El sol hiba ocultándose entre los altos árboles que rodeaban toda nuestro alrededor, las nubes se pintaban de colores corales, mientras se agrupaban formando figuras. Sentados en el césped mientras descansabamos de un día agotador y divertido, acompañados de una brisa refrescante que desordenaba mi melena.
Un pelinegro recostado en mis piernas, durmiendo cómodamente, mientras lo observaba tan detalladamente. Sus belfos, sus pequeños lunares en su rostro, sus pestañas, y una pequeña cicatriz en su mejilla izquierda, me llenaba tanto la intriga de saber cómo se había originado esa cicatriz, pero decidí dejar de lado ese rasgo.
-Taehyung- hablo el pelinegro quien estaba mirandolo desde abajo al castaño
–Jungkook, ¿estabas despierto?
–Disculpa, pero no pude quedarme dormido mientras me mirabas- ríe entre dientes el pelinegro
–N-No te estaba mirando, sigues dormido creo- dijo nervioso
–Si, como no- sonrió de lado el pelinegro
–Esta oscureciendo, sería mejor irnos ya
–Estoy muy cómodo en tus muslos, no quiero levantarme- se acurruco más en las piernas del castaño
–Oh vamos, quiero ir al castillo, hace frío Jungkook- responde temblando por el aire frío que le soplaba en todo el cuerpo
–Hum, bien- se levanta de su cómoda almohada para ir por la cámara del castaño que se encontraba en el tronco de un árbol- toma- le da la maleta de la cámara del menor
–Oh, gracias, casi me olvidó
–Vamos antes de que oscurezca más- le ofrece la mano al castaño para que vayan tomados de la mano
El castaño dudoso, mordiéndose el labio, tomo la mano del pelinegro para irse juntos del lago donde pasaron tantos momentos lindos y divertidos, en las que Taehyung se sentía nervioso y apenado, estaba tan dudoso de cómo empezó a sentirse así por el hombre de cabellos negros y ojos color carmesí, tanto que se sentía nervioso al tocar un centímetro de su piel.
Que loco
Pasaron varios minutos, aún estábamos en el bosque, tomados de la mano, como una pareja de esposos, hundiendonos más profundo en el intenso bosque, en la que los rayos de la luna iluminaban cierta parte del camino.
Aullidos de lobos se presentaban cada vez en cierto tiempo, me ponía los pelos de punta, tuve una mal experiencia con un lobo el primer día que permanecí en el castillo, no quisiese recordar aquello, estaba a leguas de la muerte.
Mi mente se llenaba de mil ideas y pensamientos, que la voz del pelinegro me saco del trance.–Taehyung, espera- ordenó el pelinegro poniéndose alerta con una mirada sería
–¿Pasa algo Jungkook?- fue puesto a buen recaudo detrás del pelinegro, poniéndose enfrente del castaño como defensa
–Algo se está acercando rápidamente a nosotros- comento el pelinegro con el ceño fruncido
–¿Qué?- dijo aterrado el castaño
–Descuida, no permitiré que te toquen un pelo
Se puso en guardia, con sus ojos carmesí encendido a un rojo fuego, algo le parecía extraño, el olor que sentía era un olor a tierra y a humedad, como si se tratara de un perro, uno muy grande, pero dudaría que fuese un lobo, ellos permanecen en su territorio, y pensarían un millón de veces antes de pisar sus tierras del pelinegro.
Oh eso creía
-Que olor tan repugnante...vampiro... maldita especie- suelta un gruñido- no permitiré que le hagas daño a Taehyung
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Blood and Pain
Historical FictionAño 1925, Transilvania. Los mitos y leyendas siempre hablan de mi, pero jamás me entendieron, como me sentía, jamás sabrán de mí...solo tú me pudisteis conocer...y amar mi querido bear