El Privilegio De Sentir Contigo [sanzu × mikey] [bonten]

VIII

NARRA SANZU

La noche de navidad fue bastante... interesante, por asi decirlo, me refiero, prácticamente todos acabamos terriblemente borrachos, no estubo nada mal.

Mikey y yo eramos muy unidos, y yo ya comensaba a tener claros mis sentimientos por el, sabia que mikey era mas que un amigo para mi, pero no sabia si yo lo era para el, no pensaba declararme de todos modos, honestamente no tenia ningun tipo de esperanza de ser correspondido, menos de formar una relacion.

El año estaba por terminar, el clima aun era bastante frio, tenía trabajo que hacer muy a menudo, pero nada que me mantuviera ocupado por mas de 2 horas, era una temporada bastante tranquila para bonten.

Caminaba por la mansion, absorto en mis pensamientos, cuando me tope con mikey, ultimamente no habiamos salido a caminar, ya no hablábamos tan a menudo y en ocasiones incluso sentia que me evitaba, era extraño, varias veces intente entablar una conversación con el pero siempre decia que tenia que irse o evitaba hablar a toda costa.

NARRA MIKEY

Me tope con sanzu mientras caminaba por los pasillos, desvíe la mirada rapidamente cuando pude notar mis ojos colisionando con los suyos, intente seguir caminando con rapides, pero me detubo, tomo mi muñena inpidiento que abandonara el lugar y pude escuchar su vos, mas seria de lo normal, tambien se notaba sierto tono triste o melancolico.

-olle...

-dime...

-¿que te pasa?- pude notar la confusión en su vos, seguiamos ahi, quietos, calmados, en silencio, podia sentir su mirada clavada en mi nuca, podia sentir la tension en el aire.

-no me pasa nada-respondi en un susurro.

-claro que si, me estas evitando cierto.. mikey dime... e echo algo que te incomode acaso, eso o-

-no hisiste nada- lo interrumpi.

-entonses, ¿que te pasa?

Honestamente no queria decirlo, me avergonzaba, pero en realidad estaba dolido, estaba molesto, mas conmigo que con el ya que era tonto y infantil de mi parte enojarme por algo como eso pero, en la cena navideña, vi a kokonoi y a inui tan felices juntos, esos dos realmente eran el uno para el otro, y eso me asía sentir mal, temia que a sanzu le vergonsara lo que sea que tuvieramos, me molestaba que le diera pena estar conmigo.

-ya te dije no pasa nada.

-fue en la cena cierto? Te portas raro desde entonses- asi que lo habia notado.

-ya te dije no es nada.

-mikey, no podemos resolver esto si no me lo cuentas.

-es que es muy tonto.

-claro que no... tranquilo, puedes decirme.

-esta bien es solo que... me e sentido algo inseguro ultimamente.

-indeguro? De que ?

-de... nosotros, sabes en la cena koko y inui estaban tan felices juntos y tu y yo solo, no lo se... senti que te avergonzaba estar conmigo...

-mikey, no digas estupideces, jamas me avergonzaria estar contigo.

-de verdad?

-enserio, lo prometo- senti sus brazos rodear mi cuerpo, y el calor de si cierpo contra el mio, aun olía bien.

-sabes... me encanta estar contigo.

-a mi igual... a mi igual.

Nos quedamos abrazados por un rato, solo disfrutando la presencia del contrario, solo existiendo al lado del otro.

NARRADOR OMNISCIENTE

Paso un tiempo, cuando ambos entraron en la sala, estaba completamente vacía, se sentaron y hablaron un rato sobre cosas triviales, sanzu estaba realmente feliz por volver a tener cercania con mikey, y este estaba aliviado por poder pasar tiempo con el pelirosa sin sentirse mal por ello.

Pasaron los dias y cada vez eran mas unidos, constantemente se tomaban las manos y habia habido uno que otro beso.

Diafrutaban bastante de la conpañia del otro, ambos estaban alegres de poder pasar tiempo juntos.

Salian constantemente, en sus multiples salidas, las personas solian mirarlos de forma extraña o incluso molesta cuando pasaban con las manos entrelazadas por los espacion publicos, eso relmente no les molestaba ni era mucho menos una gran preocupación para ellos.

En alguna ocasion salieron juntos a caminar, costumpre que ya estaban retomando, pasaban mucho tiempo juntos ultimamente.

Subieron por los estrechos haste llegar a una cumbre, bastante linda a simple vista, muy similar al prado en el que comunmente solian sentarse a descansar solo que algunos cuantos kilómetros mas adelante, las caminatas se estaban volviendo mas rapidas cada vez, cosa que ambos gozaban de la compañia del contrario.

Se sentaron en el suelo, y se miraron mutuamente, sin hacer ningun movimiento o ningun sonido unicamente disfrutando estar en el ahi y el ahora.

NARRA SANZU

La tarde estaba tranquila, el invierno estaba en su punto mas alto, el frio me calaba en los huesos aunque fuera medio dia, estabamos juntos, viendonos el uno al otro, podia ver la cara de mikey, con esa exprecion pasifica que siempre poseia, esta calmado, yo igual, me alegraba estar con el.

Pose mi mano en una de sus mejillas, heladas por el frio, y acerque lenta y cuidadosamente su palido y delicado rostro hacia el mio, uni nuestros labios en un calido beso, que el rapidamente siguió, no fue raro ya que esto ultimamente ocurría con constancia entre nosotros, siempre me gustaron los besos de mikey, cuando senti sus labios contra los mios, un frio y sueve contacto contra mi piel, que al igual estaba fria por la baja temperatura.

Pude sentir a mikey levantarse ligeramente de su lugar para sentarse sobre mi regazo, sus brazos rodeaban mi cuello y mis manos estaban posadas en su delicada cadera, mikey siempre a sido delgado, pero hay temporadas en las que el realmente baja de peso hasta ser aterradoramente flaco, esta por suerte no era una de esas ocasiones, que de echo últimamente eran mucho menos comunes en el peliblanco, cosa que me alegraba bastente, me resultaba preocupante saber que se pudiera encontrar mal de salud por no alimentarse bien.

Se sento sobre mis piernas, jale de su pequeño cuerpo para acercarlo mas a mi, pude sentir sus delicados labios separarse lentamente de los mios y inhalar con fuerza provablemente por la falta de aire.

Aproveche que sus labios se alejaron de los mios para bajar lentemente a su cuello donde deje un humedo camino de besos, entre los cuales se colo alguna mordida o lamida que no pasaba desaparcibida por el peliblanco.

NARRA MIKEY

Podia sentir los sueves labios de sanzu contra la piel desnuda de mi cuello, el frio nos rodeba, pero ambos irradiabamos calor.

Sin poder evitarlo cada cierto tiempo, cada que sanzu daba una mordida, una lamida, un beso mas apasionado que el enterior de mi garganta se ecapaban pequeños suspiros, quejidos y en ocasiones uno que otro ligero gemido, podia sentir la sonrisa de sanzu, sus blancos dientes colisionando contra mi piel, y escuchaba pequeñas risitas de su parte cada que me quejaba, esto no era algo que hicieramos a menudo, de echo creo que nunca habíamos llegado tan lejos como ahora, no me quejaba claro, de echo era bastante placentero.

Sus labios subieron de nuevo a los mios, el beso se torno nesesitado, desesperado, como si en este pidiera mas a gritos, pude sentir su boca abrirse lentamente, imite su acción y pude sentir su calida lengua adentrarse dentro de mi boca, explorar cada sentimetro de ella, en un vaivén de emociones, de placer, de sentimientos encontrados y de pasion.

Sanzu jalaba desesperadamente mi cintura para acercarme mas a el, aunque nuestros cuerpos estaban prácticamente uno sobre el otro, compartiendo un estrecho y reduesido espacio, sentados contra un arbol, en un solitario lugar a las afueras de la ciudad, extremadamente sonrojados, soltando consteantes suspiros, gruñidos, quejidos, o en si gemidos de placer.

Podia sentir el calor subir en mi cuerpo, podia escuchar pequeños gruñidos de parte de sanzu cuando me movia sobre su regazo debido a la incómoda pocicion en la que estabamos, deje caer la cabeza hacia atras, dejando mi cuerpo completamente a su merced, dejando que hiciera conmigo lo que quisiera.