Say, I love you [Aomine Daiki]

Capitulo 6: Fruto de tu vientre.

Hola todo el mundo! :) como todo fin de semana les traigo una nueva parte de esta historia, ya estamos llegando de a poco al final. Ok ya no digo nada más, solo avisarles que avanzamos rápido ^^

PD: Les dejo un vídeo que me encanta. Por favor veanlo. Me gusta mucho para esta parte de la historia en especial cuando dice;

"Cualquiera puede cerrar los ojos

Fingir que no pasa nada.

Abre los ojos

y busca la luz"

PD2: Amo ONE OK ROCK!

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-"No vuelvas a buscarme" - aquellas palabras retumbaron en la cabeza del muchacho.

Su vista intentaba escapar de la figura frente a ella. Daiki intentó acercarse una vez más ya que noto un leve temblar en el desplante de la muchacha, pero ella seguía retrocediendo. Se mordió levemente el labio esperando que el moreno le hiciera caso y se alejara, no podía estar mucho tiempo frente a él, sentía que su cuerpo de desarmaría en cualquier momento.

Si tal vez su actitud mostrase lo mismo que sus palabras frías habría hecho caso, ligeramente, a lo que dijo y por el momento la dejaría marchar sin reproches, pero aquella chica frente a él gritaba desesperadamente lo contrario. Sus ojos se movían intranquilos de un lado a otro, jugaba torpemente con los dedos de sus manos y sin mencionar el estremecimiento que la tenía casi inmóvil. Estaba convencido de que todo aquello era por algo, quizás ella no quería involucrarlo demás pero aun así sentía que lo necesitaba.

-¿Por qué? - preguntó Aomine. - ¿Por qué quieres que me aleje de ti?

Nanao lo miró dos segundos y corrió la vista otra vez, Ran quien había estado observando sin entrometerse no aguanto más y tomó a su hermana de la mano.

-Daiki, este no es el lugar para charlar -dijo algo molesta al ver a su hermana incomoda -Quiero llevar a Nao a casa lo antes posible, si me disculpas -

-Yo las llevaré -soltó el basquetbolista interrumpiendo a Ran -Mi auto está cerca.

Para la menor aquello fue una mala idea, miró a Nanao pero esta no respondía a nada, solo evitaba la mirada de los jóvenes presentes y temblaba ligeramente, era notorio que no estaba a gusto allí.

¿Qué era mejor, irse en un bus lleno de gente que no conocía y que seguramente rozarían su cuerpo con el vaivén de este o tomar el cómodo auto del joven? La respuesta saltaba a la vista, solo tomaría ese último favor del moreno.

-Está bien -soltó con suavidad hacía su hermana.

Aprovechaba cada momento en el que detenía su automóvil para mirar por el espejo retrovisor a Nanao. Ella miraba por la ventana con sus ojos oscurecidos por el cansancio y sus manos apoyadas a los costados como si no tuviesen vida.

-"Está embarazada" - Recordó las palabras de Ran hace unos días atrás y su vista se fijó en el vientre de la chica. Él conocía su cuerpo más que nadie y no le fue difícil notar como un pequeño bulto levantaba su ropa. Aquella era la evidencia total de que todo aquello no fue una pesadilla.

Sabía que él conocía su estado y también había visto su cuerpo, deseo poder desgarrar aquello que crecía dentro de ella, arrojarlo lejos o quemarlo, sonaba cruel pero era lo que sentía. Tomo el borde de su sweater y lo jalo hacia abajo, como si con ello pudiese ocultar su vientre pero eso no desaparecía así de simple. El ambiente dentro de aquel carro era frio, nadie había dicho nada desde que se subieron y por alguna razón Aomine dejo de hacer preguntas, solo se limitaba a conducir. Aquello la mortificaba más, si bien no quería hablar sobre los grandes temas pendientes que tenían ella y el moreno, necesitaba algo que la sacara de sus pensamientos, que la distrajera por unos momentos de aquello que se movía dentro de ella o de los dolores de las heridas que aún no cicatrizaban... pero nadie hacia algo.