I Wanna Be Yours | VegasPete

Capítulo 16

Vegas se había levantado primero y sin despertar a Pete, se sentó en la orilla de la cama mirando a su pareja con una sonrisa, su pecho estaba descubierto y las marcas que había dejado anoche eran visibles, tanto así que se sintió orgulloso de verlas.

La mañana era linda, los rayos del sol que se colaban por la ventana al no tener sus cortinas cerradas alumbraba la habitación y eso ayudaba a que Vegas viera mejor a su pareja. Con cuidado, dirigió su mano a la mejilla de Pete y la acarició con delicadeza sonriendo en el acto. Disfrutando la suavidad de su piel, admirando la como siempre le gustaba hacerlo.

Pete era su mundo, podía decirlo sin cansarse, Vegas siempre admitiría lo que Pete era para el.

Sonrió en grande al ver cómo Pete abría sus ojos y parpadeaba un par de veces acostumbrándose a la luz, se veía tan tierno, el chico frente a Vegas era el Pete más lindo y tierno, el que podía hacer saltar de ternura al corazón de Vegas, el único. No estaba el Pete que trabajaba en la primera familia, el jefe de guardaespaldas del primer hermano, el que mataría por proteger a Tankhun o si se lo ordenan. Solo era Pete, un Pete que estaba alejado a eso, dónde podía ser el.

Y eso era lo que más amaba  Vegas. Se sentía tan cómodo estar a su lado, en donde ambos podían ser ellos mismo dejando caer las máscaras que llevaban todo el tiempo.

— Si continuas observándome te denunciaré por acoso — Pete dijo en broma acercándose a su pareja.

— ¿Denunciarme? El que debería denunciar a alguien soy yo — Vegas besó la frente de Pete con amor — Un bonito chico me manipula a su antojo, ¿Me maltrataras a futuro? Eso sería maltrato doméstico, merecido denunciarte.

— ¿Maltratar te? Sigue diciendo eso y lo haré, idiota — Ambos soltaron pequeñas risas por las estupideces que decían — ¿Macao aún no llega?

— No, llegará en una hora.

La noche anterior, un Macao emocionado había llamado a Vegas preguntando si podía pasar la semana con el en Sai Kaew Beach.

Por qué si, Macao no era tan tonto, no pasó ni un día entero cuando se enteró que su Hia había ido a la playa de Sai Kaew Beach con su pareja, ¡Una semana! Al principio se sintió indignado por qué quería ir, pero una llamada a su hermano mayor con ciertas quejas y casi rogando ir, bastó para que esa mañana estuviera a una hora de llegar y, finalmente, conocer al chico que logró domar a su Hia.

Y justo como lo había dicho Vegas, el menor llegó una hora después de que ambos se hayan alistado, la camioneta negra se estacionó en un estacionamiento no muy lejos de donde se hospedaba la pareja. Macao se acercó al hotel junto a los guardaespaldas que lo acompañaban.

Pete estaba nervioso, mordió su labio inferior jugando con sus manos tras su espalda, pero poco sabía que no era el único nervioso, Macao, quién trató de sonreír tranquilamente, tembló un poco por cada paso que daba, la opción de retroceder y regresar estaba fija en su cabeza, pero también estaba la opción de quedarse, y esa era una decisión que tomó desde un principio, solo le quedaba ejecutarlo.

— Hia, P'Pete — Macao saludo y abrazó a su hermano mayor, después miró a Pete fijamente. Pete le sonrió tratando de no mostrarse nervioso e hizo una reverencia mostrando respeto.

— Khun Macao, es un gusto tenerlo aquí — El menor frunció su entrecejo acercándose a Pete.

— Gracias, pero dime Macao o Nong Macao, Khun suena muy formal y tú eres la pareja de mi hermano — Comentó, Pete lo pensó y así asintió un poco incómodo.

— Entonces será Nong Macao — Respondió, mirando al menor tranquilamente, dejando el nerviosismo a un lado, hasta que Vegas habló.

— ¿Tienen hambre? — Preguntó después de dejar los dos interactuaran y él hablaba con los guardaespaldas. Ambos asintieron.