01; Do u regret?

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MARIZZA

Salí del cuarto de Marcos, acababa de disculparme con él por lo de los mails. Era algo que Luján me había recomendado hacer, y algo de lo que no estaba tan segura.

Seguía sin creerlo, terminé con él contra mi propia voluntad. En el poco tiempo que estuvimos juntos, Marcos me hizo sentir mejor que cualquier pibe en este colegio de conchudos.

La verdad pensaba seguir con él un tiempo más, pero debido a que había descubierto todo, no me quedaba otra que disculparme.

Ahora solo me quedaba arrepentirme y concentrarme en Luca y mi mamá.

El beso con Luca era algo que había estado esperando demasiado, pero que al momento de probarlo no había sentido absolutamente nada. A lo único que sabía era culpabilidad.

—¿Vos estás segura de que realmente querías besarlo, Marizza? — preguntó Lujan una vez que entré al cuarto.

—No sé, Luji...— respondí

—¿Sabes lo que yo creo? — hice una seña, indicándole que siguiera hablando. —Que vos solo lo besaste para cumplir tu capricho de tenerlo y que en realidad no te gusta.

—Claro que me gusta, solo no sé si estuvo bien besarlo.

—Obvio que no estuvo bien. — me tiré a la cama, dándole a entender que no quería saber nada más del tema. —¿Y Marcos como se lo tomó?

—Bien, supongo. No sé, me sentí mal.

—¿Mal por él?

—No. Osea, sí pero también me sentí mal por lo que hice, Marcos es buen pibe.

—Bueno, igual no lo hiciste vos. Lo hice yo. — hizo una mueca.

—Pero yo te apoyé... Ya fue, no me quiero centrar en eso. Ahora tengo que ver que hago con Luca.

—No, a ver. Primero, ¿Vos de verdad sentís algo por él? Y nada de "No sé" "Creo que sí" ni tampoco un "¿Qué decís Luján?" Respondeme un sí o un no.

—Si me gusta. — respondí, segura.

—¿Y ya no te atrae Marcos? — negué. —¿Ni un poco? — volví a negar.

—Nah, es lindo pero de que me GUSTE GUSTE... No. — se encogió de hombros.

—Si vos decís...

...

—Y eso, no sé si vaya.

—¿Por qué no? Ir al boliche juntos después como amigos nos hará bien.

Pensábamos ir al boliche a pasarla bien, sin erreway.

—¿Me estás cargando? — sonrió, pero la verdad era muy incómodo.

—No sé, por ahí te encontramos a alguien, supongo.

—Marizza, no quiero sonar grosero, pero no seas ridícula. No quiero a nadie mas que no seas vos y eso lo sabes perfectamente. — lo pensé un rato, este pibe de verdad estaba afectado.

—Perdón, intento ayudar.

—Pues no lo hacés, es incómodo. — se levantó.

—Vos dijiste que podíamos ser amigos. — le reclame, obligándolo a quedarse conmigo.

—Que seamos amigos no significa que de un día para el otro me voy a olvidar de lo que me hicieron y voy a estar cagado de la risa. — se dio vuelta. —Me vas a perdonar, Mari, pero no apures las cosas, anda a mi ritmo, ¿sí?

—Pero... — dije antes de que se fuera. —Está bien, no minas. Pero por lo menos vayamos juntos, para acercarnos más, no sé... Para liberarnos un rato. No me quiero alejar de vos, Marcos.

inmortal || marquizzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora