🐰𝗖𝗨𝗧𝗘 𝗕𝗔𝗕𝗬🐾[𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤]

𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 3

NARRADOR OMNISCIENTE

Oculto entre las sábanas llevó sus manos a sus mejillas tratando de bajar la temperatura de estas.

Ella recibió la caja de galletas que le había preparado además de que le había sonreído.

Jungkook no quiso bañarse ese día, no después de que ella le acariciara el cabello y tomara su mano. Aún podía sentir su piel contra la suya.

Algo loco pero él se sentía bien con eso.

Era la primera sonrisa y caricia que recibía de t/n...después de varios días, incluso semanas sin ningún avance.

Me gustan los niños tiernos...como tú.

Creía imposible que lo hubiera escuchado hablar solo, ella estaba escuchando música con sus audífonos.

Error. T/n había escuchado cada palabra.

Solo que ella temía lo que era más que obvio, no hacía falta decirlo para darse cuenta que ese pequeño la había cautivado.

— Jóven Jeon -escucho a alguien llamarlo detrás de la puerta dando leves toques-.

Miro el reloj en la pared. Faltaba poco para la media noche.

Se sentó en la cama haciendo a un lado la sábana y bajando sus pies para meterlos dentro de sus pantuflas afelpadas.

Jungkook – ¿Quién es?.

Tomo la manija de la puerta mordiendo sutilmente su labio inferior. Aún conservaba ese miedo de abrirle la puerta a un extraño.

— La señorita t/n me envió para revisar su rodilla.

Soltó un fuerte suspiro al escuchar su nombre.

Ella se preocupa por mí. Pensó.

Abrió la puerta e hizo pasar a la mucama que cargaba una caja de primeros auxilios.

Jungkook – ¿Nonna t/n la mando?.

Sus ojos brillaron y sintió un cosquilleo en su estómago, no era capaz de reprimir tantas emociones en un solo día.

– Así es -hizo una reverencia antes de adentrarse por completo a la habitación- siéntese jóven.

Jungkook dió un brinco a la cama logrando que su cuerpo rebotará.

Balanceo sus pies atento a los movimientos de la mucama, el alcohol cayó lentamente sobre el algodón poniendo sus nervios de punta.

Jungkook – ¡No es necesario!.

Alzó ambas manos hacia la mujer logrando detenerla.

— ¿Qué sucede? -preguntó preocupada-.

Jungkook - Estoy bien -sonrió nervioso- no me duele nada.

Trato de sonar seguro.

— Pero usted sabe que debo obedecer las órdenes de la señorita t/n y su padre.

Era cierto. Nadie podía contradecir o desobedecer sus órdenes.

No tenía opción.

Jungkook – Está bien -bajó la mirada- por favor haga lo posible para que no duela.

— Así lo haré jóven.

Subió la tela del short dejando a la vista su herida. Aquel pasillo era como caminar en la nada, ahora entendía el porque no cualquiera bajaba a ese lugar.

Tenía un pequeño raspón y la piel a su alrededor se había tornado morada.

Hizo una mueca ante el ardor causado por el alcohol y abultó sus mejillas.