Beautyfull or Beloved

Nucleo roto

Pov Omnisciente.

Los chicos habían llegado a la escuela corriendo, apoyados en algún poste o en el suelo tratando de recuperar el oxígeno.

Gaz: Mierda, ¿Porque corrimos?

Zim: Pudo haber sido alguien disfrazado al que le gusta gastar bromas. —Decía sosteniéndose el pecho sintiendo sus pulmones al inhalar.

Dib: ¿Bromeas? Son las 2 de la mañana, ¿Quien querría ir a un cementerio a asustar a esta hora?

Zim: Pfff yo pensé que serías el primero en hablarle. —Comentó riendo un poco.

Dib: Jaja no, podré "estár loco" pero no tanto como para correr el riesgo de ser poseído por un ente. —Comentó con algo de nervio. —Pero si lo grabé. —Mencionó con una sonrisa confiada.

Zim: Uy si, seguro que la cámara lo captó. —Comentó burlesco. —La aterradora niña del cementerio. —Dijo cómo si se tratara de un titular.

Gaz: Nadie va a creerlo. —Comentó riendo un poco.

Tak: Calla, ¿No ves que están tan distraídos con el otro que apenas de acuerdan que existimos? —Cuestionó con una sonrisa burlona. —Parece que los nerds solo quieren compartir sus cosas de nerds entre ellos. —Comentó algo dramática haciéndose la excluida.

Dib: Pfff eso no es verdad. —Comentó riendo un poco. —Tu que dices Zim, ¿Deberíamos abrir un club de lo paranormal? —Cuestionó dramáticamente serio.

Zim: Je, mientras no pongas todo el día tu programita está bien. —Comentó sonriendo un poco, se sentía contento y algo emocionado.

Dib: Seguro, seguro. —Comentó rodando los ojos mientras las 2 chicas del grupo solo asentían seriamente, con ironía porsupuesto.

Luego de eso todos decidieron que sería mejor irse a casa, ya era bastante tarde y no querían meterse en tantos problemas.

[...]

Era temprano en la mañana cuando sonó la alarma, Tak se levantó con el cuerpo pesado, algo normal después de como se quedó despierta hasta muy tarde la noche anterior, se fue a lavar la cara. Su mente estaba en blanco mientras veía la cara de grinch que tenía en el espejo, una vez acabó se secó la cara, se arregló y bajó a desayunar.

Spork: Buenos días pulguilla. —Saludó con una sonrisa amable, mientras servía el desayuno.

Tak: ¿Papá? —Cuestionó algo sorprendida de verlo.

Spork: ¿Porque te quedas ahí parada nada más? —Cuestionó ladeando la cabeza. —¿Ya eres tan ruda que ni un abrazo me vas a dar? —Cuestionó mostrandose triste de forma dramática.

Tak: Pff, claro que no. —Dijo más tranquila yendo a abrazarlo. —Solo, no pensé que estuvieras en casa todavía. —Comentó aferrándose a su padre, para luego separarse y sonreír amenamente, un gran contraste con su personalidad más habitual.

Spork: Bueno, pero aquí estoy. —Dijo dando dos suaves palmadas en la cabeza de la chica, para seguido de eso avanzar a la cocina y comenzar a servir el desayuno que había hecho.

Ambos comenzaron a desayunar bastante tranquilos, hasta que bajó Miyuki arreglada y con una expresión seria que imponía elegancia apenas la mirasen.

Spork: Buenos días Miyuki. —Saludó amablemente, aunque su expresión fuese algo incómoda.

Miyuki: Buenos días. —Saludó desviando la mirada para seguido de ello avanzar a la puerta principal acomodando el bulto que llevaba. —Tak, no olvides que hoy formarás parte del programa de visitas.