6. Reflejo.

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Lamento tardar tanto, me he encontrado algo ocupado. Pero no pienso abandonar la historia, mi objetivo es desarrollarla bastante. ¡Aquí les dejo un pequeño pero importante capítulo!.










— ¿No crees que fuiste muy rápido con lo de Saya?.—

— Ni sí quiera lo pensé muy bien.... Pero, no ví que Kotori se molestara.—

— Me sorprende, casi siempre piensas 2 veces las cosas antes de hacerlas.—

— Como sea, ya lo dije.... Por cierto... ¿No crees que llevas mucho tiempo en mi apartamento?.—  Preguntó Umi con una expresión de enfado al ver como su apreciada amiga bebía vino de su copa mientras tomaba asiento en la barra de la cocina. No es que Umi no quisiera convivir con Eli, pero ya llevaba más de 2 días seguidos frecuentandola y le parecía extraño. Tomó asiento frente a ella.

— ¿Tan rápido te cansaste de mí?. Que cruel eres Umi.— La rubia bajó su copa y dejó escapar un largo suspiro que terminó en una mueca de preocupación.

— Para que te pongas así y que no quieras regresar a tu apartamento, claramente quiere decir que pasó algo entre Nozomi y tú.— La escritora miró con ojos determinados a su jefa.

— No tardaste mucho en adivinarlo.— La mayor giró su rostro evitando hacer contacto con los orbes ambar de su trabajadora.

— Cuéntamelo. ¿Ahora qué hiciste?.—

— ¿Por qué debe ser mi culpa en primer lugar?. Según yo, no he echo nada malo.— Bufó con desánimo.

— ¿Haz hablado con ella? ¿Qué sucedió exactamente?.—

La casi magnate-Ayase se removió en su lugar temiendo lo peor; pues ni sí quiera ella misma sabía la razón del por qué su novia parecía evitarla a toda costa. Recargó su mentón en la palma de su mano y por fin rodó sus ojos a los de Umi.

— Exactamente hace 2 días empezó a actuar rara conmigo. Me evita y me hace sentir incómoda, hablamos lo necesario y no sé qué hacer.— Tragó fuertemente llena de tensión. Usualmente Nozomi es una persona muy difícil de leer y a la brillante rubia le costaba entender aspectos sentimentales por su densidad. No quería empeorar el momento y se limitó a escapar de la situación.

La dueña del apartamento se cruzó de brazos para meditar por unos minutos antes de decirlo algo. Un brillo en su mirada encendió una idea en su cabeza.

— Justamente hace 2 días escuché del personal que ella había ido a visitarte, exactamente de las secretarias. ¿Habló contigo de algo?.— Comentó y preguntó con toda la intención de ayudarla.

— ¿Fué a visitarme?. Oh dios, jamás fué a verme.— Eli se puso de pie y colocó sus manos en su cabeza.

— ¿Por qué te preocupa tanto?.— Umi se exaltó al ver que la rusa hablaba consigo misma.

— Hace un tiempo corrieron rumores de que existía algo amoroso entre tú y yo. Y esos rumores llegaron hasta los oídos de Nozomi.—

— Esas secretarias... No saben más que crear chismes.— La menor rechino ligeramente los dientes por el enojo.

— Ya lo habíamos hablado y esas cosas.... Pero. ¿Qué sí fué a buscarme y otra vez escuchó algo?. No he tenido tiempo para organizar una junta con todo el personal y poner un alto .— Se mantuvo cabizbaja...— Ahhhhh. ¡Por eso esta molesta!.

— Tal vez también tenga que asegurarle a Nozomi que no existe ese tipo de cosas. ¿Crees que sirva?.— Intentó apaciguar a su compañera con preocupación. Sabía perfectamente que ese tipo de cosas eran peligrosas y más considerando la posición de Eli como encargada de la empresa.

Kanjō no Umi (KotoUmi) (FUTA) /Finalizado/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora