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||Domingo 5 de agosto del 2023 ||

Mi experiencia con drogas fue algo extraña, pero emocionante.

Soy Hwang Hyunjin, un chico de veinte años que tuvo la brillante idea de romper la promesa de no consumir drogas. Les contaré como sucedió todo desde el principio, o sea hace dos días antes de volver a mi vida de adulto universitario.

Digo antes de volver porque me tome unos días, había contraído un pequeño resfriado que me tumbó por completo. ¿Qué mejor hacer que consumir drogas para quedar peor?

Yo había escuchado a un chico por los pasillos de la Uni que vendía drogas a un precio considerable, todavía no sé su nombre con exactitud, ¿Han? ni idea, pero tiene unas mejillas redondas, así cuando las ardillas se llenan la boca.

No me había llamado la atención en ese momento, ya que sentía que era una falta de respeto al mundo en general y que vender drogas no era la mejor opción de vida, algo horrible a mi parecer.

Eso lo había pensado en ese día, pocas semanas después, escuche la experiencia de un chico al consumir dichas sustancias, dijo que fue el mejor momento de su vida y a la vez el peor por el dolor de cabeza, cuerpo y muchas más boberías que no me creí.

Me dio motivación y determinación a decir "voy a consumir drogas" como un loco maniático que no prometió nada y le valió.

Estuve viendo los horarios de mis padres ese día por la noche, la semana seguiente, o sea a principios de agosto, tendrían un gran viaje de trabajos por lo que no volverían hasta el mes siguiente, sería una gran inversión para sus vidas.
Y un gran desastre para la mía, ya tenía todo planeado e incluso le había pedido la dirección al chico para ir más tarde por las sustancias de dudosa procedencia, esa parte se tuvo que cancelar porque me entró un resfriado de la nada y me atacó algo fuerte.

Pasaron los días y sólo me dediqué a pedirle las tareas a mi amigo junto a los apuntes para entregarlos después, con poca esperanza a que los profesores los recibieran pero ajá.

Siguiendo con los días, llegó el viernes tres de agosto. Después del mediodía ya me había estado sintiendo mejor, y como mis clases eran de la mañana entonces ya no podía ir a la Universidad, pero si podía ir a la casa del chico por esas drogas, mis padres se habían ido justamente empezando el mes, por lo que no iban a volver.

Ese día me prepare con una ropa informal, sin darle esfuerzo porque literal su casa estaba a la otra calle de la mía. En mi mochila de colores metí el dinero que iba a utilizar para comprarle junto a mi celular, y un par de chicles no está demás, por si había que hacer un negocio fuera del dinero.

Tome las llaves de mi casa y salí para ir a la casa ajena, caminando con tranquilidad ya que el sol apenas comenzaba a bajar del cielo. Los vecinos que conocía no les pareció extraño salir de casa, sólo les "alegraba" que ya estaba socializando con la gente de mi alrededor.

Mentiras, ni me importaba socializar con más gente que no fuera mi amigo.

Cruce la calle y mire el papel con la dirección, ya estaba frente a la casa con jardín muy bien cuidado, las paredes fuera pintadas con un color amarillo y las ventanas algo anticuadas. Todo estaba tan soft para un chico que vendía sustancias que no eran, incluso él mismo es supuestamente un amor de persona.

Suspire y finalmente me digne de tocar la puerta un par de veces, si no recibía respuesta me iría a mi casa pero en definitivo volvería otro día.

Ese fue mi plan b, pero se escucharon tremendos golpes de adentro y se abrió la puerta de golpe dejando ver al chico, estaba despeinado y su ropa hecha un desastre igual que el. Estaba hasta sudado, no quería pensar otras cosas, pero había un auto frente a la casa y no eran de sus padres.

EUFORIA - [Hyunlix] [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora