Nuestro espadachín acaba teniendo el mismo problema de siempre y sí, perdió el rumbo de su camino. Esta vez no será como las otras veces, no se topará con nuevos enemigos si no con algo exquisitamente adictivo y no, no sé trata de su acostumbrado sa...
¡Si ven faltas ortográficas porfavor háganmelo saber!
Capitulo ocho.
"Ruidosa"
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¡E-Espera zoro!— exclamó mientras casi por tercera vez daba media vuelta, dispuesta a devolverse.
El peliverde bufó antes de agarrarla de la cintura y subirla a su hombro, dispuesto a no dar ningún otro paso.
—¡Porfavor!— rogó la castaña mientras le golpeaba la espalda, —¡Bájame!
—¡Es la tercera vez que quieres despedirte de esos gatos, ya dijiste que los ibas a dejar!— le regañó antes de darle una palmada en el trasero, haciéndola jadear con sorpresa.
—¿Co-Como te atreves!?—, cuestionó patalenado.
—Me atrevo una segunda vez.— añadió antes de darle una segunda palmada.
—¡Basta!
—¡Entonces quédate quieta!
La castaña finalmente se dió por vencida. Observó con arrepentimiento la cabaña en la cuál vivía una anciana, a la cuál le había encarecido la crianza de sus gatitos, los cuales parecieron gustar demasiado de la anciana, lo suficiente como para pasarse la tarde ignorandola pero aún así, los extrañaría un montón.
—Hana, ¿Sabés que te volverás un pirata, no es así?— cuestionó el peliverde deteniendo su andar, —No sé cuánto daño te hicieron "Esos" piratas pero aún así creo, que debes estar completamente segura como para seguir a un pirata como luffy.
Hana permaneció en silencio.
Aún los recuerdos de aquellos años, le causaban pesadillas de vez en cuando pero zoro no parecía ser el tipo de pirata imbécil, cómo también el otro chico de sombrero de paja y mucho menos la chica que le sonrió tan amablemente.
—Estoy segura de ellos.— aseguró seriamente, —Pero, ¿Podrías bajarme? Me da vergüenza.
—No.
—¡Vamos, ya bájame joder!
Zoro ignoró olímpicamente sus palabras antes de divisar a su capitán corriendo en su dirección.
—¡Chayaaaaaaa ¿Vas a ser mi Nakamaaaa!??— Exclamó su capitán sonriente.
—¡¿Quién es esa?— cuestiono el peliverde antes de notar a quién se refería.
—¡Es Hana!— recriminó la castaña antes de ser bajada por el peliverde, —Y si, seré su Nakama...si es que bueno...me lo permiten.
—¡Claro que sí!— añadió su capitán antes de abrazarla amistosamente, —Shi-shi-shi.
Zoro observó la escena con una pequeña sonrisa.
—¡A celebrar!— exclamó Ussop sonriente.
—¡Hana-chaaaaaan te traje un postre de bienvenida!— comentó sonriente cierto rubio antes de dedicarle una mala mirada al peliverde, — A tí no.