Observe a Uziel teniendo mis ojos entrecerrados ¿Enserio esto era verdad? ¿O era fruto de mi imaginación? Me di un leve golpe en la frente mientras que Freda directamente ni lo miraba, Cira había lanzado a Uziel en el centro donde estaba toda la luz mientras jugaban. ¡No los vuelvo a traer a ninguna misión más! ¡No puede ser que la estén liando siempre! Había pasado un tiempo desde que me contrataron, habíamos estado conviviendo y me ayudaban en misiones para mantenernos pero siempre tenían que hacer algo para liarla aquel par de dos. Al estar Uziel en plena luz solo sonrió nervioso levantándose de inmediato, los guardias comenzaron a disparar en dirección a él y el iba esquivando como podía las balas.
- Ala! ¡A la mierda el plan!
Dije quejándome por la situación, suspiré saltando sin pensar en que podría hacer, iba a improvisar así que mientras caí al suelo iba disparando a los guardias. Freda les disparo desde el techo que era donde estábamos, con su buena puntería les daba en la cabeza. Cira por otro lado no sabía bien que hacer, al caer salte sobre Uziel protegiéndolo, no me podía creer que lo tendría que usar pero ya no quedaba más remedio.
- Levanta las piernas.
- ¿Que? ¿Qué dices?
- ¡Que las levantes!
El salto levantando las piernas como ordene, lo agarre fuerte rodeando su pecho con mi brazo, salte impulsando nos hacia los guardias, dimos una vuelta sobre nosotros mismos logrando darles una patada a todos aquellos para que cayeran al suelo. Freda los disparo asegurando su muerte, observe a Uziel y le apunte con mi dedo.
- Que sea la última vez que jugáis mientras estamos en una misión.
- Esta bien mamá.
- Podrías haber muerto, idiota.
- Ow, te preocupas por mí que lindo.
- No te flipes.
Freda salto junto a Cira apareciendo a nuestro lado recargando las armas.
- Bueno parejita ¿no tenemos que robar algo?
- Vayámonos de aquí lo antes posible.
- ¡Si mamá! --Dijeron Cita y Uziel--
Puse mi arma en mi espalda para luego indicar que me siguieran, era difícil continuar ya que estaban alerta de que habían intrusos adentro de aquel museo. Nos habían encargado robar una roca con cara, era una de las cosas más raras que había escuchado y parecía algo tonto pero en fin, debía comer. Caminamos en sigilo por el pasillo oscuro pasando por las sombras, la tensión que había era más que notoria al igual que las ganas de irse por parte de ellos. Logramos llegar hasta una sala enorme donde habían un montón de pinturas expuestas junto a unos bancos en medio de la sala, Cira abrió la boca al ver aquello y como niña pequeña quiso entrar pero la agarre del cuello del jersey tirándola hacia a mi indicándole con la cabeza que no avanzara más.
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Atlantis
Science FictionLa luna está hermosa hoy ¿no crees? Los sentimientos son indomables, estamos todos destinados a vivir grandes aventuras. Katia cazadora de recompensas las vivirá, protegiendo a sus nuevos clientes que huyen de Skr. Puede que todo te indique que va b...