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Elise Campos-

Cerré los ojos mientras escuchaba la música reproducirse.

Mi mente se fue a aquella noche en la que me volví a sentir una nena en los brazos de papá. Luego de ese cuadro nervioso no volvimos a mencionar nada sobre el tema, cosa que agradecía mucho internamente.

Miré por la ventana y suspiré, iba en caminó a la casa de mis tíos a los cuales no miró hace 1 semana porque no quería salir de mi pieza hasta que Amadeo y Bruno me dijeron que saliera porque me extrañaban, definitivamente son mi debilidad.

Miré al conductor, no era mi papá era mi Tío Sebas, la relación con Tomas Campos volvió a ser la misma que antes, el intentaba acercarse y yo intentaba alejarlo.

Me muero por tener una buena relación paterna, pero lo mucho que me hizo sufrir no me deja.

—Llegamos nenes—habló mi tío Sebas mirando hacía atrás, donde íbamos Amadeo, Bruno y yo.

—No somos nenes—dijo Bruno rodando los ojos.

—Para mi siempre van a ser nenes—habló mi tío Sebas ofendido por lo que solté una risa.—Vos no te rías pendeja—dijo apuntándome y yo levanté las manos en señal de inocencia mientras sonreía divertida.

Bajamos del auto y entramos en la casa de modo diablo.

Me tiré al sillón con cansancio, últimamente volvía a dejar de comer y eso me causaba mucho cansancio. No lo debería estar haciendo, pero tristemente lo hago.

Me sentía más débil de lo normal y eso empezaba a preocuparme muy en el fondo, pero mi pensamiento era el volver a mi cuerpo de marzo, mes en el que me encontraba muy mal con todo este tema.

Hace 2 semanas volvimos de Cutral y creo que esa visita me había hecho mal, todos los comentarios que recibí de parte de la familia paterna de mi papá daban vuelta por toda mi cabeza. Y a lo malo le sumaba el que no pude ver a mamá porque fue un viaje rápido.

Por otro lado la familia materna de papá había sido todo lo contrario, eran un amor conmigo, era la única nieta y me amaban mucho.

—Eliseeeee—escuché el grito de mi tío Mauro por lo que me exalté y volteé a ver.

—¿Eh?—dije sin entender.

—Hace 5 minutos te estoy hablando—dijo cruzando los brazos—A saber en que pibe pensas—habló.

Ojalá pensara en un pibe y no en toda esta mierda, ojalá.

—¿Qué pasó?—pregunté quitándome los audífonos y dejándolos de lado.

—Vamos a pedir comida, ¿Qué queres?—preguntó mirando su celular.

—No tengo hambre—hablé mordiéndome el labio inconscientemente, me estaba muriendo de hambre.

—Hoy no has comido nada en todo el día, Elise—habló mi papá desde su lugar.

—¿Cómo que no has comido nada? Son las 9 de la noche, Elise—habló mi tío Mauro.

—Es que no tengo hambre—dije mintiendo.

—A ver princesa del tío—habló y se sentó a mi lado—¿Por qué no queres comer?—preguntó morándome, a el no le puedo mentir.

—Pedime una hamburguesa con papas fritas—dije con vergüenza y el sonrío por su logró, mi papá miraba con una micro sonrisa, el no había logrado que yo comiera nada.

Después me voy arrepentir tanto de esto.

-LittleGirl
28/12/22

💌: Aparezco después de 5 meses, me disculpó por no actualizar pero fue un año de mierda para mí y deje muy de lado esto.

Voy a intentar actualizar más seguido;)

𝐋𝐚 𝐡𝐢𝐣𝐚 𝐝𝐞 𝐮𝐧𝐚 𝐞𝐬𝐭𝐫𝐞𝐥𝐥𝐚| 𝐂.𝐑.𝐎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora