Parte 2

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Guillermo adolorido se limitaba a poder tocar para que bajara el dolor, alzo la cabeza y miro a un hombre alto, algo formidable y con ojos claros que le daba la mano para ayudarlo a levantar.

—Perdón que idiota soy, andaba más en mi celular que no me di cuenta que estabas enfrente.

Él hombre solo se rió, Ochoa acepto de su amabilidad y apoyo su mano en la suya. Al parecer el rizado se había percatado a quien tenía enfrente, aún que no estaba muy seguro del todo.

—Nie, przepraszam, byłem w swoich chmurach. [No disculpame tu a mí, andaba distraído ]

Me quedé en blanco, que era lo que me había dicho exactamente. Quería entenderlo de alguna forma, se estaba disculpando o me andaba ofendido, sería inoportuno que lo dijera ”la tuya por si acaso”. No no negué la cabeza, no podía.

—Ehm... Si no hay problema

Me hice el más inteligente, esperaba que no se percatara de mi ignorancia porque no le entendí nada. Él otro solo río y me sonrió, me sonroje un poco ante su actitud.

— Perdón, se español pero no mucho, es que soy Polanco.

¡Claro! Ya se había dado cuenta de quien era él, ya decía yo de que su rostro era familiar que lo había visto en alguna parte. Es Robert Lewandowski, está vez sonríe yo, negando ante la situación que estábamos.

—No, está bien, hablas de manera fluida no te preocupes.

Rasqué mi nuca algo nervioso.

—Gracias, por cierto ¿No te lastimarte? Podemos ir a urgencias para que te revisen.

Negué rotundamente, solo fue un tropezón no había de que preocuparse, a parte quien va por eso.

—No, estoy bien solo es el dolor.—

Él contrario me miró y solo sonrió nuevamente.

—Esta bien, entonces déjame te invito un trajo ¿lo aceptas?

¡Qué! ¡Que estaba pasando aquí!, Pensé, no entendía mucho, Lewan me está invitando de tomar. Trate de sonar lo más natural y acepté. Él me guiaba a la barra de bebidas pidiendo no se de qué cuando, yo no hablaba árabe y solo limite a beberlo.

— Escucha, Guillermo he escuchado mucho de ti, me pareces un tipo muy interesante sobre todo porque eres un buen arquero para tu selección y como dentro de dos días tendremos nuestro primer enfrentamiento quería conocer a mi rival.

Realmente había que reconocer que era un hombre muy orgulloso, porque presentarte ante tu rival era de mucho trabajo y sobre todo que le dieras líneas a alguien quería decir que eras un buen oponente para el otro.

—Lo mismo digo, solo que Lawandowski jamás creí conocerte de esta forma, digo tropezando y tomando una bebida.

Me sincere, al igual que yo otros de mi equipo se veían sorprendidos por que estuviera hablando con él, tanto que me daban miradas de vez en cuando, de esas miradas que decían preséntamelo. La situación era agradable o bueno yo trataba de ser amable con el Polanco no quería que se llevará una mala impresión, todo iba bien hasta que mi rostro cambio de inmediato cuando empezó a tocar mi cabello y bajando hacia mí mejilla.

— Piękna || Bonito || Es una palabra Polanca para referirse alguien que es atractivo y tú me has cautivado.

El hombre de mediana complejidad, estaba coqueteando y tratando de cortejarme algo que realmente me hacía sentir incómodo pero no pensaba tolerar todo ésto, había sido amable con él y él se creía que era una invitación a algo más. Separé su mano de mi rostro apretándolo un poco sin dejar de sonreír ya que no quería que los demás se dieran cuenta.

𝙴𝚗 𝚌𝚞𝚎𝚜𝚝𝚒ó𝚗 𝚍𝚎 𝚜𝚎𝚐𝚞𝚗𝚍𝚘𝚜- 𝙾𝚌𝚑𝚘𝚊 𝚡 𝙼𝚎𝚜𝚜𝚒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora