Al día siguiente por fin había dejado de llover y Okabe entro en su laboratorio encontrado donde siempre a su amigo mirando el ordenador por lo que parecía otro juego de chicas 2D. Okabe se acerca su ordenador, pretendiendo estudiar algo de su carrera, que la tenía un poco abandonada, o tal vez mirar cómo lleva las teorías de sus absurdos inventos de laboratorio. El laboratorio olía como siempre, ese olor a ramen de los botes acumulados, el olor a humedad debido a la lluvia, incluso a quemado de algún aparato que había sobre esforzando su capacidad de funcionamiento. Se podía escuchar, incluso con las ventanas cerradas como el dueño de la tienda de abajo se quejaba por el alquiler. La luz era mas oscura de lo habitual, debido a las nubes que cubrían el cielo de la calle impidiendo que entrase el sol como siempre lo hacia a esa hora en el laboratorio
— ¿Okarin? — Pregunta el informático con su voz característica, girándose para mirarlo. —No has dicho nada cuando has entrado.
— Jaja, veras... — Comenta el chico mirándolo y poniendo un timbre burlón en su voz. — Te he visto tan concentrado en tus proyectos de chicas que no quería distraerte.
— Déjate de tonterías. — Responde su amigo acercándose a arrastrando la silla. — ¿No será que quieres ocultar algo? — pone una cara de sorprendido tapándose la boca con la mano. — ¿No será que ha pasado algo entre tú y Makise-shi? Ayer no viniste en todo el día. Dime, ¿Llegaras a ser un mago o ya no puedes serlo?
Okabe le ardía la cara al escuchar esas preguntas y para evitar que su amigo se diese cuenta, y hablar de ello. Saca su teléfono móvil, se levanta y se gira murmurando a su móvil aun sonrojado.
— ¿Hola? Soy yo. Parece que la agencia está esparciendo rumores sobre mí. ¿Tengo que cambiar mi identidad? Ya veo. El PsyKongroo.
El chico informático pone una cara de decepción y vuelve a su ordenador con sus chicas 2D. Okabe lanza un suspiro al aire y viendo que ya no hay peligro de preguntas vergonzosas y vuelve a su ordenador a seguir con lo suyo.
Esa tarde Kurisu fue al laboratorio, cuando entró saludo a ambos chicos, aunque parecía que le costaba mantener la mirada con Okabe, y a Okabe le costaba mirarla a los ojos, por suerte el chico informático estaba tan absorbido con sus juegos 2D que no se daba cuenta de nada, la chica pelirroja se puso en su bata laboratorio y al ponerse a leer una revista sobre ciencia preguntó.
— ¿Habéis hablado con Mayuri? — Dice ella al fin.
— Si. — Comenta Okabe sin mirarla a los ojos. — No te preocupes asistente, mañana ya estará aquí porque está mucho mejor.
— ¡Oh! — Interrumpe el informático la conversación. — ¿Makise-shi, vas a seguir quedándote en casa de Okarin?
— ¿¡Eh!? — La chica se sonroja, y bastante nerviosa engulle su cabeza con los ojos fijos en la revista que estaba mirando. — ¡P- Por supuesto que no, ya he encontrado otro hotel más barato!
— Vaya — Comenta el informático con decepción girándose a mirar su ordenador.
— Mejor así — Okabe se alegraba de evitar el tema, pero no puede evitarlo y sube el tono burlón. — Es muy difícil convivir con una zombie.
— ¿Qué? — Grita ella. — Lo que es difícil es convivir contigo y tus tonterías las 24 horas del día, suficiente es que tengo que aguantarte aquí cada día.
— Querrás decir aprender de tu superior, Kurisutina — Termina él aun con su aire burlón. — FUAJAJAA
— Ya vale — Grita ella — Tengo mucho que hacer, así que cállate.
— Eso. — Vuelve a decir él chico— haz lo único que sabe hacer una sabelotodo. Aunque lo único que haces es leer una revista.
— Recopilar información sobre mi campo de estudio también es un trabajo — La voz de la chica era muy despreocupado, como si una profesora le hablase a un alumno que no sabe nada.
— Eso dices, pero en realidad no tienes nada que hacer y solo estas matando el tiempo — Contrataca él.
Ella resopla y los dos se giran a seguir con sus cosas con una sonrisa en la cara.
Al día siguiente ya hacia mejor tiempo, ya no llovía y el sol había salido, aunque en la calle aún se podía apreciar el aroma que deja la lluvia en el suelo. Mayuri llegó con su buen humor de siempre al laboratorio, donde todos seguían en el haciendo los mismo que el día anterior.
—Tu-tu-ru♫. —Se escucha al entrar la chica morena por la puerta del laboratorio.
— Mayuri. — Dice Kurisu acercándose a ella con alegría. — Me alegro de que estés bien.
— Mayushi estuvo malita — Le responde la chica morena con su alegría de siempre. — Pero ya estoy bien, por suerte no fue nada grave, un simple resfriado.
— Aun así, si te sientes mal no hagas esfuerzos— Dice la pelirroja preocupada por ella.
— No te preocupes, asistente. — interrumpe Okabe la conversación entre las dos chicas. Okabe también se alegraba que Mayuri se hubiese recuperado pero el prefería mostrar una sensación de que no le importaba. — Mi rehén está en perfecto y por eso está aquí.
— ¿A ti quien te ha preguntado? — La voz de la chica sonaba molesta.
— Chss. — Okabe parecía molesto. — Maldita asistente, soy yo el que sabe cómo está la salud de todos los miembros de su laboratorio.
— Ya claro. — La chica vuelve a mirar a Mayuri aun preocupada. — ¿Entonces estas bien del todo Mayuri?
— Si. — Dice Mayuri con alegría— Gracias por preocuparte Kurisu-san.
— Para esto están las amigas. — Responde Kurisu con una alegría y Mayuri le responde con otra sonrisa.
— ¿Has sudado mucho Mayushi? — Pregunta el pervertido de la sala.
— No respondas a nada de lo que te pregunten estos pervertidos. — Grita Kurisu enfadada.
— Yo no he dicho nada, no me metas en el mismo saco. — Responde el chico moreno molesto, mientras el pervertido que hizo esa pregunta resopla decepcionado.
— Esta bien, esta bien — Mayuri se pone en medio de los dos antes de que empezase otra pelea. — Mayushi esta bien y eso es lo importante, he traído pollo karague para todos.
— Así me gusta Mayuri — Responde Okabe sacando de la bolsa la comida. — Tu si piensas en los miembros del laboratorio.
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Olor a lluvia
FanfictionHan pasado 2 años desde lo sucedido con los viajes en el tiempo. Okabe por fin puede estar en paz con sus amigos y con Kurisu de una forma especial. O al menos eso piensa él. Parece que Okabe aún no puede descansar, seguirá peleando por estar con Ku...