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"Jaque mate."

"¡MALDITA PULGA!"

Era el cuarto juego que Sakura ganaba consecutivamente, y Kazuku se estaba enojado más y más, ya que, había perdido más dinero que el que Sakura le debía.

"¿Quieres otra partida, o terminamos por hoy?" Su rostro era sonriente, teniendo una pizca de burla.

"No. Toma el maldito dinero". Le extendió unos billetes.

"Quédate con el que te debo, y dame el sobrante". Dijo sonriendo, ese era su plan.

"Maldito engendro...". Susurró, pero Sakura alcanzó a oírlo "¿Cuantas veces has jugado este juego como para ganarme siempre?". Contó el dinero para darle su parte a Sakura.

"Este es mi primer juego."

Kakuzu paro de contar su dinero y observó a sakura con una mirada incrédula. ¿Como que nunca había jugado? Si parecía que conocía el juego se pies a cabeza.

"Antes de venir acá, estaba leyendo un libro de tácticas de Shōgi, así que memorice todas las tácticas y las reglas. Sabía que tú jugabas esto de vez en cuando, así que tenías cierto conocimiento del juego, como sus estrategias y reglas. Así que observé todos los movimientos para detectar las posibles jugadas o estrategias que estabas usando."

Kakuzu miraba impresionado a la niña. Por alguna razón le recordaba a Orochimaru, y aunque la pequeña lo niegue, el tiempo corto que pasa con el renegado de Konoha la ha influenciado en sus acciones y personalidad.

"¿Me estas diciendo que memorisaste un libro entero de estrategias y reglas?"

"Eh... ¿Sí?". No entendía el porqué de su confusión "¿No sabías que tengo memoria fotográfica, Kakuzu-san?"

El seguía observándola. Genial, ahora la niña es capaz de memorizar todo, vaya sorpresa.

"No... pero eso no quita que Supiste inmediatamente la jugada que usaba en cada partida, por más que hubieras memorizado todo, hay muchas similares, ¿Cómo supiste la que use y la que no?"

"Todos tenemos estrategias al jugar, patrones, reacciones o jugadas comunes". Empezó a explicar "Tu utilizabas algunos patrones en específico que en la segunda partida fui descubriendo y en la tercera logré memorizar y reconocer. Tus expresiones de cuando piensas y las fichas que observas antes de mover alguna, delatan tus movimientos. No es muy difícil, solo es poner atención."

Kakuzu frunció el ceño. No debió subestimar a la aprendiz de su jefe, ahí le queda la experiencia.

Sakura miraba a Kakuzu, esperando algo, y ese algo era su recompensa. Así que al ver que no iba a darle nada, hablo:

"¿Me das el dinero, o te robo otros 300 ryus?"

El hombre suspiró y le entregó el dinero.

"Prefiero cazar recompensas que apostar."

"¿Por qué? Al final, ganas dinero."

"En las apuestas hay por lo menos un 40% de probabilidades de perder, en batalla solo un 0% en mi caso."

"Dinero fácil, y sin honor."

"Soy un asesino, pequeña, no un hombre de honor. Mi honor no vale nada, y no tengo problema en ello. El honor no me genera ganancias, la sangre sí". Se levantó para intentar salir.

"Siempre está la posibilidad de morir."

"No para mi. Tengo las vidas de todas mis víctimas a mi favor". Salió del lugar dejando a Sakura sola en la sala.

Sakura recogió el juego pensando. En el mundo habían muchos tipos de personas, y Kakuzu le parecía de las más interesantes, un hombre sin honor o código, era un hombre peligroso, ya que no poseía respeto por nada ni nadie, y eso, era lo que a Sakura más le llamaba la atención. Cómo un hombre poderoso y fuerte no se atenia a creencias más que el de la codicia y avaricia, como es que alguien negaba poseer honor y amaba el camino más deshonrado para conseguir sus placeres. El poseer más y más, siendo guiado por la gula, una sed de dinero insaciable que nunca tenía fin. Una persona destinada a la oscuridad de la avaricia.

Arashi no SakuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora