Posible amenaza

6 1 0
                                    

-Pero ésto cómo se logró...
-¿Pasa algo tn?-pregunta Rengoku levantándose un poco de la cama
-Es que, realmente no llevamos casi nada de tiempo conviviendo y ya me dio un regalo. Eso me hace sentir un poco extraña, pero le agradezco mucho el detalle
-Por favor, perdóname. Mi intención contigo nunca ha sido causar incomodidad y por favor... No me hables de usted-dijo con un tono serio mientras se acercaba a tí
-De... De acuerdo, profesor-dices sonrojada
-Tn, creo que es muy obvio que tú y yo... Podemos hacer un gran equipo-dijo con una sonrisa
-Claro, creo que el instituto tiene mucho talento en sus profesores, me siento realmente orgullosa de formar parte de ustedes
-No sabes lo mucho que eso me alegra, tn, eres una mujer muy talentosa
-Se lo agradezco mucho, profesor
-Bueno, abre tu regalo, necesito ver tu reacción
¿Qué podrá ser? Es extraño lo que siento, él casi no me cono...
-Dios, ¿de verdad es eso?
-Sí, no lo tomes extraño, pero creí escuchar en una ocasión que te gustaba dibujar, así que quise darte algo para que te desarrolles como artista y sirve que entras un poco más en confianza, ¿no crees?
-Profesor, muchísimas gracias-dices mientras te lanzas a darle un abrazo

Rengoku

Oh, su cuerpo es cálido, su cintura es perfecta, puedo sentir su corazón, su cuerpo, su busto se siente con mucha claridad. Puedo notar que tiembla, podrá ser una mujer, pero actúa como una pequeña niña y no es algo que me moleste. Me parece tierno.
Es ella a quien he esperado tanto, no puedo permitir que nadie más sea merecedor de su amor, lucharé por ella.

-Lo siento, profesor, mi emoción me ganó-dices sonrojada
-Tn, no te preocupes, me gustó el abrazo
Joder, no me había percatado que el profesor no tiene camisa y así lo abracé, es tan cálido y su piel tan suave. Me gustó mucho el abrazo
-Bueno, después de ensayar, creo que es hora de llevarte a tu casa, ¿no crees?
-Sí, profesor, iré por mis cosas

Fueron a tu casa y todo transcurría de forma normal, hablaban sobre cosas no tan relevantes, se fueron conociendo un poco en el camino hasta que llegaron a tu casa y sucedió lo siguiente:

-Tn, ¿en dónde te habías metido? Te he buscado las últimas 4 horas, pero me dijeron que estabas con un fulano haciendo no sé qué cosas
-¿Qué demonios haces aquí, Muzan! Preguntaste molesta
-Quiero hablar contigo acerca del tiempo que pediste y quiero una respuesta
-Creo que está demás decir que no volveremos, me has lastimado demasiado. Quiero sanar, y es algo que no es negociable. Nosotros jamás volveremos a ser uno solo
-¿Y cómo piensas sanar?, ¿piensas estar con va-

Antes de que Muzan terminara la frase, Rengoku le dió una bofetada

-No te atrevas a faltarle, imbécil
-Por favor, no te involucres, es peligroso
-No me importa, es lo que haría por cualquier mujer. Nadie merece menos respeto
-Imbécil, acabas de abrir las puertas del infierno. Te juro que te vas a arrepentir-dijo Muzan con un odio incontrolable en sus ojos
-Y tú, ni creas que te dejaré así de fácil. Volverás conmigo, eres de mi propiedad, querida, me necesitas
-¡Lárgate de aquí!-gritó Rengoku

Mientras Muzan aseleraba su auto, lloraba desconsoladamente, Rengoku fue directamente a darte un abrazo y hacerte sentir que no estabas sola

-Tranquila, sé que te será difícil, pero mientras yo exista, no dejaré que nadie te lastime, ¿si?-dijo mientras ponía su dedo en tu barbilla haciendo levantar la cabeza hacia él y mirarlo a los ojos
-No sabes cuánto agradezco que hayas estado aquí, de lo contrario, esa pesadilla volvería a pasar
-Por favor, trata de calmarte, me destroza verte llorar así, vamos adentro y me cuentas una vez te hayas calmado, ¿si?

Pasaron 20 minutos, te lavaste el rostro, hiciste de todo, y aunque ya habías dejado de llorar, seguías temblando, pálida y con un miedo descomunal. Estabas muy alterada.

-Tn, sé que no estás bien, pero realmente, deberías calmarte, ¿hay algo que yo pueda hacer?
-No, él es alguien despiadado
-No me importa, yo te defenderé, no importa lo que pase
-Profesor, lo pueden matar-dijiste dejando soltar el llanto nuevamente
-Estaré bien, te lo prometo-dijo mientras te abrazaba y besaba tu cabeza
-Cuando estaba en Rusia, conocí a un chico en la escuela de idiomas, ambos aprendíamos Inglés porque queríamos ampliar nuestras oportunidades y así fue.
Él era una persona amable, pero siempre misterioso, era bastante introvertido y mucha gente le tenía. Me llegaron a decir que tuviera cuidado, pero nunca hice caso. Él siempre supo ocultar lo mostruoso que es.
-¿Qué pasó después, tn? De preferencia, no me ocultes nada, es importante saberlo todo para poder analizarlo y saber a qué me estoy enfrentando
-Pasaron 5 meses de convivir y nos enamoramos, pasaron otros 2 meses y nos hicimos novios, los primeros 4 meses estuvieron maravillosos, pero luego comenzó a comportarse extraño, hasta que descubrí que tenía mucho poder por contar con una economía demasiado buena, superior al resto y me veía más como una mascota. Me maltrató y humilló a más no poder, cuando alguien intentó detenerlo, lo mataron al día siguiente-comenzaste a llorar otra vez-Me culparon, me corrieron de ahí prácticamente, yo, yo ya no quiero que nadie más sufra
-Prometo que no pasará nada ésta vez, tú estarás bien, al igual que yo. Sé que te será difícil estar tranquila, pero vive normal, haz tus cosas con calma, cualquier cosa, yo estaré al pendiente, ¿de acuerdo?
Todos te vamos a defender, eres muy estimada en el concervstorio y todos, absolutamente todos, uniremos fuerzas para protegerte-dijo mientras te abrazaba con un poco más de fuerza
-¿Por qué estás tan seguro?
-Tú solo confía, pequeña. Antes de irme, pondré guardia en tu casa, le diré a Tanjiro y a Inozuke que pasen por ti, ¿de acuerdo?
-No sabe cuánto lo agradezco, es un ángel-Tomaste las manos que Rengoku para besarlas, pero éste no permitió que las besaras
-Tú eres el único angel aqui-dijo Rengoku con una sonrisa y besó tu frente
-Tranquila, la guardia llegará en un momento, hasta entonces, yo estaré aquí, nada pasará

Muzan

¿Te crees muy listo? Te haré pagar muy caro tu maldito juego a querer salvarla. Tn, tú jamás podrás estar con alguien más, desde el primer beso tú eres de mi propiedad, sólo la muerte podés separarte de mi lado, maldita.

Sol en las notas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora