La Sonrisa De La albina (Spinosaurio X Indominus)

Episodio 7: Un nuevo inicio

– Nooo... No otra vez... Solo fue una pesadilla... Otra maldita pesadilla -comento un Espinosaurio de un color rojo marrón - debo de dejar de pensar en eso “¿realmente fue mi culpa la muerte de mi madre? ¿Y si hubiera no la hubiera  abandonada?" Son tantas preguntas...

El pequeño Spike aun siendo un chico tendría que sobrevivir sin su madre o alguien que lo guiará en este camino llamado “vida”  lo primero que haría sería buscar algo de comer aunque sea un mísero insecto

– mamá... Tengo hambre... Mucha hambre... -comento para empezar a sollozar. Te extraño mucho mami...

En otro lugar de Sorna, específicamente en un nido de allosaurus una madre llegaría tarde a su hogar encontrado algo que le dolería hasta lo profundo del alma... La destrucción de su nido y con ellos sus huevos

– No... No mis niños... No ellos -lloroba una allosaurio al ver tan solo simples cáscaras de huevos vacios sin el contenido que tanto espero ver durante varios meses

En otro lugar el pequeño Spike

Estaría en un lago no muy profundo dónde podría caber fácilmente un cocodrilo sin que nadie lo viera además de que gracias a la estatura del estanque no había rastros de posibles depredadores sin embargo algo estaba al oculto en el lago y notaría la presencia del Espinosaurio por lo que sin perder más tiempo saldría del agua sorprendiendo a Spike y asombrandolo por lo raro que estába viendo a lo que comento

– Eres como yo... Pero de un color rojo marrón como... ¿Un pino? Creo... ¿Pero que es un pino?

– ¿Eh hola?

– SiSi ya te Vi me llamo Vandal una gusto conocerte

– Lo mismo digo... ¿Vandal? Pero que haces aquí y ¿de dónde eres?

– Bueno yo pertenezco a otra isla de por aquí, crecí en un pequeño lugar tenía paredes invisibles que no me permitían salir al exterior, siempre chocaba jajajaja que vergüenza siento contándole esto a alguien más además de mi jejeje... Bueno añado que escuche en un momento que sería compañera de alguien... Aún me preguntó de quién habría Sido. Y ¿tú qué me cuentas?

–¿Yo...?

– Si, tu jajaja o hay alguien más aquí aparte de nosotros dos, oh espera si lo hay ese bicho ahí, hola bicho jajaja. Bueno como te decía ¿puedes comentarme algo de ti?

– Bueno... Yo nací por mi madre una Baryonix me crio en un lugar llenos de su misma especie, me llevo a ese lugar cuando era un simple huevo... En ese lugar siempre me discriminaban... Por la vela que tengo atrás mío, mamá decía que me tenían envidia, todo sería felicidad para nosotros hasta que lo reto el... En ese momento... Ver cómo mamá perdía... Cómo moría... Cómo fui un inútil... Cómo no pude salvarla... A veces quisiera haber no nacido para que ella no hubiera sufrido, siento que era lo correcto después de todo

– Hey hey tranquilo no pasa nada tal vez fue el destino quien se llevó a tu mamá, una vez escuché que todos tenemos un propósito en la vida y al momento del cual termina nuestro objetivo simplemente se acaba ahí no podemos hacer más que tan solo limitarnos a esperara nuestro turno, después de todo somos seres vivos, nacemos crecemos y morimos ¿Quien sabe tal vez tu madre esté en un lugar mejor? Mirándote... En lo que te vas a convertir, creeme ella estaría más tranquila no viéndote triste.

El Espinosaurio se quedó pensado un rato, meditando todo lo que había mencionado, así que decidido decido cambiar su estado negativo a uno muy positivo.

– Tienes razón, mi madre no estaría feliz si me viera triste, después de todo siempre ella hacia que de alguna forma logrará sonreír incluso en los momentos más tristes de mi vida. Gracias Vandal, realmente lo nesecitaba