ChangSeung: "Fire on yours Lips"

Capítulo 1

Publicaré unos poquitos capítulos seguidos, como regalito de Navidad, y como recompensa por haberme desaparecido tanto de esta plataforma. Espero y les guste u.u

<><><>

SeungMin estaba aprontándose para cumplir con su misión, debido a que trabajaba para S.W.A.T. Algo realmente impensable, ya que era alguien aún muy joven, pero su capacidad excedía su edad. Por lo que justamente, debido a su edad recibía mucho odio y burlas. Él se intentaba convencer de que lo trataban así por mera envidia, pero había veces que en verdad quería que se detuvieran con sus estúpidas bromas. Y lo peor de todo, que, en sus prácticas tan duras y agotadoras, a él se le hacía el doble de difícil cuando los malditos superiores inventaban algún que otro ejercicio que requería emparejamiento y sincronización con el compañero. Aquellas veces era en las que peor le iba y por culpa de sus otros compañeros para nada cooperativos, lo terminaban sancionando a él y a veces a sus compañeros, pero normalmente era a él, ya que <<como era joven>> a pesar de estar allí ya por más de dos años, creían que aún era un inexperto.

Lo más cercano a un amigo, a un compañero que tenía era un tal ChangBin. No obstante, a pesar de que se llevaban como perros y gatos extrañamente en los ejercicios de pareja se complementaban bastante bien. Por supuesto que las infantiles burlas de llamarlo <<niño>>, o <<bebé>> no faltaban. Sin embargo, extrañamente era a él al único que SeungMin podía tolerar levemente. Y lo toleraba porque siempre su superior terminaba obligándolo a unirse a él. Y cómo ya había sido testigo de la química de ambos, normalmente lo emparejaban con ese tal ChangBin.

Era inmediato como las burlas comenzaban a oírse. Sin embargo, un grito del superior y todos callaban, pero no por mucho, ya que no era partidario de que alguien <<lo ayudase a defenderse>>. Sobre todo, un superior. Pues aquello solo provocaba más burlas, como que era un consentido, un niñito de mamá, un maricón, o un <<chupa polla>> de primer nivel, para que un superior como el tal MinHo, el cual no daba una mierda por nadie, se parara de su lado.

El móvil suena y mientras va conduciendo al trabajo habilita su <<manos libres>>.

–Kim SeungMin al habla...–

Dijo el castaño serio mientras miraba el camino.

–¡Kim! ¿¡Dónde demonios estás!? –

Ese definitivamente era su jefe y no estaba de buen humor.

–Yendo, Sargento Lee–.

–Yendo ni mierda. ¡Te quiero aquí en menos de diez minutos! –

–Entendido–.

–Más te vale que te apresures Kim. Unos malditos imbéciles han tomado de rehén al vicepresidente y si lo llegan a matar, luego seguirá el presidente. Los malditos imbéciles realmente piensas que saldrán ilesos de esto–.

–Estoy llegando Sargento Lee. Cortaré la comunicación, en siete minutos estaré frente a usted–.

–Estoy mirando mi reloj Kim–.

–Comprendo Sargento. Cambio y fuera–.

Kim entonces cortó la llamada, y aceleró el último tramo de camino que le quedaba. Pues había recibido una llamada de emergencia que se requerían sus servicios de inmediato.

Kim había hecho lo imposible para aprontarse lo más rápido posible. Y en un récord de menos de quince minutos, ya estaba arriba de su coche yendo hacia la central.