ange blanc

03

pov's nayeon

Cuando bajé completamente los escalones para llegar a la segunda planta, pude divisar una inconfundible melena rubia a punto de subir de donde yo me iba. Con los nervios a flor de piel abrí la boca intentando articular algo, sí debo ser sincera, me da miedo que descubra que la espíe en algo tan íntimo.

—Hola... —su mirada se movió en mi dirección, con su ceño fruncido se detuvo en medio camino hasta quedar totalmente cerca de mí. Dudé de que hacer, ya estaba demasiado nerviosa.

—Tú. —me señaló.

—¿Yo?

¿Por qué yo? ¡Mierda! Ya lo sabe, ya lo sabe... ¡Estoy muerta! 

—Tú le contaste a todos. —mi corazón se aceleró de tal manera cuando quedó prácticamente pegada a mí que creí sufrir un ataque cardíaco ahí mismo, su cabeza se inclinó hasta poder tener nuestros ojos clavados en el otro.

—¿Q-Qué? —¿De qué habla esta loca?— Yo no dije nada.

—¿Y cómo es que ahora todos saben lo de Chaeyoung y yo? ¿Eh? Tú eres una chismosa que se mete en los problemas de los demás.

Ahora sí, ¿Quién es esta para hablarme de esa forma? Qué irrespetuosa.

—¡No dije nada! ¿Y cómo sabes qué yo sé que ustedes terminaron? —arquee una ceja.

—Te vi mientras nos espiabas, cuando trate de ir en busca de Chaeyoung, tú estabas ahí viéndonos como una acosadora.

—¡No soy una acosadora! —la empujé— Sólo no quería...—¿qué puedo inventar?— Eh... no quería interrumpir su separación.

—No era una separación definitiva. —me corrigió rápidamente, desviando la mirada— S-Sólo nos dimos un tiempo.

—Mira, Mina —comencé— tienes que aceptar que ella y tú ya no tienen futuro. Te trató mal, puedes superarla, pero no está bien que te enojes con todos por eso, yo sólo le hable a TaeHyung sobre lo que vi. Pero él jamás diría algo sobre eso a alguien más, todos lo habrán intuido al ver a esa chica besándose con Sehun en el receso, ¿Bien?

—¿Qué? —me observó con sus ojos en grande. 

—¿No lo sabías?

Creo que hable de más –pese a ser obvio– todos la vimos en el receso a esa desagradable y hermosa chica besando a su nueva pareja bajo un árbol. No esperaba que Mina no... bueno, no importa, ya no son nada.

—¿Estás bien?

—E-Ella... —sus ojos se llenaron de lágrimas lo antes pensado— Entonces era verdad, sí me cambió.

No sabiendo que hacer, lo único que pude pensar fue en rodear mis brazos en su cintura para darle un abrazo. Eso siempre hace sentir bien a cualquiera, y no me gusta ver llorar a las personas. Fue luego de unos segundos que me correspondió el abrazo. Y no fue tan incómodo como aparentaba.