Maybe You Should Fall ✦ KookV

Capítulo 4

4- Aretes.

Sus dedos delgados trabajan en el lóbulo de su oreja izquierda, luchando contra el cierre del arete que había elegido para completar el outfit de esa noche.

Se había decidido por una botas negras, jeans oscuros ajustados y una blusa blanca transparente que llamaría la atención de todos.

Lucía como el pecado encarnado. Su cabello rosado resaltando salvajemente contra los colores neutros, dándole la ventaja suficiente de parecer aún más hermoso de lo que ya era. O al menos eso era lo que Jungkook le había dicho.

El menor estaba sentado en la cama detrás de él, observándolo con los ojos entrecerrados, explorando cada curva y borde del cuerpo de Taehyung.

Eran estos momentos en los que Jungkook deseaba no necesitar un trabajo. Podría renunciar, ¿tal vez llamar y pedir la noche? Si su jefe tuviera al menos medio cerebro funcional, entendería que el culo de Taehyung era demasiado bueno como para dejarlo pasar esa noche.

Al diablo con los pagos de la matrícula, él quería tirarse a su mayor aquí y ahora. "Te ves..." El pelinegro hizo una pausa, levantándose de su asiento, ya demasiado aburrido de ser solo un espectador. "Muy bien, cariño."

Taehyung generalmente lo regañaría por el apodo, refutando que los términos de las palabras cariñosas estaban prohibidos por comodidad. Como había dicho muchas veces antes "Los apodos cariñosos son solo otra forma en que las personas fingen que realmente son cercanas a alguien."

Jungkook también se había reído de eso. Kim siendo amargado, pero no dando ninguna queja cuando lo llamaba "muñeco" o le decía cosas sucias en la cama, le daba gracia.

Y Taehyung también podría burlarse. No obstante, dado que el joven consideraba apropiado mirarlo como si ya estuviera pensando en nueve formas de follarlo hasta que no hubiera mañana, dejó pasar el cursi nombre.

"Siempre dices eso cuando salimos." El mayor logró esbozar una pequeña sonrisa, tratando de ignorar las manos errantes de Jeon sobre su cuerpo. "Detente. Me harás llegar tarde."

Él era perfectamente capaz de encontrar otra persona con quien acostarse esa noche en ausencia de Jungkook, quien desafortunadamente tenía que trabajar. Taehyung trataba de no resentirse por ello, casi quería que el otro se uniera a Jimin, Hoseok y él esa noche.

"Eso es porque siempre te ves bien y siempre es verdad."

Taehyung dejó de pelear con los aretes, presionado su labio inferior entre sus dientes mientras miraba a su amante a través del espejo. "¿Estás tratando de cortejarme?"

Jungkook le sonrió descaradamente con ojos brillantes. "Ya he hecho eso. Ahora solo te estoy halagando porque puedo y es verdad."

Oh, este bastardo confiado.

"No me hagas reír. Nunca ha habido nada de cortejo entre nosotros."

Si Jungkook se ofendió, no lo demostró. El más joven siguió sonriendo de esa manera que irradiaba confianza y complicidad, cosa que Taehyung odiaba, mientras metía la mano en su joyero.

"Éste." Sacó un arete largo, con una delicada cadena atada y un dije de luna conectado al fondo. Era el favorito de Taehyung, pero había dejado de usarlo hace mucho tiempo cuando todo el mundo le empezó a decir que estorbaba.

De acuerdo, tal vez no todo el mundo, pero sus aventuras de una noche siempre se quejaban de aquel accesorio. Eventualmente, se molestó por una queja tan insignificante y dejó de usarlo.

"¿Qué estás haciendo?" Taehyung se apartó de las manos de Jungkook, suspirando cuando sintió el ligero pellizco en la oreja donde Jeon había abrochado el arete.

"Vamos, Tae. Es mi favorito."

Se río. "¿Y cómo sabías que lo tenía? ¿Revisas mis cosas ahora?"

"No seas bobo, bebé. Lo usaste para la fiesta de Jin hyung hace unos meses. Se veía bien en ti." Con cuidado, el pelinegro movió suavemente la pequeña luna, observando con satisfacción cómo el amuleto se balanceaba sobre la piel flexible. "¿Te veré más tarde? Salgo a medianoche."

Taehyung todavía estaba abrumado por las últimas palabras del menor sobre la fiesta de Jin. No se había dado cuenta de cuán cerca lo observaba Jungkook, incluso los detalles como lo eran sus elecciones de atuendo.

Se mordió el labio, luchando contra el impulso de responder 'Sí' a la esperanzada oferta del chico.

La cosa era que Taehyung nunca fue bueno teniendo tacto. O amable con las personas con las que se relacionaba. Y siempre era más duro con sus amantes. Algunos lo llamaban 'alejar a otros', pero él simplemente lo llamaba 'ser realista'.

"Si no tengo a nadie más." Dijo mientras se quitaba el arete recientemente puesto por el menor, tratando de no sentir la ola de culpa que latía en su pecho.

No miró a Jungkook, pero sintió que la mirada del joven vaciló, aunque solo fue por un segundo.

"Bien." Escuchó los pasos de Jungkook alejándose y se mordió el interior del labio cuando se dio cuenta que ya estaba apartando la mejilla, preparada para recibir el beso que el chico siempre le daba cuando se despedía, sólo que esta vez no llegó.

Se sonrojó por su acción, fingiendo no estar enojado con Jeon por salirse de la rutina de las cosas.

"Su favorito, dijo." Taehyung arregló su flequillo hacia un lado, admirando el arete en el mostrador.