Flores amarillas | MACAUCHAY

02:00

Mentiría si digo que no había pasado casi toda la noche despierto por los nervios de saber que volvería a ver a aquel chico lindo. No es que este nervioso porque no sabía que hacer, ya había leído mil páginas sobre que hacer cuando tienes una "cita"

"COMO NO ABURRIR A TU CITA"

"10 PASOS PARA NO ABURRIR A TU CITA"

"¿DE QUE PUEDO HABLAR EN UNA CITA?"

Estaba ansioso.

Muy ansioso.

En realidad él sabía que no era una cita, sino una salida de, tal vez, futuros amigos, pero sus amigos se habían encargado de decirle que seria una cita, que lo había invitado porque le atraía. Sin embargo sabía que esa no podría ser la realidad de todo esto, porque el no es lo suficientemente bonito para atraerle a alguien.

Si hablamos por el lado del mayor, claramente le daría la razón a los amigos del chico, no dejaría que pasen de nuevo semanas para poder encontrarlo y hablar solo por 15 minutos. ¡Le atraía demasiado! no solo por el físico, claro que el chico es lindo, adorable, hermoso, pero las veces que se lo cruzaba o veía a la distancia veía que era una persona muy bonita, que no le hacía daño a nadie. Cada que lo veía se preguntaba como una persona seria capaz de hacerle daño a alguien como el. Quería guardarlo en una cajita y cuidarlo de todo mal.

Cau 🌧️

Cazador llamando a Bambi.
¿Estás despierto?
10:54

No.
10:55 ✓✓

Oi, que lastima. :(
Tendré que invitar a otro chico lindo a un
café con gatitos
10:55

De hecho, acabo de levantarme hace
dos horas. 🤗🤗

¿De verdad iremos a un café con gatitos?
10:55 ✓✓

Solo si no eres alérgico.
Sino tendré que improvisar.
10:55

Es tu día de suerte, no soy alérgico.
10:56 ✓✓

Genial.
Pasaré por ti en media hora.
10:56

¡Okey!
Yo y mi panza rugiendo te esperamos.
10:57 ✓✓

🌧️🌧️

Si antes estaba nervioso, en este momento lo estaba más, sus manos temblaban y no sabía que hacer. Estaba sentado en el asiento de copiloto y solo podía resignarse a mirar en silencio por la ventana, si decidía hablar, definitivamente la cagaria, sentía un gran nudo en la garganta al no poder hacer algo para romper el silencio que había entre los dos, no es que le incomodara, pero sentía que si no hacía algo, estaría aburriendo al mayor.

-¿A qué hora despertaste?

¡Agradecido con quién quiera que esté arriba mirándolo!

Soltó un suspiro al ver que el mayor rompió el silencio y pudo tranquilizarse un poco. Volteo su mirada de la ventana hacia Macao, viendo su perfil y sus ojos totalmente concentrados en el camino. Se veía tan bien. Demasiado para ser tan temprano.

-A las ocho. Había una gatito maullando en el techo y mi mamá me fue a despertar para que lo bajara y lo entrara a casa.- no mentía, a pesar de pasar mitad de la noche despierto, su madre si lo fue a despertar para que bajara al gatito del techo.