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Una visita inesperada

Aquiles regresaba a su hogar había sido un día largo, le daba clases a alumnos universitarios y después daba clases a una minoria de niños, esta vez los niños le pidieron jugar así que jugaron un rato fútbol americano , eso lo hacía sentir mal ¿Podía jugar con otros niños pero no podía ver a su hijo?
Su hijo hoy cumplía 7 meses, estaba seguro que su madre le mandaría mensaje para que fuera a verlo pero no iría, no contestaría sus mensajes.

Más cual fue su sorpresa cuando llegó a su casa y vio a Patroclo incómodo en la entrada

— Pat cariño ¿Que haces afuera?

— Aquiles tu madre está adentro

— ¿Qué ?

No esperaba que su madre fuera, pensaba que con un mensaje bastaba, la pareja de casados entró y Aquiles vio a su madre, no la había visto en algunos meses, no había cambiado nada, sus ojos verdes, ese cabello azabache lizo que llegaba hasta su espalda, y esa piel pálida, verla le causaba escalofrío

— Hijo qué bueno verte

— Un gusto verte madre

La voz de Aquiles fue corta, no sabía que decir hace tiempo que no la veía

— Hijo necesito hablar contigo

— Dilo

— A solas

Pronunció viendo a Patroclo de una manera fría y neutra

— Madre ya hablamos de esto, Patroclo es mi esposo y eso jamás cambiará

— Hijo es un asunto familiar

— Patroclo se queda madre

— Te lo repito es un asunto familiar

La voz de Tetis se volvió firme ¿ Por qué Aquiles era tan testarudo?

— ¡Y yo te repito que mi ESPOSO se queda !

— Aquiles tranquilo por favor...

Patroclo agarro el brazo de Aquiles

— Bien lo que digas

Tetis tan sólo soltó un suspiro y se sentó en el sillón

— Aquiles, Deidamia está en el hospital, puede morir

— Oh, que mal

La voz de Aquiles era desinteresada, no le importaba si Deidamia estaba apunto de morir, verdaderamente le daba igual

— No voy a pelear contigo sobre Deidamia, vengo aquí porque debes cuidar a tu hijo, Deidamia no puede

— Cuídalo tu, te doy todo el dinero necesario para que él esté bien

— ¡Aquiles es tu hijo!

— No me importa

— Yo no puedo cuidarlo, tengo un viaje mañana por negocios y no puedo llevarlo, además es tu hijo, ¡ TIENES QUE HACERTE CARGO!

¡SOMOS PADRES!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora