Capítulo 15

2.9K 418 15
                                    


15- Burbujas.


Los días se habían prolongado entre un sin fin de proyectos de arte, críticas de sus profesores y café que sabía a mierda para Taehyung.

Ni siquiera recordaba la última vez que se había dado una ducha adecuada, una que no fuera de cinco minutos para poder llegar a tiempo a clases. Sabía que seguía teniendo una rutina higiénica, pero no lo suficiente para mantener esa intensidad exótica de su apariencia.

Ahora su cabello generalmente se mantenía debajo de gorros, boinas o gorras de béisbol. Ni siquiera quería mencionar la falta de su rutina de skincare. Francamente, Kim Taehyung ahora era uno de esos desastrosos estudiantes de arte, habiéndose convertido en la persona que había tratado de evitar caer durante años.

"Jimin, necesito una gran taza de café y que un día extra se agregue al calendario para poder dormir un poco, porque..." Detuvo sus palabras cuando llegó al pasillo de su apartamento, parpadeando en sorpresa al ver a un hombre parado en la puerta de su baño.

"Bienvenido a casa, bebé."

Jungkook estaba apoyado en el marco de la puerta de su baño, luciendo tan presumido y sincero al mismo tiempo que hizo que Taehyung se pusiera nervioso. ¿Cómo era posible esa combinación?

"¿Jungkook? ¿Qué estás haciendo aquí?"

No era que no le contentara el tenerlo allí, pero los dos habían estado ocupados con sus estudios y a Jungkook también se le sumaba su trabajo.

Ellos no eran del tipo de personas pegajosas que estaban el uno sobre el otro todo el tiempo. Pero la última vez que estuvieron juntos terminaron dando y recibiendo mamadas rápidas, y con Jungkook durmiéndose entre sus piernas.

Sí, estaban muy cansados, por lo que esto sí que era una sorpresa.

"Eché a Jimin del departamento." Taehyung deseó haber visto eso. "Le dije que necesitábamos tiempo a solas." Terminó con un guiño coqueto.

Tenía que admitir que amaba ese gesto.

"Uh." Elocuente. "Pero, ¿no tienes trabajo?"

Jungkook siempre trabajaba los miércoles. Tal vez el pelirosa estaba tan privado de sueño que estaba empezando a imaginar a adorables y sexys hombres en su apartamento. No es que se quejara si ese era el caso.

"Dije que estaba enfermo, lo dejarán pasar. Ahora, ven aquí."

Jungkook tomó sus manos, acercándolo a él y causando un extraño movimiento en su pecho. Taehyung fingió que su corazón todavía era frío, pero el suave calor que ahora sentía le decía lo contrario.

"Te he extrañado." Wow. Si antes era una calidez lo que sentía, ahora parecía un infierno, pero ¿quién comprobaría que era así?

"No sé cómo responder a eso."

Taehyung estaba acostumbrado a que Jungkook le dijera cosas como esas en momentos inesperados, por lo general siempre había sido así. Pero Taehyung todavía era nuevo en todo eso de la empatía y tratar bien a las personas con las que se relacionaba sin querer sentimientos. Todo era un trabajo de progresión, ¿verdad?

Sintiendo su leve incomodidad, el pelinegro se rió entre dientes. Se movió sonriendo como si tuviera el plan malvado perfecto, y tal vez lo tenía, excepto que malvado o no, a Taehyung no le molestó la vista con la que se encontró cuando en menor casi lo arrastró dentro del baño.

"Jungkook..." Sí, se había quedado sin palabras.

"Me cuidaste mientras estaba enfermo, y ​​es algo que te agradezco, bebé." El menor masajeó sus hombros, sus pulgares presionando suavemente los tensos músculos antes de inclinarse y besar su mejilla. "Entonces, esperaba devolverte un poco de ese amor."

¿Amor? Taehyung no sabía qué decir a eso, pero sabía que no podía negar que el alimentar y cuidar a Jungkook no fue amor.

Si era honesto, su mente simplemente no estaba segura de qué pensar, llevándolo a tener un momento de autorreflexión en el maldito baño. En ese momento fue que se dio cuenta que en medio de velas y agua perfumada, había una flor púrpura, una bomba de baño, seguramente de lavanda.

"Wow." Fue todo lo que pudo decir, sonrojándose levemente cuando encontró al menor sonriéndole con las manos todavía sobre sus hombros.

"Ambos hemos tenido semanas difíciles, ¿verdad?" Ahora estaba acariciando su cuello y besando su piel con tanta delicadeza que Taehyung quería llorar. ¿Qué era esto? ¿Las barreras de su corazón estaban siendo sobrepasadas? "Entonces, vamos a quitarte esta ropa y vamos a relajarnos."

Era una oferta demasiado tentadora. Por supuesto que iba a tomarla.

"De acuerdo." A pesar de sus sentimientos, no iba a ser descaradamente abierto sobre el coro de ángeles que explotaba en su pecho y responder de otra manera.

Los siguientes minutos los pasaron desnudándose e intercambiando algunos besos suaves en los que Taehyung no pudo evitar suspirar. Jungkook solo tarareaba en señal de aprobación, ayudándolo suavemente a entrar en la bañera hasta sentarse detrás del cuerpo más pequeño.

El pelirosa no vivía en un penthouse de lujo en la cima de la ciudad. Su bañera probablemente era apenas lo suficientemente grande como para que cupiera un cuerpo, pero aun así, el otro chico encontró comodidad en sus posiciones.

Jungkook estaba detrás de él, con las piernas recogidas casi saliéndose de la tina para que Kim tuviera más espacio al remojar todo su cuerpo, ambos invadidos por las burbujas. Estaba agradecido por ello, porque el agua tibia fue un cambio muy bienvenido en el horror que había sido su semana.

¿Era esto lo que normalmente hacían las parejas cuando pasaban más tiempo enamorándose y menos tiempo preocupándose por las opiniones que su cerebro creaba sobre las relaciones?

Si era así, es posible que se haya perdido de mucho todo este tiempo. Podría ser. No iba a presionarse a sí mismo, pero, oh, las manos en su vientre le hicieron olvidar todos sus pensamientos anteriores. Las yemas de los dedos de la mano de Jeon rozaron su ombligo, acariciando dulcemente su piel y deslizándose más y más abajo.

Ahora estaba demasiado excitado para cuestionar los detalles de su relación.

"Kook." Taehyung se movió en el agarre del más joven, cerrando los ojos cuando esa mano se cerró alrededor de su pene, extendiéndo por su longitud un golpe de placer que le hizo arquear la espalda y dejar escapar el primer suspiro de alivio de la semana.

"Te he echado mucho de menos, cariño." Dijo Jungkook antes de morder su oído y seguir susurrando promesas sucias y confesiones amorosas, cada una haciendo que Taehyung estallara en llamas.

En un punto no supo si concentrarse en la necesidad de apoyarse en el cuerpo de Jungkook y simplemente acurrucarse o el deseo de empujar sus caderas hacia adelante y terminar lo que el más joven había empezado.

Al final, simplemente cayó. Y siguió cayendo.

Maybe You Should Fall ✦ KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora