I Wanna Be Yours | VegasPete

Capítulo 14

¿Qué tan nervioso pensaba que estaría cuando Macao me preguntará algo acerca de lo que ha sucedido las últimas semanas? No había pensado que tanto, incluso no pensé en el temor que sentí por el como se lo tomaría, Macao es importante para mí.

Siempre cuidé de él desde pequeño y mi cariño hacía el era muy grande, tanto así que daría todo el mundo por su felicidad, Macao era la única familia cercana a mi que tenía y contábamos el uno con el otro, no importaba nada más, solo el y yo, hasta que llegó Pete. Ambos son las personas más importantes para mí y al igual que Macao, daría todo el jodido mundo por la felicidad de Pete.

El alivio que sentí cuando Macao sonrió y me abrazo diciendo que lo aceptaba relajó mi cuerpo que, sin darme cuenta, se había tensado.

— Puedo aceptarlo Hia, tu felicidad será la mía y si él te hace feliz está bien — Dijo con una sonrisa y un tono de voz cálida — ¡Quiero conocerlo!

Sonreí por sus palabras, despeiné sus cabellos haciendo que se quejara y soltara un suspiro indignado.

— Lo conocerás, le diré que quieres conocerlo, te aseguro que el también estará ansioso por conocerte — Dije logrando que los bonitos ojos de Macao brillaran un poco sonriendo levemente.

Procuraba la felicidad de Macao, siempre sería importante para mí y deseaba que realmente a Macao le agradará Pete y viceversa, la comodidad en ambos era una prioridad en ese momento porque, para ese punto, para mí era necesario tenerlos a los dos justo en esos momentos. Eventualmente podría seguir con Macao cómo había sido los últimos años, pero ahora que Pete entró y generó tantas cosas en mí, era imposible dejarlo ir de mi lado.

Él ahora tenía una gran parte de mi corazón y me destrozaría estar lejos de él.

Trataba de mantenerme tranquilo, nunca había sido una tarea difícil pero en ese preciso momento me sentía tan nervioso. Sentía la necesidad de desaparecer, pero era más grande la necesidad de tener por siempre a Pete, de estar con él libremente sin barreras ni límites, sin ocultar nada. Pero era consiente de las cosas y entendía que aún no era el momento de hacerlo, no en la situación de mierda que cruzábamos ambas familias.

Podía sentir la presión que esos últimos días habían dejado en mi, pensar en todo lo que tenía que hacer para alcanzar espectativas que no alcanzaba realmente solo por complacer a mi padre era un asco, estaba olvidado a mi yo real. Entendía de sobra que era inútil, pero había tenido cierta esperanza de lograrlo muy al fondo de mí; era estúpido, pero una parte de mí realmente quería hacer sentir orgulloso a mi padre.

Que difícil.

Difícil ser el hijo de la segunda familia, siempre el segundo, bajo la sombra de Kinn que tuvo la maldita suerte de nacer en la jodida primera familia, Kinn siempre sería mejor que yo aunque tratara de ser mejor que el. Los tres, Tankhun, Kinn y Kim, era mejores que los de la segunda familia.

Podía ignorar ese hecho y seguir con mi vida fácilmente pero... La rivalidad de mi padre y su obsesión de que sea igual a Kinn llegaba tan lejos que logró tenerle odio a los de la primera familia, era una presión tan grande que el odio crecía cada vez más.

Mierda, que vida.

No la deseaba, deseaba algo mejor, incluso si nacía fuera de esa familia, aunque no tuviera los lujos que tenía en ese momento, podía estar mejor solo si mis padres no fueran así, al menos un padre como lo era el que tenía, mi madre era tan bondadosa y cálida; ella era hermosa,  tenía una linda sonrisa y era tan bella, me aferraba a mis pocos recuerdos de mi madre.

Ella siempre sonreía incluso si mi padre era una mierda de esposo con ella, siempre fue amorosa conmigo y con Macao, y era tan doloroso ya no tenerla aquí.