Todas las amigas de Karin se empiezan a comprometer casi al mismo tiempo y Naruto le recuerda a Sasuke que Karin fue quien le pidió que fueran novios y que él debería pedirle matrimonio para estar parejos, pero Sasuke aún no está listo para dar ese...
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—¿De qué hablas? —preguntó Karin sonrojada porque Sasuke sonaba muy serio
Cuando estaban buscando a Naruto y Sakura y antes de que ella pudiera usar su habilidad para encontrarlos, Karin vio un puesto dónde hacían bodas ficticias y le pareció buena idea decirle a Sasuke que se casaran de juego aprovechando que él la estaba complaciendo y porque le parecía una idea divertida, aunque fuera de juego, casarse primero que todas las demás chicas que ya estaban comprometidas
—Si vamos a casarnos no podemos ser irresponsables —contestó Sasuke— Si nos organizamos bien y tenemos una boda pequeña, quizá podamos casarnos en un año y medio
—Yo hablaba de eso —contestó Karin señalando el puesto que Sasuke no había visto porque él estaba buscando con la mirada del otro lado
Los dos se quedaron callados, sonrojados y no sabiendo cómo desenredarse
—Vamos a casarnos —dijo Sasuke escondiendo su sonrojo, tomó a Karin de la muñeca y la llevó hasta el puesto simulando que no dijo lo anterior
Usando el lirio como ramo, Karin y Sasuke se casaron en el registro civil de juego donde les dieron un par de anillos de plástico, les prestaron un velo y un sombrero de copa, les leyeron el contrato de matrimonio que tenía cosas chuscas y les hicieron firmarlo. Al último los hicieron besarse, aunque fue Karin quien terminó besando al novio y tras aplaudirles, les dieron su papel y los del registro civil falso obtuvieron de regreso el velo y sombrero
—Qué ideas tan raras ¿Verdad? —dijo Karin que todavía no se sacaba de la cabeza las palabras tan serias de Sasuke y ahora llevaba el lirio en su cabello— Pero fue divertido
Sasuke no dijo nada
—Es una lástima que no hayamos encontrado los chocolates
Sasuke tampoco contestó y Karin comenzó a sentirse algo enojada porque era ella la que tendría que estar preguntando qué había sido todo eso pero en su lugar le estaba ayudando a fingir que nada pasaba y Sasuke no reaccionaba
—Sasuke, no sé...
—¿Siguen aquí? Pero Sakura-chan te dijo que debes descansar el pie —dijo Naruto que se acercaba junto a su prometida
Karin estaba tan concentrada en lo que había pasado que ya ni siquiera prestaba atención de los chakras a su alrededor.
—Sasuke-kun, Karin tiene lastimado el pie. Se lo revisé antes de que llegaras y le dije que debía ir a su casa y poner los pies en agua caliente —habló Sakura— Creo que le serviría mucho si la llevas cargando a su casa para que no tenga que esforzarse demasiado y así su pie pueda descansar
—Puedo llegar a casa —dijo Karin sabiendo que podía ser algo incómodo después de lo que pasó antes
—No fuerces de más tu pie —insistió Sakura haciéndole señas a la pelirroja de que la estaba ayudando
—¡Tienes que cuidar bien a Karin-chan o no dejaré que te cases con ella en el futuro! —gritó Naruto con amenaza lo que hizo más incómodas las cosas
—¿Casarnos? ¿Quién habló de casarnos? —dijo Karin nerviosa y de repente se reía— Ustedes son los que se van a casar ¿No? Nosotros sólo estamos aquí y...
—Vámonos —dijo Sasuke cargando en vilo a su novia y se fue tan rápido como pudo antes de que todo se pusiera todavía más raro e incómodo
En el camino, ninguno de los dos dijo nada y cuando llegaron a casa de Karin, ella esperaba que él sólo la bajara en la puerta de la casa y se fuera para no tener que hablar de eso por lo menos en ese momento, pero Sasuke la llevó adentro, la dejó sentada en el sillón y se metió a la cocina a calentar agua
—Sasuke, no tienes que hacer todo esto, puedes irte si quieres —dijo Karin y se quedó sentada en el sillón porque no sabía si sería buena idea ir hasta donde estaba él— Mi pie no está tan mal y mejor me tomaré un baño
—El agua no tardará en estar —respondió Sasuke aunque si le faltaba todavía al agua, la acababa de poner— ¿Tienes una tina para pies?
—No, pero hay una cubeta limpia en el armario del aseo —respondió Karin y vio a Sasuke salir de la cocina e ir a buscar la cubeta para llevársela a la sala— Son las once y media y Nana-san no debe tardar en llegar, se va a enojar si sigues aquí
—Te estoy ayudando con tu pie lastimado, no puede quejarse —dijo Sasuke y regresó a la cocina a revisar el agua
Karin rentaba un cuarto en esa casa y Nana era su casera que le tenía prohibida la visita de hombres después de las diez de la noche pero al parecer ella seguía en el festival porque no había nadie en la casa más que ellos
—Espero que tengas razón —dijo Karin que no se le ocurría otra forma de decirle a Sasuke que se fuera para dejar la incomodidad a un lado
Todo ese día había sido muy raro y todo porque todos los demás habían decidido pensar en matrimonio al mismo tiempo. Karin estaba segura que de no ser por todos ellos, ni a ella ni a Sasuke les habría pasado por la mente todavía pero lo que Karin no entendía, era por qué su novio estaba allí actuando como si nada después de que básicamente él le dijo un sí a casarse
—Ya está el agua —Sasuke llegó después de un rato con la olla con agua caliente, la puso en la cubeta y fue a traer agua fría en la misma olla— Siente el agua y dime si quieres agua fría
Karin tocó el agua de la cubeta y le fue dando indicaciones a Sasuke sobre ponerle más agua fría hasta que ella pudo meter los pies. Después vio a Sasuke volver a la cocina a dejar la olla que ocupó y un rato después volvió con ella. Karin esperaba que de ahí él se despidiera y se fuera, pero en su lugar, se sentó a un lado de ella en silencio
—¿Podrías dejar de hacer eso? Sólo me confundes más —pidió Karin cuando ya no se aguantó más— Si no vas a irte y fingir que nada pasó, entonces dime qué fue eso de hacer un compromiso largo, comprar una casa, una boda pequeña y un fondo de ahorro conjunto
