Despertando

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Narradora:
Era de noche, los dos jóvenes se habían mantenido inconcientes por un par de horas. Rapunzel fue la primera en despertar, vio a Jack herido, tomo su cabeza con un poco de sangre e intento buscar desesperadamente ayuda.
-Jack? Jack??! Me escuchas? Ayudaa! Ayuda por favor!-
Rapunzel intentaba abrazar a Jack para protegerlo, soltó un par de lagrimas , pero era inútil, no había nadie, nadie podía verlos , eran espíritus, fantasmas...seres no vivientes, ni aunque Rapunzel gritara lo mas fuerte que pudiera, para todos sería nada mas que silencio. Rapunzel se levanto desesperada, recorrió todo el lugar, vio sus manos y pensó:
-Que fue lo que hiciste Rapunzel?-
Rapunzel se había rendido, se acostó al lado de Jack y cerro sus ojos.
Cuando pensó que todo estaba perdido, la luz resplandeciente de la noche anterior apareció.
-Rapunzel...hija mía...-
Rapunzel abría lentamente sus ojos hinchados de tanto llorar y al mismo tiempo limpiaba el resto de lágrimas en sus mejillas.
-Eh?-
-Tienes un poder muy grande en tu larga cabellera, utilizala para salvarlo, tu sabes como...solo tienes que buscarlo en ti misma-
-Como lo puedo hacer?! No se nada...-
-Solo tienes que buscarlo en ti misma....- la luz dijo mientras desaparecía .
Rapunzel tomo su cabellera, que empezó a iluminarse, en su mente sentía que debía entornar una canción...y empezó a cantarla.
"Flor que da fulgor, con tu brillo fiel..."
La cabellera empezó a curar las heridas de Jack, Rapunzel estaba impresionada, soltó lágrimas de felicidad al ver a su amigo abrir los ojos.
-Rapunzel?-
-Jack!!-
Rapunzel lo abrasó, con lágrimas en sus ojos.
-Rapunzel, porque lloras?- dijo algo adolorido.
-Jack...temí perderte...-
Jack quedo impresionado a la conducta de su compañera, ella no lo conocía lo suficiente para tratarlo de tal manera. Jack sabia perfectamente que la chica rubia (que en ese entonces era de pelo corto y café) fue su único amor en 300 años, pero ella no lo reconocía aun.
Jack recordó lo que había pasado y temió un poco de Rapunzel, se alejo.
-Jack?-
Jack estaba en blanco, no sabia que pensar ni que hacer.
-Tienes miedo de mi?- preguntó Rapunzel
Jack se mantuvo pensativo por unos minutos, se acerco a Rapunzel y le dijo:
-Tu...me salvaste?-
-Así es...-
Jack mostró cara de asombro, ¿Como es que una persona que casi lo mata pueda luego salvarlo? Jack se levanto sujetando su abdomen, tomó una bola mágica que le había dado Norte en caso de emergencia y la lanzo.
De esta bola mágica se abrió un portal, el cual era muy extraño:
-Rapunzel...vamos-
-Jack...que es eso?-
-Solo vamos...-
Jack tomó la mano de Rapunzel y se dirigieron juntos al portal.

Norte estaba comiendo unas galletas, sentado en un sillón ,no lujoso, pero muy cómodo. Uno de los yetis lo llamo apresurado.
-Que es lo que pasa?!-
Norte se dirigía a donde lo llevaba el yeti...para su sorpresa se encontró con Jack un poco adolorido y la cara arrepentida de Rapunzel.
-Niños! Que sucedió?!-
-Todo es mi culpa...- dijo Rapunzel
-No...no es así...- la miro Jack
-Jack mirate! Necesitas reposar...-
-No norte...tengo traba..jo que hacer...-
El yeti lo tomo sin mas, y lo llevo a su habitación, lo obligo a recostarse y descansar.
Norte llamo a Rapunzel a su oficina...la cara de el decía todo...
-Rapunzel...asiento- le señalaba una silla
Rapunzel se sentó un poco asustada.
-Que sucedió?-
-Señor Norte...-
-Por favor dime solo Norte...-
-Bien...Norte...estábamos en una colina, tomamos un descanso antes de seguir, y resulta que por un momento perdí la memoria...y cuando despierto veo a Jack malherido, algo me dice que fui yo...-
-Bien...quiero que mañana te vallas de aquí-
Rapunzel se mostró asombrada por lo que había escuchado, irse? A donde!? No tenía ningún lugar donde irse...no sabia nada...y no comprendía nada...
-Pero...porque?-
-Si dices que fuiste tu...entonces eres un peligro...no quiero eso...losiento-
Norte se levanto de su asiento y salio de su oficina, apareció un yeti que al parecer había escuchado todo.
-No me digas que estoy equivocado...Losiento pero se tiene que ir...se que Jack me odiara por esto..-
El yeti se mostró apenado y siguió caminando.

One love, One destinityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora