Capitulo 2: Selene

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Mis padres me trajeron hasta aquí,no sé con que intención,pero la idea no me gustaba nada, y más cuando alcé la vista y pude ver aquellos tenebrosos y viejos torreones en los que habitaban murciélagos. Mi cuerpo se llenó de pánico yo no quería entrar ahí pero no me quedaba otra. Ese internado parecía sacado de una película de terror y se reencarnaba aquí delante mía. La idea de que tuviera que estar allí bastante tiempo me llenaba de pánico, al menos me sé defender gracias a mis clases de kárate,pero no creo que eso fuera suficiente,toda la gente que entraba por aquellas gigantes y viejas puertas tenían el aspecto de llevar toda la vida luchando,l o que amí me hacía parecer en ese momento una niñita miedosa. No me paré más a observar lo que me rodeaba ya que si lo hacía seguramente saldría a correr y no atravesaría nunca ese edificio tan tenebroso, asi que entré por la puerta principal y tuve la osadía de subir unas escaleras larguísimas que no sabían a donde iban, pero yo me dejaba guiar por la gente. Pude divisar una clase,en la que todos entraban, y todos parecían felices, todos menos yo.Me daba la impresión que sería la rarita del internado, acabaría acostumbrándome,supongo.

Me senté en un viejo pupitre,la clase aportaba el mismo temor que el enorme castillo tenebroso por así decirlo, una señora mayor entró, no parecía muy simpática y sin saludarnos nos aportó este discurso:

-Queridos alumnos del Instituto Neverhood, yo, como vuestra directora os doy la bienvenida a nuestro centro de enseñanza. Como ya sabeís no solo cursareis vuestro estudios aquí, también os enseñaremos y prepararemos para luchar y poder desenvolveros en vuestra vida diaria, que como gerreros, protectores o lo que seaís de aquí, necesitareis. Vuestras habitaciones las sabreís porque vendrán en la hoja ya dada donde también figura el horario. Como alguien se retrase lo más mínimo tendrá serios problemas. Ya esta todo. Si alguno tiene alguna duda, ni se moleste en preguntarme y como ya sabreís no todos valen para esto.

Miré la hoja que me dieron,y salí lo más rápido posible de aquella clase, estaba muerta de miedo. Esa señora dijo lo que sea de luchar, yo no entendía nada, casi tenía ganas de llorar. Corrí por todo el pasillo esquivando lo mejor que podía a la gente, esta me miraba sorprendida, supongo que parecería que estaba ida, pero tenía mucho miedo.Entré lo más rápido posible a mi habitación y para no variar era oscura, con viejos cuadros de criaturas fantásticas, y ladrillos muy antiguos, lo que me hizo saber que ese instituto llevaba bastantes siglos construido, al menos aprendería algo de historia.Me senté en la cama y esperé a que alguien me dijera que estaba pasando, entonces para mi asombro chirrió la puerta y allí estaba mi compañera de habitación, o eso fue lo primero que se me vino a la mente, ojalá ella me ayudara.

Nerverhood: Nacidas para lucharDonde viven las historias. Descúbrelo ahora