Libro 2 de la saga "Maldito Romance" es necesario leer el primer libro "Maldito Romance: Él inició" para entender este libro
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Quedarme y decir la verdad no estaba en mis planes. Para mí resultaba una mejor opción escapar y no decirle a nadie...
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Jamás me imaginé volver a ver tu rostro justo frente al mío mientras duermes, pensé en la única ves en que fui feliz a tu lado. Éramos tu, yo y un inmenso acantilado, teníamos todo y no lo sabíamos, nos amamos sin decir nada, nos miramos a los ojos y luego simplemente nos alejamos
—¿Recuerdas esa noche en aquel mirador?— hablo entre susurros, lo veo asentir por lo que me doy cuenta que no está dormido
—Fue el primer día lleno de felicidad para mí. Aunque solo fueran unos instantes— acaricio su mejilla mientras hablo
—Aún no puedo creer que solo hayamos dormido mientras tú tienes esa sexy pijama y yo estoy medio desnudo— habla aún medio dormido pero con una sonrisa en el rostro
—Eres un maldito pervertido, yo intento ser sincera y romántica mientras tú lo arruinas todo con tus obscenidades— tomo una almohada y le doy un golpe
Me levanto molesta y miro la hora en mi teléfono. Son casi las 11 de la mañana
—Ay no, esto es horroroso. Tengo trabajo atrasado que hacer y estoy perdiendo el tiempo durmiendo— refunfuño mientras entro al baño por una ducha
—¿Soy una perdida de tiempo?— grita Cameron desde la cama
—No, eres el chico migraña que me hizo perder tiempo— me río a carcajadas desde el baño
—Cariño, no irás a la empresa hoy— lo escucho hablar junto a la ducha
Me da risa su comentario y cierro la llave del agua —No te estaba preguntando
—Yo tampoco— responde
Abro la puerta de la ducha sin recordar que estoy completamente desnuda y él está justo frente a mí
—No me molesta verte así, pero no creo que quieras ayudarme a calmar a mi amiguito después— dice divertido mientras recorre mi cuerpo de arriba a abajo
—Estas loco Cameron Williams— digo mientras tomo una toalla y envuelvo mi cuerpo en ella
—Puede ser, pero solo estoy loco por ti Laura Evans. Vamos a ir con la psicóloga que te atendió ayer. Tenemos mucho de que hablar caramelito— hago un puchero y bajo mi mirada al suelo. No quiero ser infantil pero es que la psicóloga solo me hace sentir más mal de lo que ya me siento
—Entrare contigo, no te preocupes— intenta calmarme y no se si funciona
Salgo del baño y busco que ponerme, me decido por un traje elegante ya que según el cronograma hoy en la tarde tenemos una reunión con todos los inversionistas
—¿Cual es mejor? ¿El azul o el verde?— le pregunto a Cameron quien está escribiendo algo en su teléfono
—El azul— dice sin siquiera mirar por lo que decido llevarle la contraria y ponerme el verde oscuro
