Conversar/Hacer sonreír

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Debido al estar lastimado, el coronel se tuvo que quedar en el castillo, dónde pasaría el tiempo hasta que su pierna mejore... Eso le preocupaba mucho, temía que Moge-kov pensara que le pasó algo, o que Moge-Ko volviese a intentar lastimarlo hasta matarlo, aunque el rey le prometió que tendría todo el cuidado posible por su parte mientras se encuentre aquí y en ese estado aún más, por lo tanto tendría que hacerle caso a sus palabras... Después de todo, el era el rey del castillo, por lo tanto lo que el dice tiene que ser escuchado o creído sin excepción... El coronel solamente esperaba que no estuviese planeando algo, cosa que para su suerte no era así, solo que no lo sabía..
Hashasky se encontraba en la habitación de Mogeko, en la gran cama con sábanas rojas, con su herida vendada y ya más tranquilo. El mayor le dijo que se quedara quieto, pues podría lastimarse más si movía la pierna rota, y dejar de caminar por mucho más tiempo, cosa que el menor hizo caso, ya que quería recuperarse lo más pronto posible para volver a su hogar, extrañaba a Moge-kov y temía que ella pensase que le pasó algo...
Estar sentado no era tan divertido, y sumando que el rey se había ido a almorzar con los demás del castillo, significaba que estaba solo en aquella habitación, sin poder hablar con alguien siquiera... Solo miraba la ventana dónde provenía una brillante luz, algo opacada por las cortinas, pero como dije, entraba suficiente luz..
«¿P-porque me salvó? P-pense que me odiaba más que nada... ¿Q-querrá algo de mi? Si es así, ¿Q-que?»
Desde que lo salvó, cual no fue hace mucho, más bien como hace 1 o 2 horas, eso era lo único que se encontraba en su mente, aquella pregunta cuál temía recibir la respuesta de esta... Por miedo a ser algo aterrador... Estamos hablando del Rey Mogeko, el ser más egoísta he depravado, bueno, no tanto pues lo salvó... Pero según los pensamientos del coronel: Seguramente lo salvó para obtener algo a cambió... ¿No? Sigue siendo el monstruo que una vez consideró "mejor amigo"... ¿O no?
Los pensamientos del de pelaje blanco serían interrumpidos por el sonido de una puerta abrirse, el Rey había vuelto. El coronel temblaba un poco, por una extraña razón, aún cuando debía de sentirse a salvó, pues el lo había salvado

—¿Tiene hambre..? Yo.. Le traje algo de Prosciutto, ¿Quieres..?— Diría el rey, de forma algo... Tímida al parecer, extraño, eso le hacía recordar a cuando lo había conocido...
Se sentó a su lado y le ofreció aquel aperitivo, el coronel nunca había probado eso antes, pero como tenía hambre y no había desayunado ese día, no le quedó de más que aceptar. No importaba si le gustaba o no, solo quería comer. Para su suerte, al dar el primer bocado, si le supo rico, así que comía agusto. No eran uvas aplastadas, pero igual era delicioso
El Rey Mogeko solamente lo miraba comer, acariciándole con extremó cuidado la herida, cual ya no sangraba tanto, si lo hacía, pero poco... El silencio reinaba la habitación, pues no sé dirigían la palabra, ¿Por miedo? ¿Por incomodidad? ¿Por vergüenza? Una combinación de las tres, pero por parte del Rey, era una mezcla por miedo y culpa... —Sabe bien, sorpresivamente—

Bueno, a todos del castillo le gusta... ¿Se siente mejor?— El de blanco asistiría, Ya habiendo de terminar de comer aquella comida. Otra vez, el silencio reinaba... ¿Porque era tan difícil mantener una conversación? Digo, ¡Ellos fueron los mejores amigos en la niñez! ¿No que lo conocía mejor que nadie? ¡Por lo tanto se le tendría que hacer fácil tener una conversación con Hashasky..! Pero no era así, igual, después de todo, seguramente el coronel cambió o algo parecido. No todo es para siempre, ni aunque quisiera... —Vuelvo a disculparme por lo que Moge-Ko hizo, creeme, sigo apenado— Diría, mostrándose bastante apenado, como dijo —Esta b-bien... Pero... ¿P-porque te preocupas tanto? P-pense que me odiabas..— Otra vez, el silencio se quedó, por poco tiempo en esta ocasión —¿Quien dijo que lo odiaba?—
—¿Eh..?— El coronel se quedó confuso, ¿En serio no sentía odio por el? Tampoco que el odiase al rey, pero pensaba que el rey lo odiaba a el... —Solamente es un capricho, ¿Bien? No se estrese tanto— Diría el rey, apartando un rato su mirada del Coronel...
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—Gracias... Por tener ese capricho— Dijo el de blanco, con una pequeña sonrisa en sus labios. El rey se ruborizo de forma ligera, tampoco tan notoria por suerte —No me agradezca... En serio, lo hubiera hecho cualquiera—
—Pero no cualquiera con su personalidad—
—... Tal vez..—

Little Romance |C. Hashasky X King Mogeko|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora