda le pasó? En todos estos años trabajando como un reconocido escritor para una gran revista, a final de cuentas, terminó como un estudiante de secundaria que busca ganarse un poco para gastarlo en videojuegos. 

¿Fue su arrogancia? ¿Su altanería? ¿Su ego frágil? 

Odiaba su vida en este momento y no sabría cómo salir de ese círculo vicioso para volver a vivir escribiendo. Los periódicos más locales lo llamaron, las revistas novatas, pequeños noticieros y programas de radio sin reconocimiento, gente lo buscó ;sin embargo, se negó a cada una de estas. Grave error. Miró la pequeña televisión del local y como lo suponía sólo eran esos programas vulgares de chismes y celebridades. A pesar de lo tontos que llegaban a ser, probablemente ahora ganaban el triple que él por poner preguntas como "¿Son ciertos los rumores con tal famoso?", "¿Cuáles fueron tus métodos para bajar tanto de peso?" o mil porquerías que no entendía el por qué la gente le prestaba interés.

La pequeña campanita sonó y se puso en posición, un cliente había entrado, lo más seguro un fumador o una pareja en busca de preservativos.

— ¿Choi? No esperaba verte por aquí. — 

"Mierda"

Fingiendo su mejor sonrisa, da la cara ante uno de sus "exs" compañeros de universidad.

— Vaya no pensé verte otra vez, Kim. — 

Kim Mingyu, el segundo de la promoción después de él -obviamente-, se paró frente a él con unos cigarrillos y una sonrisa altanera. 

— ¿Cómo estás, amigo? Después de la graduación, no supe más de ti. ¿Sigues en la "P&P"? — 

Desde la posición de sus cejas hasta la postura incómodamente recta, sabía que se burlaba.

— Hace un mes que me retiré. — Prefería decir eso a "despedido".

— ¿Oh, en serio? Bueno, supongo que para los zapatos del gran "Choi-Seungcheol", esa empresa era aburrida. — Lo miró y pensó en las probabilidades de quitarle su colmillo en un sólo Knock out. — Como sea, hubiera deseado convertirnos en compañeros de trabajo. —

Sus ojos se abrieron más de lo que deseó.

¿Contrataron a Kim en su lugar? 

— Felicitaciones. — Dijo de la manera más insípida posible.

— Gracias. — El moreno le alcanzó los cigarrillos. — De cualquier forma. ¿Cuánto es, disculpa? — 

— Tres dólares con cincuenta. — 

El más alto , sacó un billete de cinco y él abrió la caja, quería ser lo más rápido posible.

— No, no te preocupes, quédate con el cambio. Fue un gusto verte ,Choi, espero verte pronto en otro sitio. —

— Hasta luego. —

Y hasta escuchar la campana dando "fin" al encuentro, apretó su puño. Mierda, mierda, mierda. No se había sentido tan humillado desde la primera vez que se puso el traje del "pollo cocinero" para repartir volantes. Con la mandíbula más que contraída, tomó su celular.

"Olvida lo que dije Soonyoung, háblame sobre el espacio libre en la revista."

Odiaba a Kim Mingyu, desde su extraña forma de caminar demasiado recto hasta el colmillo en su sonrisa, lo aguantó por cuatro años en la universidad y volver a encontrarlo fue tanto una maldición como el vestigio necesario para acabar con su arrogancia y aceptar una propuesta de un colega.

Miró otra vez hacia el televisor, seguía en el mismo estúpido programa, aún así, lo miró más de lo necesario y trató de convencerse de que no era tan malo como lo pintaban aunque a letras grande dijera: La gran verdad del actor del momento y los secretos para tener un hombros rectos y anchos. 

*pin*

Con la mano yendo rápido a su bolsillo, encendió su móvil y sonrió.

Soonyoung: Sé que no es algo que esté en tu zona de comfort, pero un compañero ha creado su nueva revista adolescente, le está yendo bastante bien.  

Soonyoung: La plaza es para la sección de celebridades y romance.

Soonyoung: Si tienes tiempo, mañana te envío la ubicación de la oficina central y das una vista al trabajo.

Lo sabía, desde que Know le dijo que su compañero había hecho una revista adolescente, en menos de 1 segundo pudo concluir que ese "compañero" no era nada más que Boo Seungkwan , el director de "cine", de su facultad.

No odiaba a Boo, sólo con Kim era su disconformidad, pero tampoco fue su amigo o alguien lo suficientemente cercano para que alguno de sus gustos coincidan. Y que su revista se llame "Seventeenagers " daba mucho qué hablar. 

Sólo esperaba no morir en el intento, de todas formas, era temporal.

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