La última gota al vaso de agua hace que se pierda el equilibrio, que todo se derrame.
Un claro ejemplo de como se sentía quackity, el pobre chico sufrió en su vida pasada, comenzó algo nuevo pero lamentablemente las personas de su alrededor lo hacía...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Cuando estaba cambiado y como nuevo me dirigí al comedor para probar un poco de mi comida, cada mordida a la exquisita carne era el mejor, una sensación de sabrosura, como si fuera algún dulce.
Los intestinos eran mi favorito, aunque no negaría que la piel y la carne en ella sabía bien pero no era regular, me hacía tacos con la carne que tenía ya que me representaba y disfrutaba con los ingredientes que le añadía, después de un rato ví que eran las 6:00am esperaba que en cualquier momento vinieran, se me hacía extraño que no vinieran pero no le di importancia, después de comer me dirigí hacia la cama.
–dios, me dió el mal del puerco–me quejaba mientras estaba acostado intentando recuperar el sueño faltante pero los golpes de la casa me interrumpió en eso, me quejaba como un niño pequeño, me puse la mascara y la ropa habitual mientras gritaba "voy" para ir a atender quien fuera.
–quien?–decia ya en la puerta esperando a que contestaran, escuché la voz de el rubius diciendo "yo" solamente abrí sin problemas, el se veía pálido y lo mire confundido.
–tienes que ver esto...–dijo el en un susurro, nosotros solo avanzamos hacía el pueblo.
Llegando pude ver mi creación, mire de nuevo a rubius que tenía una expresión de asco, mire de nuevo hacía donde estaba aquel cuerpo ya tapado y Vi a los demás, ellos tenían una cara de preocupación menos luzu, el tenía una cara neutra pero se notaba en sus ojos que estaba furioso por lo que sucedió.
–que sucedió...–dije en un susurro, ví que staxx se acercaba hacia nosotros.
–hola quackity, apenas de avisamos a los demás de dije a rubius que fuera por ti, perdón por levantarte, no hay muchas pruebas, las cámaras están jodidas, no hay cintas no hay nada, esto es muy malo pero vamos a avanzar en esto–dijo staxx dándome la información de todo y alentandonos a algo, yo no dije nada solo asentí cómo aceptando eso.
Tardaron unos minutos, ayude a comunicar a la gente que no se preocupara y todo eso mientras los encargados retiraban el cuerpo.
Después de horas de estar con ese tema todos nos dirigimos de nuevo hacía la oficina de sapopeta para poder hablar con tranquilidad.
–bien, se está haciendo muchos estudios con el cuerpo, según y no mal recuerdo, la mayoría de sus órganos fueron robados, debemos parar esto de inmediato o si no esto será peor, no sé a qué viene de repente esto, todo fue de repente y no es bueno, según he escuchado que un nuevo ciudadano llegó aquí y tengo sospecha que esa persona está relacionado con esto, tenemos varias pistas de como se ve la persona pero por lo que me informan es alguien muy escuridiso y desaparece al segundo, no sé que clase de persona nos vamos a afrontar pero no nos tenemos que separar ni traicionar ninguno de nosotros, me importa un carajo si hubo problemas, ahora en este momento los quiero unido a todos, me dijieron una cosa que se me estaba olvidando decir, el corte de el cuerpo que tenía nuestro guardian fue causado por un pico, es peligroso y me sorprende que una herramienta tan simple pueda causar eso–termino de decir sapo peta en todo eso, nos miramos entre todos y empezamos hablar sobre cosas sin tanta importancia.
Después de salir de esa junta me dirigí hacia mi hogar pero una mano me detuvo, mire hacia atrás y mire a esa persona que no era de todo mi agrado.
–quacks, perdón por lo que te dije lo de hace unos días, no estaba muy bien que digamos, fue sobre la alcaldía y eso se me fue de las manos mis emociones y lamento decir aquello, estos días se están volviendo intensos y me preocupa que te pase algo...podemos empezar de nuevo sin peleas y eso–dijo luzu con una sonrisa, lo miraba con asco pero sabía que no me podía ver, pero al final de todos sonreí, lo mire a los ojos y asentí.
–esta bien lusu, te perdono no quiero que haiga problemas entre nosotros–dije con un falso tono de voz alegre haciendo que el se confundiera y pensará que estaba bien realmente.
El me sonrió y me abrazo, un abrazo que me hizo dar asco pero le correspondía, no quería que nadie sospechara algo y si tenía que pasar por aquello debía actuar con claridad y no cometer una locura haciendo que ellos desconfiaran de mí.
Empezamos hablar sobre temas al azar haciendo que nuestra aura sea como antes pero en el fondo quería matarlo, quería hacerlo sufrir, el me hizo sentir como la mierda junto los demás y eso nunca se lo perdonaría.
Cuando retomamos nuestros caminos en diferentes lados me dirigí hacia mi hogar pero sentía que alguien me seguía, miraba a mi alrededor pero no veía a nadie.
–vaya, vaya, mira que me trajo la vida, otra vez de nuevo Big Q–decia esa voz que reconocí enseguida, sonreí en grande emocionado por aquella voz y mire hacia el lugar donde estaba topandome con el, con esa persona que odie y ame al mismo tiempo.
–imbecil, que demonios haces aquí, no debes estar aqui–dije con un claro tono molesto mientras me acercaba a el, al igual que el se acercó hacia mi, sabía que no había nadie más asi que no me preocupaba.
–explorando, ya no tengo nada que hacer en el dsmp, la verdad no me sorprende que hayas huido de ahí, pero me sorprende que estés haciendo el mismo camino que hacías allá –dijo con burla, rodee los ojos fastidiado por eso pero solté una risa ya que tenía razón en eso.
–debes de irte, ya te tienen en la mira y te culparán a ti–dije con una voz sería, no debía importarme pero lo hacía.
–vaya, no lo haré, aún no me divierto apenas llegué hazme un espacio a tu diversión, juguemos como antes, hagamos caos nosotros dos darling–decia mientras me agarraba de las manos y hacia que tocará sus mejillas, me sonroje por aquello ya que de una o otra forma me convencía, aunque sabía que no iba a ocasionar problemas (probablemente) me acerque hasta el hasta quedar a pocos centímetros sonreí y el me sonrió, sabía perfectamente como era, sentí que su mano saco mi máscara y sin dudar nos besamos con lentitud, disfrutando del sabor que teníamos entre nosotros, el se alejo y acomodo sus lentes.–entonces eso es un si?–dijo de una forma un poco avergonzado, rei por aquella forma que tenía mientras asentía, platicamos un poco hasta llegar a la casa, nos teníamos que acomodar primero, planear las cosas y después hacer el dúo que éramos antes.