Ella juró por todo su árbol genealógico que nunca volveríamos a hablar, sin embargo, ahí estábamos, caminando de lado a lado con un amigo en común por aquel centro comercial.
Incómodos, emprendimos marcha. Fue hasta que alguien hizo un gesto para que el hielo se rompiera y comenzáramos a hablar. Respuestas cortas primero, luego frases y finalmente pequeñas bromas.
De pronto estaba tomando su mano otra vez, sonriendo como antes, así hasta la hora de la despedida. No queríamos irnos, le di un beso en la mejilla que devolvió en mis labios, dejándonos llevar. Al separarnos, recordamos que estábamos solos.
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100 Microrrelatos para pasar el rato - [COMPLETOS]
Любовные романыUn conjunto de 100 microrrelatos entre diversos géneros, desde historias cortas, así como pensamientos varios sobre temas ligados al amor, la vida y el futuro. La única regla a seguir: - 100 palabras o menos sin contar el título ni notas de autor. E...