¿Del odio al amor? mejor dicho, del amor al odio, esta historia relata la de dos jóvenes, una rebelde y un guardia, a lo largo de la historia se irán rebelando secretos, secretos que arruinaran esa hermosa relación entre ambos adolescentes, la más j...
como en todos los capítulos tenéis música lofi en la multimedia para disfrutar más a fondo la lectura <3
Poco a poco fuiste acercándote al rubio, ahora que tenías claro tus pensamientos no querías callarte, no querías resistirte a decir un "te amo" en su cara, no querías aguantarte a besarle... el rubio también fue acercándose de una lenta manera, hasta el punto que vuestras respiraciones se mezclaban, podías oler de nuevo ese aroma que tanto te encantaba hasta que por fin, vuestros sentimientos se unieron al igual que vuestros labios...
Notaste como su mano subía a tu mejilla, te estremeciste un poco, más sin embargo no te disgustaba su ligera caricia, seguidamente sentiste como el chico profundizaba un poco aquel beso, haciendo que vuestros labios se moviesen a un ritmo perfecto, haciendo que la magia de ese momento no hiciese más que aumentar.
Estabas experimentando la sensación que es estar enamorada, ese famoso cosquilleo más conocido como "mariposas en el estómago" y te estaba encantando... no te podías engañar a ti misma y mucho menos después de haberle besado; Hunter te atraía, te atraía física y mentalmente, podrías decir perfectamente que todo de él te encantaba, desde sus dulces acciones hasta su engreída personalidad en algunos momentos.
Al separaros viste cómo el rubio intentaba esconder un notario rubor carmesí, fracasando en el acto ya que sus puntiagudas orejas, parte de su cuello y sus manos temblorosas indicaban lo nervioso que estaba.
Supusiste que tu estarías igual o más sonrojada que él, por lo que bajaste la vista evitando el contacto visual, mientras que un silencio un tanto incómodo se instalaba entre vosotros
-creí que me apartarías...- hunter rompe el silencio ya más calmado
- ¿Por qué haría yo semejante tontería? - preguntas mirándolo de reojo notando como el chico se ruboriza de nuevo apartando la vista, suspiras después de unos minutos en silencio - hunter...- el chico te mira - ¿qué somos? - de nuevo baja la mirada, pensativo
-¿Qué quieres que seamos? - responde con una ligera sonrisa
- quiero... quiero que seamos más que amigos... pareja, compañeros de vida si lo prefieres, pero ante todo quiero estar contigo, confiar y amarte ¿Es eso mucho pedir? - murmuras avergonzada.
El chico se sorprende ante tus palabras, no obstante una cálida sensación invade su interior, haciéndole sonreír tímidamente, este reúne valor para acercarse a ti, darte un beso en la frente y seguidamente levantar tu rostro cabizbajo con una de sus manos y besarte.
-Para nada es mucho pedir... - dice sonriéndote
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Unas semanas pasaron después de ese mágico momento para ambos, vuestra relación había cambiado bastante desde entonces, Hunter se volvió mucho más cariñoso contigo, siempre se aseguraba de hacerte sentir lo más cómoda posible dentro de su habitación, aunque no pudieses salir de ella. Dormíais juntos, comíais juntos y como era ya costumbre leíais libros de magia juntos.
