So far from home | Kookv AU

64- Car's Outside

ཻུ۪۪⸙𝓙𝓾𝓷𝓰𝓴𝓸𝓸𝓴 ཻུ⸙

Eran aproximadamente las once, y mi corazón no para de latir con fuerza mientras espero por que Taehyung salga del complejo de apartamentos en el que se ha estado quedando durante este mes.

En el maletero del auto va empacada mi guitarra y en los asientos traseros hay varias chucherías para ir comiendo en el camino mientras emprendemos viaje hacía un rumbo indefinido para él.

Cuando lo vi salir por fin, no pude evitar sonreír, él simplemente cautiva mi corazón y me llena de vida, causa en mi ese bobo sentimiento de mariposas revoloteando en el estómago y el estar cegado por una venda de colores y arcoiris. Kim Taehyung simplemente me vuelve un cursi, loco, que solo desea hacerlo sonreír.

Definitivamente, lo quiero en mi vida.

— Hola~ — saludo con voz dulce, acomodándose en el asiento del copiloto —, ¿ya puedo saber a dónde vamos, Kookie?

— De hecho — me aferré al volante, sintiéndome nervioso de repente —, esta será un cita por carretera.

— ¿Eh? — me miro confundido, pero no borró su sonrisa — ¿Cómo es eso?

— No estaremos en Los Angeles, bebé — le sonreí —, daremos una vuelta por ahí.

— ¿Dejaremos Los Angeles?

— Dejaremos California, de hecho — dije y antes que él contestara, arranque el auto y di inicio a nuestro viaje.

— ¿Qué? — su expresión era un complemento poema — ¿A dondé vamos, Kook?

— Te estoy secuestrando y te llevare a Nevada — sonreí y lo miré unos segundos —, pero no te preocupes, te traeré a casa a las doce en punto, mi cenicienta.

Él nuevamente rio, y pude ver de reojo como hacía un puchero y miraba los alrededores por el parabrisas.

— Entonces es un secuestro... — también bromeo.

— Un secuestro temporal — me alce de hombros —. Le deje la nota de rescate a tu hermana.

— ¿Ah sí? ¿Y qué pides a cambio?

— Mmm, eso aun no puedes saberlo — me hice el tonto, apesar de su insistencia.

Me sentía cálido, era un sentimiento hermoso, y por primer vez el vacío en mi interior desapareció. Sus risitas inundando mi auto y sus preguntas sobre nuestro destino y el porque de este me hacían sentir extrañamente vivo, como si tenerlo a él era lo único que mi solitaria alma necesitara.

Y creo que así es.

Comimos frituras, paramos para que él se tomara fotos en algunos lugares rurales de la zona y compartimos infinidades de besos y caricias durante el camino.
Fueron cuatro horas y media, pero se pasaron totalmente rápido con su compañía, el tiempo no existe cuando estoy con él.

Antes de llegar a la ciudad que nos esperaba, me orille un momento, baje del auto y abrí la puerta del copiloto. Taehyung me miró sorprendido.

— ¿Koo?

— Eres extremadamente lindo, ¿sabías? — deje un beso rápido en sus labios y saqué un pañuelo de mi bolsillo, él me miró confundido y un poco embelesado — Pero me temo que no podrás ver nada desde aquí.