pablo gavi | shorts

historia 4

Estaba con su novio Pablo, de camino a la cena de navidad con su familia.

Gavi Iba a conocer la familia de Violeta.

Para eso tomaron un vuelo desde Barcelona hasta Andalucía.
Ella no lo negaba, estaba nerviosa.

Estábamos en un Uber por que hasta en el pueblo de viole le pedían cientos de fotos.

Llegaron a su destino, ambos se bajaron nerviosos y empezaron a caminar, rezando para que nadie se les cruzara por su camino.

Afortunadamente no se cruzaron a nadie por su camino.

Ambos iban arreglados, Gavi con su traje de chaqueta que le daba el toque esa bonita pajarita.

Y la chica iba con un elegante traje largo de color rojo burdeos tirante, unos tacones negro y bolso del mismo color con detalles en dorado.
Llevaba la chaqueta de Gavi puesta debido al frío que hacía.

Narra Violeta

Tanto él como yo estábamos muy nerviosos, situados enfrente de una gran casa que por dentro, parecía contemporánea.

Lo miro y Gavi hace lo mismo, nervioso, me agarra de la mano.

- tranquilo - le digo para que se calmase, perfeccionándole el pelo - les caerás muy bien.

- segura? - me dice.

- Estoy segurísima - digo sonriendo con mis labios rojos oscuros pintados.

Procedo a levantar mi mano para tocar el timbre, pero antes de hacerlo Pablo me vuelve a parar.

- Espera! - me dice con los nervios a flor de
piel - y si no les parezco guapo para ti?

Me empiezo a reír negando la cabeza, el estaba confundido.

- Escúchame - procede a mirarme - Si todas las personas tuviéramos 100 problemas y uno de ellos fuera ser feo - hizo una pausa para únicamente contemplarlo.

Que guapo es.

-Tu tendrías 99 - finalizo, al escuchar eso, se acerca a mi y procede a darme un abrazo.

Se lo continuo y le doy un pequeño beso, sin transferir ni una sola gota de pinta labios.
Le vuelvo a agarrar la mano y, ahora si, toco el timbre.

Ahora lo veo mucho más seguro de sí mismo.

Las grandes puertas se abrieron solas y procedemos a entrar.

En la entrada me quito la chaqueta.

- toma - le ofrezco la chaqueta.

- quédatela - me dice él.

- no - digo yo - es enserio.

El acabo cogiendo la chaqueta y se la coloco, poniéndose el botón mal colocado.

- no - digo al instante acercándome a Pablo, haciendo que el sonido de los tacones retumbasen por toda la entrada - este es el botón de abajo - digo soltando una pequeña risa, acto seguido le coloqué bien el botón.

- Gracias - me dijo a lo que yo solo sonreí.

Me tomo de la mano y lo guié hasta el comedor, donde se encontraba gran parte de mi familia.

Toda mi familia al verme entrar por las enormes puertas con tremendo tío, se quedaron impresionados.

Mi hermana Julia me miro con una mirada llena de orgullo hacia mí, a lo que le guiño el ojo como muestra de superioridad.

Terminamos lo que pareció una entrada de película y todo el mundo empezó a recibirlo muy amablemente.

- pues sí que es guapo - me dice mi madre al oído - tienes los gustos de tu madre - no pude contenerme a una pequeña risa.

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Bueno, como veis esta historia la he hecho basado ya en tener una relación con él, y no comenzarla.
Es algo un poco diferente y me gusta mucho escribir este tipo de historias.