Deseos prohibidos| Daeron × Joffrey|

Capítulo I

En una semana Joffrey empezaría a estudiar en la universidad y junto con sus padres había decidido que sería mejor irse a vivir con su tío Daeron ya que su casa estaba más cerca de la universidad.

- ¿Cariño, ya tienes todo listo? -. Le preguntó Rhaenyra desde la puerta, la mujer estaba triste, todos sus hijos ya se habían independizado y ahora también se iría Joffrey. No es que se fuera muy lejos, la casa de Daeron estaba en el centro de la ciudad y la suya a las afueras, pero aun así la mujer se sentía triste.

-Mamá, no pongas esa cara, ya sabes que vendré a menudo a verte-. Le dijo Joffrey mientras terminaba de cerrar su maleta.

Ambos se dirigieron al coche y Rhaenyra puso rumbo a la casa de su hermano Daeron, Daemon no pudo acompañarlos ya que se encontraba trabajando en la empresa familiar, él era el jefe junto a su hermano Viserys. Además, Daeron pronto empezaría a trabajar también en la empresa pues acababa de terminar la carrera de marketing.

- ¿Y estás segura de que al tío Daeron no le importa que empiece a vivir en su casa? -. Le preguntó Joffrey a su madre, no es que tuviera mucha relación con su tío, se habían distanciado cuando este empezó la carrera hace cuatro años.

-No, dice que no le importa-. Le dijo Rhaenyra, Joffrey asistió con la cabeza.

Al cabo de un rato llegaron al complejo de edificios en donde se encontraba el apartamento de Daeron, entraron dentro del edificio y se subieron al ascensor, Rhaenyra pulsó la tecla de la sexta planta, una vez llegó el ascensor salieron al pasillo y se dirigieron a la última puerta que había, Rhaenyra tocó el timbre y la puerta no tardó en abrirse. Joffrey pudo ver a su tío, hacía unos meses que no lo había visto pues estuvo muy ocupado con los exámenes finales del curso. Además, últimamente la familia ya no se reunía mucho porque todos estaban ocupados en sus trabajos.

-Hola hermano, aquí está Joffrey, perdón por no estar más tiempo, pero me tengo que ir-. Le dijo Rhaenyra dándole un abrazo y luego despidiéndose de Joffrey, ambos vieron como la mujer entró en el ascensor, una vez solos Joffrey entró en la casa.

-Ven, sígueme, te enseñaré tu nueva habitación-. Le dijo Daeron mientras agarraba su maleta y empezaba a subir las escaleras. En el pasillo de arriba había tres puertas.

-Está es mi habitación-. Le dijo Daeron señalando la primera puerta.

-La tuya es la del fondo-. Añadió señalando la última puerta.

- ¿Y que hay en esa habitación? -. Le preguntó señalando la otra puerta restante.

-El despacho-. Le respondió el rubio. Luego ambos entraron en la nueva habitación del moreno, era bastante grande, tenía una cama de matrimonio en el centro. Además, tenía un escritorio delante de la ventana y en una esquina había un pequeño sofá junto a una tele.

Daeron dejó la maleta encima de la cama y se giró hacia el moreno, ambos se quedaron mirándose unos instantes.

-Te ves mejor-. Le dijo Daeron.

-Ya no pareces un crío-. Añadió con una voz burlona provocando que el moreno lo mirara mal. Eso era verdad, Joffrey había crecido bastante, hasta superaba a Lucerys en altura, además tenía un cuerpo atlético gracias a las horas que pasaba bailando, el pelo moreno se lo había dejado un poco largo, le llegaba por arriba de los hombros.

-Soy casi igual de alto que tú-. Se burló esta vez Joffrey, su tío solo le sacaba unos centímetros, aunque era más fuerte que Joffrey, sus músculos se notaban cuando flexionaba los brazos, él llevaba el cabello rubio corto.

-Bueno, te dejo para que coloques las cosas-. Le dijo Daeron mientras se acercaba a la puerta.

-Luego podemos cenar juntos para ponernos al día-. Añadió.

-Vale-. Le dijo Joffrey, una vez solo empezó a colocar las cosas en el armario, mañana tenía que ir a comprar todo lo necesario para la universidad, se alegraba que la casa de Daeron estuviera en pleno centro, hasta podía ir caminando hasta la empresa para saludar a su padre Daemon. No entendía porque su madre se empeñaba en tener la casa en las afueras, según ella era más tranquilo.

Una vez que colocó todo tuvo ganas de darse una ducha, en la habitación había una puerta que supuso que era el baño, cuando la abrió pudo ver que era bastante grande, tenía una bañera enorme. Como a un faltaba algunas horas para la cena decidió tomar un baño relajante. 

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Holaaa! Aquí está el primer capítulo!

Que os parece?

Estoy muy ilusiona por escribir esta historia ☺

Votando me hacéis muy felizzz!