🍀 Capítulo 1 🍀

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El Puerto de Liyue, el más bello lugar de comercio en todo Teyvat, era sin duda un sitio perfecto, ya sea para vivir o simplemente pasar unas vacaciones para hacer algo de turismo, como ahora ellos estaban haciendo.

Luego de que la situación en Sumeru se estabilizará, de que se consiguiera un nuevo Gran Sabio, y de que tuviera algo de tiempo libre, entre Panorama, Agni y sobretodo Kaveh, habían convencido a Al-Haitham de hacer un viaje a su nación vecina y pasar unas semanas allí como merecidas vacaciones luego de todo el revuelo sucedido, y luego de mucho esfuerzo lo convencieron y aprovechando que la flota Crux Meridiam estaba en el Puerto Ormos, no se lo pensaron dos veces para ir allá.

Cuando llegaron, Panorama y Agni les dieron que podían ir a donde quisieran en la ciudad mientras ellos iban con el padre de Agni, que los estaría esperando en la terraza donde se daba la ópera de la maestra Yun Jin, solo pidieron que llegarán a tiempo para escuchar la obra, y acordaron hacerlo ya que era al atardecer, así que tendrían toda la mañana y comienzo de la tarde para hacer algo de turismo.

Durante todo el día Al-Haitham y Kaveh estuvieron yendo de allá para acá, visitando la Casa de Libros Wanwen, donde gracias a Al-Haitham estuvieron una hora escuchando el relato de otro escriba, este del Gremio de Comerciantes de Liyue, que se encontraron allí sobre una novela que Kaveh no entendió, el Restaurante Wanmin, donde una joven muchacha cheff de ese lugar les quemó a ambos la boca con chiles Jueyun, aunque afortunadamente un niño de ojos azules que iba pasando les dió helados para ayudarlos, Kaveh se vengó de Al-Haitham por hacerlo esperar y se quedó una hora más hablando con el Equilibrio Terrenal sobre arquitectura en la Terraza Yujing, y luego se reconciliaron mutuamente yendo al puesto de juguetes, sería gracioso explicarle a sus padres luego cómo terminaron jugando con cometas en el puente y de alguna manera que aún no entienden fueron invitados al Arca de la Perla por el viajero en tarde del día siguiente, tremendo día fue ese.

Incluso se encontraron con un viejo amigo de Al-Haitham en el camino, Zhongli, con el que estuvieron hablando un rato mientras tomaban el té en la funeraria El Camino, y cuando se dieron cuenta ya estaba atardeciendo, así que se despidieron del castaño y tomaron rumbo hacia el lugar donde se daría la opera, con la suerte de encontrarse en el camino justo a la joven maestra que iba a dar la ópera, y recordando que ninguno de los dos sabía cómo llegar con exactitud entre tantas escaleras, terrazas y demás que conformaban el lugar, aceptaron la ayuda de esa joven para llegar allí.

Y mientras los tres hablaban entre sí en el camino, en el propio lugar donde se daría la opera estaban presentes los padres de ambos hombres, viendo desde la distancia como sus hijos hablaban con la maestra Yun Jin, sonriendo ante esa vista, ante el alivio de que esas vacaciones estuvieran cumpliendo al dar el descanso bien merecido que necesitaban luego de lo ocurrido en Sumeru.

–Sin duda fue buena idea traerlos a Liyue–dijo Panorama viendo a su hijo y Kaveh por los barandales–gracias por la invitación, señor Conrad

–Luego de un cambio político forzoso en su nación es hasta necesario que se relajen un tiempo–dijo el susodicho sentado en una de las mesas frente al escenario ópera: un hombre de cabellos blancos con mechones rojos, y ojos del mismo color.

–Solo estabas preocupado por ellos y querías consentirlos un rato, ¿verdad, papá?–dijo con gracia Agnidev acercándose a Conrad–están en la cúspide de su vida de disfrutar ser consentidos por el abuelo

–Creo que ya pasaron por esa etapa de su vida, Agnidev–fue lo único que dijo Conrad con ojos entrecerrados.

–No lo negaste–dijo Agni dándole unas palmaditas en la cabeza a su padre antes de sentarse junto a él–eres lindo con ellos cuando quieres serlo

El Legado Entre La Arena [ Al-Haitham x Kaveh ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora