IX

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NARRA SANZU

Regresamos a la casa despues de un rato, no paso nada fuera de lo comun, pero mikey si debera cubrir su cuello hasta que las marcas se vallan, hacer esta clase de cosas no era tan común entre nosotros, pero tampoco era la primera ves que teniamos un encuentro como ese, por lo que no era como que no supieramos como reaccionar.

Seguimos con nuestras vidas normales pero el echo de esconder lo que tenia con mikey comenzaba a molestarme, queria ser mas que amigos con derechos, queria estar con el,quieria aprovechar todo el tiempo que pudiera para pasarlo con el.

Comensaba a pensar que tal vez y solo tal vez podria ser correspondido, digo mikey nunca habia rechasado ninguno de mis besos,  incluso los iniciaba, me tomaba la mano al caminar, o el una que otra ocasion, aveses a mitad de una abrazo besaba suavemente mi cuello, olia mi perfume, y le encantaba decirme lo bien que olia todo el tiempo.

Lo invité a salir ace poco, estabamos en una plaza, tenia la intencion de llevarlo a comer a un pequeño pero lindo restaurante, bastante exclusivo, por lo que hacia varias semanas tuve que hacer una cara recervacion.

No era extraño que fueramos juntos a comer, por lo que no era una salida fuera de lo normal, ya en varias ocasiones mikey me había llevado a sus caros restaurantes pero esta ves fui yo quien lo invito.

Entramos y nos sentamos, el mesero llego a atendernos casi de inmediato, mikey pidio algun platillo ecotico que no conosco a la perfeccion pero segun entiendo era algo similar a una tabla de quesos con pescado.

Yo por mi parte pedi un plato de pasta con un poco de pure de papa, una de las cosas que aprendi de mikey en este tiempo es que ama el pure de papa, o bien, casi cualquier alimento derivado de estas, por lo que cosnstantemente daba pequeñas probadas a mi plato, y una risa se me escapaba cada que esto pasaba.

Comimos tranquilamente y pedimos una botella de vino tinto del 84, nunca e sido muy fan del vino pero este era bastante bueno si.

Salimos del restaurante y caminamos a paso lento hacía la casa, estaba helado, el tiempo pasaba tranquilo, y el cielo grisaceo amenasaba con soltar una fuerte tormenta o bien una nevada.

Llegamos, nos adentramos por los pasillos y llegamos al cuarto de mikey.

NARRA MIKEY

Llegamos a la entrada de mi cuarto lugar hasta donde sanzu insistio en acompañarme a pesar de que no era nada lejos de la entrada, a diferencia de su habitacion que si estaba a varios pasillos de distancia, insisti en que podia ir solo pero el aun asi me acompaño.

Ultimamente me ponía mas nervioso que nunca al estar con el, si bien su precencia siempre me causo una molestia en el estomago, ahora era mucho mas fuerte, todo esto comenso mas que nada cuando empesamos a tener encuentros un poco mas eróticos.

No era que eso me molestara, para nada, lo disfrutaba mas que nada, ere realmente agradable sentir los hermosos labios de sanzu contra mi piel, su cuerpo sobre el mio.

Estabamos en la entrada de mi cuarto cuando sin pensarlo mucho depocite un suave beso en sus labios, beso que el siguio de inmediato, beso que se fue tornando salvaje, lleno de pasion, de deseo.

Pude sentir su cuerpo acorralandome contra la pared y solte un pequeño gemido al sentir sus dientes capturar uno de mis labios, y tirar ligeramente de el, nos separamos por falta de aire y podia sentir mi corazón latir con rapides, mi respiración agitada al igual que la suya.

Sus manos bajaron a la parte trasera de mis muslos, casi tocando mi trasero, mientras las mias estaban tras su cuello, enredando mis dedos en su cabello, entramos a la habitacion, aun con los labios unidos, no paramos hasta que mi espalda choco contra uno de los muebles que decoraban el cuarto, sanzu me levanto levemente para que pudiera sentarme sobre aquel taburete, abri las piernas, dejando al pelirosa quedar entre ellas, separamos nuestras bocas, comense a besar su mandibula, sabia que amaba que hiciera eso.

Nos separamos, puse mis manos en su cintura, y lo mire con duda.

-puedo?

-sabes que si- respondio a lo que no espere ni un minuto para levantar su camisa, se la quito, pude ver su pecho desnudo, ya lo habia visto asi en alguna ocasion, provablemente nadando en la picina de la mancion, pero nunca asi, nunca de tan cerca, nunca habia podido tocarlo, el hiso lo mismo con mi sueter y posteriormente todas las capas de ropa que llevaba en la parte superior de mi cuerpo, seguimos besandonos, pase mis manos lenta y delicadamente por su torso, podia sentir cada parte de el.

Paso sus manos por mis brazos, y bese su cuello dejando un camino de besos desde este hasta la parte baja de su pecho dando alguna pequeña mordida de vez en cuando escuchando quejidos, suspiros, gruñidosy gemidos por su parte, mira hacia arriba, pude ver a sanzu, completamente sonrojado, este se agacho y tomo mi barbilla uniendonos en un beso aun mas intenso y nesesitado que el anterior.

Nos movimos hasta llegar a la cama, donde me deje caer y el subio sobre mi, sentia su respiracion contra mi piel desnuda, y su aliento chocando contra mi cada que soltaba un suspiro.

Se dejo caer en la cama al lado mio, lucia cansado, y no quise exigirle seguir con esto si bien lo estaba disfrutando de una forma que me parecia inhumana jamas lo forzaría a nada.

Paso un rato, mi corazon latia tan rapido que sentia que moriria, sanzu eataba acostado al lado de mi, nuestras manos estaban entrelazadas, sus ojos estaban posados sobre los mios, sin poder evitalo lo abrazé escondi mi  cara en su cuello y rode gentilmente su pecho con mis brazos, no se en que momento deje de prestar atención, no se en que momento cerre los ojos, solo sabia que estaba con el, y no nesesitaba nada mas.

El Privilegio De Sentir Contigo [sanzu × mikey] [bonten]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora