My dream

6

Eren,  desde la ventana de su salón observo como esa chica que lo tenía loco, se iba a el infierno que tanto  deseaba sacarla.

- Profesora, ¿Sabe porque la estudiante se acaba de ir?  - preguntó eren  levantado y cerca de la docente Hange ZÖe .

Extrañada, lo mira.

- ¿Por qué desea saber la razón de la  ausencia de su compañera?

Aquel azabache por inercia, iba a confesar todo los males que vivía la chica, pero el sentimiento de arrepentimiento lo invadió. 

-Es porque se perderá de la clase y eso arruinaría su perfecto historial académico.

"¡A alguien le gusta, viva el amor!"  una hange emocionada quería ver evolucionar ese posible amor

-No se preocupe, eso no le afectará en su historial - contestó para irse a sentar en su escritorio.

Eren resignado y preocupado vuelve a su asiento.

-¿Sabes por qué se fue? - preguntó un rubio preocupado.

- No me gusta para nada que se haya ido- dijo una pelinegra

-Armin, mikasa, no se preocupen, saliendo de aquí correré por ella.

POV Min

Estar sentada en aquel puesto vació del bus, me produjo molestia.

Para muchos ir a estudiar podía ser una completa perdida de tiempo, o simplemente algo que no les gusta hacer.

En mi caso, era totalmente lo contrario...  encontrarme yendo a mi casa, era triste.

La institución escolar, para mi era el refugio que necesitaba para conllevar el  sufrimiento constante que presenciaba, ese  abuso vivido en mi hogar hacía que cada día tuviera más dolores, tantos que me mataba de poco a poco.

El  bus se detuvo y sabía que era mi parada

Esos pensamientos deprimentes se vieron interrumpidos, porque debía bajarme. Luego de agradecerle al conductor, emprendí camino.

cruzar aquella calle, solo hizo que se me pusiera la piel de gallina, y la razón se debía a que el ser, dueño de mis sentimientos de ansiedad y angustia estaba frente de mi.

- Me alegra saber que cumpliste con lo que te pedí, porque ya iba en camino a buscarte.

Silencio, mis piernas habían comenzado a temblar de manera lenta.

-Si, ya llegue.

Mi miraba se posaba en el suelo, pero tome valor y lo observe.

Ojos dilatados, ojeras notorias, piel gélida y sin vida.

- escoria ve a la casa, no quiero enterarme de que saliste, por ello compre comida ¡¿me entendiste?! 

eso me exalto, pero debía responder

-Si, no saldré (tampoco es que  como si tuviera  a un lugar al que ir) 

-mas te vale, hija de puta.

Inmóvil, veía como este se marchaba.

Sacar la lleve de mi mochila estaba siendo  un proceso dificultoso, los nervios que me producía verlo hacía que mis manos no pudiera reaccionar, pensaba que me iba a golpear pero nada de eso había sucedido, pero no podía relajarme, quizás en la noche lo haría.

Suspiré  y saque gran parte de mis pertenencias.

El sonido de las llaves moverse, permitió la facilidad de encontrarlas.