Foto con flash (Jihan/Jeongcheol)

canela

Todo el ambiente cálido y embriagadamente acogedor que se había formado entre el actor y él había desaparecido - no en su totalidad- pero sí era menos asfixiante. Después de cada actividad o al finalizar el día, Jeonghan, pedía que lo llevara a cierto edificio departamental y que lo recogiera o demasiado tarde o muy temprano. No era agotador. La mayoría de veces, ni siquiera, podían formular más que una oración por lo rápido y exaltado que se encontraba el menor. La vida corría mucho más rápido ;sin embargo, a él nunca le agrado correr... Apenas iban 3 días.

— Deberías pedirle un autógrafo a Joshua Hong. — Dijo Sakura desde el otro lado de la línea.

— ¿Por qué? No soy su fan en realidad. — 

— Solo hazlo. Si al menos estarás entre famosos por poco tiempo, aprovecha en conseguir algo que en algún momento cueste dinero. —

— Realmente no me quiero relacionar tanto con los actores y mucho menos con Hong. — 

— ¡Oh, por favor! Hace unos días incluso sonabas menos reacio a intentar llevarte bien con Yoon Jeonghan. — Se escuchaba como masticaba y las migajas daban saltos en el micrófono del celular. Eran las 8:00 pm y apenas pudo almorzar, tenía hambre. — ¿Es por lo de la foto, no? Joshua es el que te siguió. —

— ¿Ahora ves por qué no quiero ni siquiera cruzármelo a diario? — Estaba en el auto, su mano en su frente y su barbilla apoyada en el volante. Estaba incómodo y con hambre. Estaba irritable.

— ¡Deja de arrugarte! — Ella - casi - gritó en la línea y dio un pequeño respingo. — Aunque no te vea, sé que ahora estás con una expresión de anciano. ¡Vamos! Todos los productos que te regalo en cada cumpleaños, no van a hacer efecto si te la pasas así. —

— Pero. —

— Soy tu amiga, manager y asesora de imagen, más respeto a mi trabajo. — 

Si alguien externo escuchaba la conversación, podría malinterpretarla o pensar que suena exagerada, pero después de que se conocieran en la secundaria, su vida dio un giro de 360 grados. O más bien, las personas a su alrededor dieron un "giro de 360 grados" al tratarlo. A veces, sentía que la armadura ancha y pesada que tuvo en su pasado le impedía cuidarse.

— Okay, ya entendí. ¡Más cremas, menos arrugas! Gracias, "mamá".— Dio una pequeña sonrisa.

Si Sakura era así con él, no se imaginaba lo protectora y cuidadosa que sería con su niño o niña.

— No encontrarás a nadie como yo ni en mil años. — 

— Claro como tú digas. — Iba a reírse, hacer algún chiste malo... — Sakura, tengo que cortar. —

Sin poder dejarla responder de vuelta, cortó la llamada y se enderezó robóticamente.

Jeonghan había abierto la camioneta de forma tosca y ruidosa. Ambos se miraron por segundos. "Mierda", fue lo primero que vino a la mente del mayor al ver al actor con el rostro enrojecido y la mirada cristalina. ¿Sería prudente preguntar sobre lo que le paso? Definitivamente, no.

Manejó.

No sabía si estaba en lo correcto al llevarlo de regreso a su departamento, pero no tenía otra opción, mañana sería el día libre del actor y suponía que desde esta noche empezaría a descansar. Y justo ahora, el camino parecía interminable. El semáforo se ponía en rojo a cada instante y sus ojos solo iban y regresaban hacia el retrovisor donde lo veía de mirada baja y sollozando. 

Se mordió los labios.

Odiaba a la gente guapa, mas aún, cuando habían sido lo suficientemente amables como para sentirse como una basura o una bruja de cuento de hadas porque no los consolaba. Era malo para expresarse incluso siendo un escritor. No sabía como empatizar con los demás fácilmente, y tampoco, creía poder ayudarlos demasiado.

— ¿Quieres ir a casa? — Fue lo único que se ocurrió decir después de haber manejado por 10 minutos.

Como lo suponía, no respondió. De cualquier forma, lo intentó y lo dejaría en su casa, era lo máximo que ofrecía dar.

Otro maldito semáforo rojo.

— No. — Jeonghan había hablado.

Lo miró tras el espejo.

— ¿Podrías llevarme a comer pollo? — Hablaba lento como si pretendiese estar normal, como si Seungcheol no lo hubiese visto llorar. — La última vez ... tomé tanto que no recuerdo el sabor. — 

— Okay, espero que me des tu reseña más honesta. — 

Jeonghan pareció casi sonreír.

El semáforo volvió a verde.

....................................................................................................................................................................................................

Taeyong era amable.

O eso quería creer.

Joshua había vuelto a engañarle y no sabía si seguir creyendo en que solo era para "disipar" los rumores entre ellos. ¿Cuál malditos rumores? Ni siquiera en su último incidente pasó algo, y si lo hubiese, probablemente sus empresas comprarían las fotos y todo desaparecería o quedaría como una "teoría conspirativa". Lo odiaba. No, no lo odiaba. Joshua era bueno. Lo de ellos no era nada tampoco. Se suponía que se amaban, pero para "borrar" sus huellas, podrían salir con alguna que otra chica. Odiaba ese acuerdo. No a Joshua.

Él lo había salvado de formas que incluso no creyó que se podía salvar.

Pero dolía.

Dolía cada vez que se enteraba de que Joshua le mentía y ocultaba ello como si fuese algo malo. ¿O acaso eso pensaba? Se suponía que ese era su acuerdo. ¿Por qué incluso a Joshua le costaba seguirlo y decirlo? 

Odiaba ser un famoso.

Odiaba ser un famoso gay.

Miró a Taeyong de espaldas frente a él. Incluso su guardaespaldas parecía vivir una relación ideal. Sin ocultarse como si fuese un secreto. "Sakura". Fue el nombre que oyó al entrar de golpe en la camioneta. 

¿Qué debería hacer? En dos días volvería a ver a Joshua para las primeras tomas, no tenía cabeza para cruzar palabras con él. No ahora que sentía que fue demasiado sensible. Siempre era él quién iniciaba las guerras y prendía en fuego...

— Llegamos. ¿Listo para probar el mejor pollo picante de tu vida? —

¿El pollo? El pollo... ¡El pollo!

Lo había olvidado por un segundo.

— Por supuesto — 

Por primera vez, había visto a Taeyong sonreír, con todos sus dientes ordenados y pulcros... Claro que sus dientes serían brillantes, todo él siempre lucía impecable.  Sin embargo, no, no esperó que fuera tan... tan brillante

— Entonces no te olvides tu mascarilla. —

Taeyong era guapo.

Y recién era consciente de ello.

........................................................................................................................................................

Pdta: DARUMDARINDAAAAAAAAAAA