Paternales Aventuras En Otro Mundo.

Capítulo 3

—Bien, ahora lo principal es obtener un arma confiable y buen equipamiento. —Zero miró de reojo a la sonrojado Fary, mientras guardaba su tarjeta en uno de los bolsillos de su cinturón. —Fary, ¿por aquí se encuentra una tienda que venda equipamiento para aventureros?

—S-Si, al cruzar la calle frente a nosotros, se encuentra una tienda. —Ella colaboró mientras tosía amargamente, el descaro del nuevo aventurero era admirable. —Es de una línea de herreros y sastreros afiliadas al gremio, así que podrá disfrutar de un pequeño descuento con su rango actual. La calidad y fiabilidad de los equipos está garantizada, es la mejor tienda que podrá encontrar en la ciudad.

—Eso es maravilloso. —Zero asintió, satisfecho. Con su siguiente destinó decidido, empezaba a imaginar una grandiosa armadura y una espada inmensa con la cuál aniquilar a cientos de enemigos con un desliz de su arma. Los delirios fantasiosos de un niño aún permanecían en él. —Regresaré pronto.

Salió del gremio con una resplandeciente sonrisa la cual continuo hasta cruzar la calle, iba a pasó firme y confiado mientras  inmediatamente reconocía el lugar que había sido indicado por Fary. En realidad, era muy fácil de notar. Resaltaba de forma extraordinaria frente a otros edificios, casi a la par del edificio del Gremio de Aventureros.

La altura del edificio qué fijaron sus ojos era parecido al del gremio, sólo  tal vez un par de metros más pequeño. Se veía firme, con un aire de elegancia ante su combinación inesperadamente de marrón claro y gris, tonos sencillos pero bien distribuidos por el edificio. En lo alto de esté, al igual que en el Gremio de Aventureros, un grueso cartel de madera mostraba el nombre del edificio, estaba bellamente adornado el mismo con varías piezas extravagantes. Cuatro transparentes y resplandecientes ventanas, dos en los lados de la puerta principal y dos unos metros arriba, adornadas con finos marcos y decoraciones en su alrededor, macetas con lindas flores multicolores permanecían en el frente, exceptuando soló la parte de la puerta. Al mirar por las ventanas,  una cantidad bastante resaltante de clientes, que él intuía eran aventureros en su mayoría podían ser vistos, a través del transparente cristal.

—Herrería y Sastrería D. Jarley & Morgan. —Zero anunció el nombre luego de observar unos segundos, entrando en el local con altas expectativas poco después. Así, observó en su totalidad la apariencia interna del edificio.

El edificio constaba de lo que parecían ser dos pisos, teniendo en cuenta las escaleras en el fondo del primer piso, dirigidas hacia arriba en una forma de de espiral, aunque parecía haber una puerta cercana a las escaleras que llevaba a cierto lugar. El lugar estaba bellamente adornado en sus interiores, con los colores gris y marrón de forma predominante en sus colores, había candelabros dispersos por el techo y partes de las paredes con piedras blanquecinas que ofrecían iluminación, siendo parecidos a los mecanismos de luz de su casa. Había adornos decorativos por los estantes, repisas y paredes para darle algo de elegancia y extravagancia al lugar.

Había estantes bien organizadas de gruesas y livianas armaduras, con diferentes diseños en cada parte del cuerpo. Repisas llenas de espadas filosas y demás armas punzantes como lanzas con diferentes estilos, colores y sobretodo precios. Al mismo tiempo habían armas como arcos de diferentes longitudes, escudos gruesos y de diferentes diámetros o diseños, junto a masos en las partes profundas del primer piso, puestos en resistentes sostenedores de acero o madera gruesa. Habían muchos tipo de armas y artefactos protectores, pero ningún tipo de ropa.

«Supongo que la ropa está en el segundo piso. »

Había por lo menos, más de una docena de aventureros en el lugar, dispersos por todo el piso. Tocando, viendo e indagando los equipamientos o armas, junto con sus compañeros de equipo o miembros del local preparados para su deber, ofreciendoles orientación y consejos con respectos a los precios y características de la mercancía. Si no fuera por qué en realidad lo que se estaba vendiendo eran armas y equipos de combates altamente peligroso, Zero podría haber confundido el lugar con alguna tienda de ropa o zapatos famosa de su anterior mundo.