Por el que brilla el sol || Ziam.

II

La danza de los siete velos proviene del mito del descenso de Ishtar/Inanna al inframundo, esta danza si bien integra movimientos propiamente orientales, en la película Salomé de 1953 se la representa muy bien. Para lo cual, espero que el fragmento de la película sea de ayuda para poder recrear en la imaginación el siguiente capítulo. :D

Nota: Los siete Me, son tablillas, son leyes fundamentales para la relación entre los humanos y los dioses, garantizando el equilibrio del universo.

═══════ ≪ •❈• ≫ ═══════

Un día, desde lo alto del cielo ella quiso marchar al Infierno.
Desde lo alto del cielo, la diosa quiso marchar al Inframundo.
Desde lo alto del cielo, Ishtar quiso marchar al Irkalla.
¡La dama abandonó el cielo y la tierra para descender al mundo Inferior, Ishtar abandonó el cielo y la tierra para descender al mundo Inferior!
(...)

Iniciado el cambio de música junto al canto armonioso de la sacerdotisa, la declamación a la diosa se inició. El príncipe avanzó hasta el centro del suntuoso jardín, justo donde el festejo se realizaba y donde el rey persa se hallaba ansioso por verle.

Los pasos del príncipe fueron lentos, siguiendo el ritmo inicial que los instrumentos fusionaban, llegó a posicionarse delante de Liam junto a un esclavo y una reverencia fue lo primero que hizo para saludar al jóven rey. Así los ojos de ambos se conectaron de inmediato, permitiendo que Zayn apreciara unos segundos los ojos ámbar de Liam siendo adornados por el negro del Khol.

Ella reunió los siete Me.
Los tomó en sus manos.
Dueña de los Me, se preparó:
Colocó sobre su cabeza la shugurra, la corona de las llanuras. Acomodó sobre su frente los oscuros rizos.
Ató las pequeñas cuentas de lapislázuli alrededor de su cuello,
Dejó que la doble hilera de cuentas descansara sobre su pecho,
Y envolvió la túnica real alrededor de su cuello.
Untó sus ojos con el ungüento llamado "que venga, que venga",
Se ató el pectoral llamado "Ven, hombre, ven" sobre su pecho,
Deslizó el aro de oro en su muñeca,
Y llevó en la mano la vara de medir y la línea de lapislázuli.
Ishtar partió hacia el inframundo.
Ninshubur, su fiel sirviente, fue con ella.
(...)

Siete, son siete velos que cubren por completo el cuerpo de Zayn, son siete velos que representan las siete posesiones que llevó la diosa cuando decidió bajar al Irkalla para gobernar sobre algo que se le fue dado a Ereshkigal, ¿acaso gobernar sobre el cielo y la tierra no era suficiente para Ishtar? Son siete velos que representan las siete puertas del inframundo, son siete los pecados que son juzgados al llegar al juicio frente a la reina del inframundo.

Liam no comprendía la situación, hasta que vió mejor aquella corona babilonia sujeta a la cabeza de quien delante suyo le reverenciaba. Solamente podía apreciar unos profundos ojos mieles porque los velos cubrían por completo al príncipe y eso solo impacientaba más su estado. Ansiaba confirmar que sus soldados tenían razón; que la belleza del príncipe no tiene igual y es tan deslumbrante como el ataque en batalla que ofrece Zayn.

Cuando Ereshkigal oyó a su portero leal,
Golpeó su muslo y se mordió el labio.
Tomó el asunto a pecho y lo consideró.
Entonces habló:
"Ven, Neti, mi portero mayor del Irkalla,
Obedece mis palabras:
Atranca las siete puertas del inframundo.
Luego, una por una, abre una grieta en cada portón.
Deja entrar a Ishtar.
Cuando entre, despójala de sus vestimentas reales.
Que la sacerdotisa sagrada del cielo entre inclinada.
(...)