camelia

capítulo 2, el alfa de ojos brillantes.

Louis estaba fuera de la Mansión Styles, tenía su pequeña mochila desgastada en su hombro y miraba con miedo el gran lugar. Se veía intimidante y muy elegante. Dentro de su mochila tenía sus pocas prendas las cuales consistían en dos pantalones, dos playeras y ropa interior. La única sudadera que tenía la estaba utilizando en estos momentos.

Iba a tocar justamente cuando alguien salió.

Era una Alfa de cabello azabache y desordenado. Es guapo, fue lo primero que notó Louis. Sus ojos eran demasiado brillantes, los únicos tan brillantes que había visto era el de sus cachorros.

Lo que más le sorprendió al Omega fue que el bonito Alfa le sonrió.

──¡Hola! Tu debes ser Louis.

El Omega parpadeó confuso ante la amabilidad y luego notó que había estado mirando al Alfa hacia los ojos. Mierda. Rápidamente cayó de rodillas y colocó sus manitas sobre sus rodillas, bajando la mirada y mostrando el cuello para disculparse. Jamás debía mirar a los ojos a alguien que fuera superior a él.

Todas las personas libres eran superiores.

──Hey, hey, hey. ¿Qué haces? Levántate.

El Alfa ayudó a Louis a levantarse y notó que los pantalones que estaba utilizando estaban bastante desgastados en la parte de las rodillas. Evidente signo de que cada vez que cometía un error o veía a algún amo se colocaba de rodillas.

──P-perdón amo.

Se disculpó con ojitos temerosos, recién había llegado.

Debía tener más cuidado y no cometer errores o sería devuelto. Entonces lo matarían o en el mejor de los casos lo mandarían a las zonas rurales, de todas formas estaría alejado de sus cachorritos y debía estar ahí para verlos crecer.

──Yo no soy un Amo. Ven, entremos. Te llevaré con Harry.

Louis parpadeó.

¿El no era Harry?

El Alfa que lo estaba ayudando lo miró con una preciosa sonrisa dulce. Aquel muchacho tenía aroma a pinos, era leve y muy agradable. Su lobo olfateó con sutileza y se escondió para mirar al Alfa que dormía plácidamente entre unos arbustos. Era un Alfa completamente negro.

──Yo soy Zayn, el hermano menor de Harry. No me digas amo, no me gustan esas cosas. Soy Zayn.

Louis casi se desmaya.

¿Llamarlo por su nombre?

Eso era suicidio.

──N-No... no le puedo decir así, s-soy un esclavo.

Murmuró, su lobito aulló cuando el Alfa despertó y lo quedó mirando fijamente. Un sentimiento de desesperación comenzó a llenarlo, tenía miedo, mucho miedo. Había negado una orden directa de un amo, eso era un delito muy grabe. Si el Amo Zayn se molestaba, estaba en todo su derecho de golpearlo.

Su lobito aulló desesperado mientras intentaba hacerse más pequeñito en aquel lugar donde estaba escondido. Exactamente en el hueco de un árbol. El Alfa se acercó lo suficiente a él hasta oler sus feromonas pesadas y agrias, entonces se alejó.

──Eres un cachorro.──suspiró al sentir su aroma.──Yo no soy un Amo. Te contaré las reglas básicas que hay en esta casa, Omega. Los esclavos aquí no son esclavos, son personas.

Louis abrió sus ojitos de forma cómica.

Se perdió en las palabras de Zayn y lo miró fijamente, sin poder creerle.

──¿P-Personas?

Zayn asintió, casi con ternura por el pobre Omega.

──Sí. Esto debería decírtelo Harry, pero te veo algo... angustiado.

Zayn suavemente le quitó la mochila desgastada al Omega y luego subió las escaleras, dándole una amable mirada al Omega para que este lo siguiera. Louis lo hizo dando pasitos cortitos y tímidos, sin mirar demasiado las hermosas y delicadas decoraciones que había por toda la casa. Se detuvo abruptamente cuando casi choca contra la gran y cálida espalda de Zayn. 

Alzó su mirada y se encontró con unos preciosos ojitos verdes que lo miraban con curiosidad.  Era un Alfa, tenía el cabello corto y un poco de vello en su carita, apenas de hace unos días. Estaba utilizando un traje gris con muchísimos bordados negros el cual era precioso, el Alfa era precioso.

──¿Eres Louis?

El esclavo asintió y bajó su mirada, mostró su cuello con algo de tristeza.

Vio como Zayn dejaba su mochila sobre una silla y salía de la habitación con bastante rapidez. El lobito de Louis aulló suavemente con temor, no conocía de nada a Zayn ni al Alfa de este, pero les había dado un poquito de confianza lo que les había dicho anteriormente.

──Yo soy Harry. Espero que Zayn te haya tratado bien, Omega.

El lobito de Louis olfateó sutilmente el aroma dulzón del Alfa, olía a chocolates. Era muy rico.

Salió un poco de su escondite y lloró nuevamente al encontrarse con un enorme lobo Alfa de color negro que lo miraba con neutralidad. Se escondió nuevamente en el pequeño hueco y chilló de miedo.

¿Por qué los Alfas de esta casa eran tan grandes?

──No tengas miedo, Louis. No te haré nada, en esta casa estarás seguro, te lo prometo.

La nariz del Alfa pudo detectar algo, era un olor fuerte que suprimía el del Omega. Olía a cachorro, a leche más que todo. Era muy fuerte, demasiado. Harry frunció su ceño sin entender, en la ficha que le habían dado de Louis salía que no tenía familia, que solo era el.

¿Por qué olía a cachorro entonces?

(...)

holaaa nuevamente, como pasaron su navidad?