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Dios...
Miraba su alrededor, lleno de girasoles. Un árbol en el centro de todas ellas, tenía algo de miedo de poder pisarlas, llegaban hasta sus rodillas, si que eran algo altas.
Aun sigue en duda sobre la flora de Las Nevadas. ¿Acaso durante sus guerras se apoderaron en más terrenos aparte de la arena?, nada revelante.
Poso sus dedos en la corteza del gran árbol, una parte tenía una letra tallada, "Q". Quackity sin duda.
Ahora entendía más al príncipe, ¿por qué perderse de este hermoso lugar?, fijo su mirada al suelo, las girasoles estaban distanciadas del árbol dejando ver el verdoso césped.
Se sentó apoyando su espalda con la madera y solo admiro las brillantes girasoles. Pensaba en llevarle unas al príncipe, pero no se atrevía siquiera a cortarlas, ¿comprarles unas? En su recorrido en el área alta y media habían muchas florerías, aunque quisiera no tenía dinero, ¿área baja? También hay, pero solo obtendrías flores marchitas y sin color.
...
¿Llevarle flores al príncipe?, no, apenas eran amigos y se veían después de su práctica, ¿por qué alguien como él, le llevaría flores a una persona de suma importancia en el reino?, sería estúpido.
No le gusta, para nada. Ningún sentimiento hacia el príncipe. Ninguno.
Luzu apenas era un puberto, obviamente experimentaría en estas cosas, ¡pero no con el hijo del rey!. Vaya suerte la suya, esperaba que durante su estadía no se formara un sentimiento.
Solo serían amigos, nada más.
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-Deje que yo me encargue príncipe.
-No Niki, yo, quiero hacerle un pastel a Luzu, su cumpleaños es mañana...
-Con todo respeto, pero usted no sabe ni siquiera hervir agua, la otra vez que lo intento se le quemo.-Reprocho la cocinera.
-Bueno, en eso tienes razón-Suspiro rendido-, entonces, ¿me ayudas?
-Por supuesto, sabe que me gusta pasar tiempo con usted.-Sonrió la muchacha.
-Ya te he dicho que me hables de tú.
-No puedo hacer eso, príncipe. Aunque me lo diga mil veces no le hablaré así.-Declaró.
-Pero Niki...
-No, ahora manos a la obra.-Se alejo del menor para irse al refrigerador para sacar los ingredientes necesarios.
Ese momento Quackity era muy feliz ayudando a la cocinera, le gustó batir la mezcla apesar que la chica le haya dicho que no fuera tan fuerte y rápido ya que se manchaba su alrededor.
-¿Ya casi?
-Apenas se esta horneando, príncipe, todo con tiempo y calma.
-Es aburrido esperar.-Bufo.
-Se paciente, después de hornear podrá decorarlo-Dijo mostrando los comestibles en la mesa-, lo veo feliz, príncipe.
-Luzu es mi primer amigo después de estar encerrado dos años aquí, quisiera darle un pastel en forma de gratitud por hacerme compañía.-Confesó.
-Eso es muy lindo de su parte, vera que le gustará. Me encanta saber que en unos años más saldrá de aquí para ir al campo de girasoles.
-Vale la pena esperar, hace mucho tiempo que tampoco veo una girasol, solo los estúpidos cuadros que me dio mi padre, no es lo mismo. Tiene de todo, ¿qué le cuesta en traerme una?, aunque sea un mísero pétalo.-Apoyo su mejilla en la mesa triste.
-Ya no se venden las girasoles, príncipe.
-¿Qué?-Susurro.
-Su majestad lo prohibió, no importa a que florería visite, no las va a encontrar-Dejo salir un suspiro-, él único lugar donde hay, es en las montañas del área media, también está estrictamente prohibido cortarlas.
-¿Por qué lo hizo?, ¡nunca me lo dijo!-Reclamo.
-Por usted, las razones son obvias-Explicó-, la reproducción de las girasoles bajo mucho por los distintos climas, el lugar donde no se ven afectadas por el clima es donde usted iba. Desde entonces ese campo está algo protegido, cualquiera puede ir a verlas, siempre y cuando no las maltraten.
-Ya estoy queriendo que pasen los años rápidos.
-Pero bien que estuvo de acuerdo en esperar.-Niki soltó una risa.
-¡No te rías!
-Solo espero que en el futuro sea el hombre más feliz del mundo, tenga una buena vida, príncipe.
-¡La tendré!, ¡haré muchas cosas divertidas hasta hacerme viejo!-Alzó sus manos con entusiasmo.
Niki sonrió en grande aguantando sus lágrimas viendo al menor feliz.
Luzu con solo su llegada, el príncipe volvió a tener esa hermosa sonrisa que no había vuelto a ver hace dos años.
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