Daría hasta mí vida por ti _Lucerys Velaryon_

Temp. 3 Capitulo 3

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Missa miro hacia otro lado sin querer verla, escuchaba los gritos de su hermana al ver la muerte de Jacaerys, gritos llenos de lamentos e irá, Aegon observo extraño esta actitud de ella al ver sus ojos vidriosos comenzando a sospechar ya que mayormente Missa no le afectaba nada siempre era muy sería.

Baela con dolor en su corazón apenas pudo verlo, pero el a ella no, lamentablemente había llegado tarde, mirarlo mientras caía, con la única fuerza que le quedaba fue rápidamente hacia los cuerpos deslizándose hacia abajo.

__Te odio__ hablo Ruemma agitadamente sin dejar de llorar, observo de inmediato Aegon notando como los ojos de ella estaban rojos por llorar.

__¿Porque?__ pregunto incrédulo Aegon con una sonrisa sin importarle los quejidos de dolor de su dragón.

__¡TE ODIO! ¡TE ODIO! ¡TE ODIOOO!__ Gritó Ruemma lo más fuerte que pudo lastimando su garganta aunque era lo menos que le importaba __Te odio a ti y a tu familia, ustedes nos arrebataron todo lo que teníamos y éramos __exclamo asqueada__ ustedes los Hightower son simplemente unos parásitos __contesto con ira y rencor__ No sabes cuánto odio haberte conocido Aegon __respondio entre lágrimas sintiendo una gran tristeza recordando cada día que tuvo que pasar junto a el, odiandose a ella misma por lo débil que había sido.

Missa la observo con tristeza, nunca supo porque su hermana mayor odiaba tanto a los Hightower en especial a Aegon, observo fijamente sus ojos notando la gran tristeza que cargaba día y noche.

__No solo te odio a ti__ Exclamó Ruemma observandolos, Missa pensaba que su hermana diría que también la odiaba y tenía todo el derecho de hacerlo pero no fue así __Tambien me odio a mí__ contesto débilmente aún adolorida por la muerte de su sobrino, sorprendiendo a su hermana __Odio esa horrible noche que me hiciste pasar __Revelo comenzando su cuerpo a temblar recordando esa horrible noche cuando era una niña.

__¿Que hiciste?__ pregunto Missa observando seriamente a Aegon sintiendo como su respiración comenzaba acelerarse por lo que había pensado que podría haber ocurrido.

__Estas rodeada de monstruos Missa__ respondió Ruemma cerrando los ojos fuertemente al no poder soportar los dolores de su corazón __Apenas tenía 10 años cuando Aegon me violó __Revelo devastada sintiendo una gran vergüenza y tristeza.

Missa observo sorprendida al escuchar tales palabras comenzando a sentir como su corazón comenzaba acelerarse, sin saber reaccionar una pequeña lágrima bajo de su mejilla.
Por segunda vez sintiendo su corazón romperse en miles de pedazos.

Aegon la observo con una sonrisa triunfante, no podía asumir sus acciones por más que las lamentara ya las había hecho y no había vuelta atrás.

__Ruemma__ llamo Aegon __No siempre fui un monstruo, me hicieron ser así __suspiro__ No sabes lo que es estar en mí lugar, nunca lo entenderías.

__Me da igual lo que digas Aegon__ contesto fríamente ella observandolo fijamente __Te aseguro que te mataré, haré que sufras cada segundo.

El sonrió nuevamente ante sus palabras __aunque no lo admitas te conocemos Ruemma, sabemos tu punto débil y es tu familia pero... __respondio alegremente al querer ver la mirada de ella de lo que tenía que decir __ Lucerys es más que tu punto débil ¿o me equivoco?

Ruemma observo sorprendida a Missa, rogaba de que que ella no le haya contado a los Hightower sobre qué Lucerys seguía vivo pero lamentablemente no fue así, Missa desvío la mirada regañadamente al sentir la decepción en los ojos de Ruemma.

__James pensé que nuestro querido sobrino alcanze tu corazón Ruemma, pensaría en cualquiera menos en el bastardo de Lucerys__ siguió hablando Aegon sin perder ni un solo segundo cada gesto que hacía Ruemma.

__Atrevete a tocarlo y te arrancare lo más preciado que quieres Aegon__ contesto Fríamente ella sabiendo que lo más preciado para el era su verga.

__Oh Ruemma yo sé que te encantó esa noche, esa noche te hiciste una mujer, mí mujer__ contesto sonriente observandola fijamente __Fui el primero en cogerte, en quitarte tu preciada florcita y no sabes cuánto me alegra eso.

__¡Es hora de irnos!__ ordenó Missa hacia Aegon enojadamente, fue suficiente escuchar todas las palabras que salían de la boca de su Rey.

__pero aún falta matarla__ respondió Aegon apunto hacia a Ruemma que cada vez se sentía más débil comenzando a respirar pesadamente.

__¡Dije que es hora de irnos!__ gritó furiosa.

__Soy el rey, yo mando__ contesto cínicamente pero opto por hacerle caso al ver la fría y enojada mirada de ella __Nos volveremos a ver Ruemma__ contesto con una sonrisa ladeada para después irse junto a Missa, sin poder mirarla por última vez.

__No te irás tan Fácil Aegon__ Exclamó Ruemma observandolo seriamente.

Gracias a qué Bluewind era el dragón más veloz rápidamente atacó con un fuerte y decidido Dracarys logrando que Aegon tuviera muchas quemaduras graves.
Gracias a esto comenzó a caer junto a su dragón, Missa observo con una sonrisa a su hermana para después ir en busca de su Rey.

....

Ahí estaban, tranquilamente viendose uno al otro, Rhaenyra con una sonrisa tomaba la mano de su segundo hijo mientras la acariciaba, todos podrían aceptar que era una hermosa mirada radeante llena de amor.

__Me alegro que estés aquí, mí pequeño__ informo ella con una sonrisa para después depositar un suave beso en su mano derecha.

__Me alegra volver a verlos__ respondió el gentilmente sonriendole a su bella madre __aunque falta Jacaerys__ respondió tristemente.

Amaba a su hermano, la persona que siempre estuvo con el, llenando cada segundo recuerdos de ellos juntos, todos sabían que los hermanos eran inseparables.

__Descuida__ sonrió felizmente Rhaenyra abrazándolo __ Ya deben estar cerca, al fin la familia será reunida.

__Ya no puedo esperar a verlo madre__ sonrió el en respuesta.

Aunque Lucerys nuevamente comenzó los dolores de cabeza, recordando las palabras que siempre le recordaban, "Bastardo".

Rhaenyra rápidamente se preocupo comenzando a sujetar la cara de el entre sus manos deseando que eso dolores pasaran a ella para que su pequeño hijo no sufriera más, entre lágrimas lo abrazo rápidamente.

Lucerys lloraba, no podía aguantar el dolor, en especial los recuerdos que venían una y otra vez en su mente.

__Eres un Bastardo, al igual que tus hermanos__ Respondió arrogante Otto __Merecen morir de una vez.

__Mirate a un espejo, ¿Crees realmente ser un Velaryon?__ pregunto Alicent en burla.

__Hijos de una gran puta ramera__ susurro Ser Criston hacia Lucerys observandolo con una sonrisa cínica __como lo esperaba, son Bastardos.

__Eres el más débil__ contesto Aegon en burla __¿Crees que te mereces todo esto? ¿Alguien como tu? Maldito bastardo __Exclamo__ Solo mírate un sucio y asqueroso bastardo, débil y tímido.

__Madre por favor has que paren estos dolores__ Rogo Lucerys entre llantos, cerrando fuertemente sus ojos deseando que el dolor se fuera rápidamente para no regresar nunca más.

Escucharon como alguien tocaba la puerta rápidamente, Rhaenyra vio como uno de los caballeros entraba para querer informarle sobre algo.
Ella rápidamente se paró de su lugar sin despegar su mirada de Lucerys.

No podía creerlo, no quería creerlo, las palabras del caballero hicieron que derrumbaran la única bondad que tenía en ella, recordando el día que perdió a Lucerys.
Rápidamente con dolor en su corazón se desmayo.