¿Protegiendo al Omega? [KiriBaku]

El tío niñero.

Daiki estaba enfermo. Pasaba recurrentemente durante el invierno o después de alguna tormenta que traía a una baja de temperaturas, su cachorro se enfermaba con facilidad sin importar los esmerados esfuerzos de Katsuki para evitarlo y Kishi se contagiaba al no querer abandonar a su gemelo.

El omega estaba en un dilema. No podía dejar a Daiki solo. Pensó en llamar a Shoto y preguntarle si podía pasar por su departamento a cuidarlo, pero la otra noche el alfa le comento que estaría en Kyoto, a varios kilómetros de dónde estaba. Sería inútil pedirle ayuda. Los tíos de los niños eran su segunda opción, ya que sus propios padres estaban en un viaje de negocios —y no tenía una buena relación con los abuelos paternos como para pedirles ese tipo de favor— así que llamo a quien vivía más cerca y evitaba que su niño llorara cuando pasaba mucho tiempo lejos de su gemela y él.

—Hola Katsuki, ¿necesitas un servicio de niñeras? —se escucho la voz divertida de Touya Todoroki al otro lado de la línea telefónica —Nunca me llames si no es así.

—Tu tampoco lo haces, no te hagas el ofendido —suspiro el cenizo pero rápidamente fue al punto —Daiki está enfermo. Necesito que alguien lo cuide por unas horas.

—Voy para allá.

—Gracias.

Touya colgó antes de decirle algo más. Durante su embarazo, el hermano mayor de Shoto fue quien más cuido y se encargó de él, al punto que algunas personas pensaban que el alfa era el padre de sus bebés. Katsuki lo permitió porque sabía que el alfa mayor se sentía responsable por haber dejado durante tanto tiempo a el bicolor a su suerte, haciendo con su indiferencia que llegara a dónde llegó, a un centro psiquiátrico. Intento decirle en varias ocasiones que no era así pero el albino nunca le hacía caso por lo tanto dejo que hiciera lo que le plazca.

En el embarazo omega la presencia de el alfa padre era muy importante. El omega estaba estresado, nervioso y alerta. Aunque el cenizo era un omega dominante que no sufría por las hormonas alfas o presentaba problemas durante el celo —aparte de su irregularidad— seguía necesitando esa protección que evitaba sus crisis. Sus padres eran ambos beta y la mayoría de sus amigos, si bien cumplían bien el rol de sobreprotección, eran betas u omegas también. Por lo tanto, la cercanía de Touya y sus constantes cuidados en esos ocho meses de embarazo —al ser gemelos, su fecha de cesárea tuvo que ser prematura— tan complicados hicieron que el cenizo tuviera más o menos cierta estabilidad.

Y claro, eso llevo a que cuando sus gemelos nacieron eligieran selectivamente al tío que les cantaba AC/DC mientras su mamá dormía y les concedía sus antojos por soba frío a las cuatro de la madrugada.

Bakugou reconocía que el alfa mayor era uno de sus mejores niñeros para casos de emergencia. Muy a su pesar.

El omega le había mandado un mensaje diciendo que llegaría bastante tarde al jardín de infantes y que podía irse si así lo quería, ya que de todos modos no habría nadie para molestarlo. Kirishima no entendió muy bien lo último pero igualmente le respondió que esperaría. Algo en el mensaje tan corto y escueto del omega le llamo la atención, así que quería estar cerca por si le había pasado algo.