IX: ¿Será esta la noche?.

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Han pasado varias horas desde que llegué a  casa de Deanna, ella está cansada, desde que estamos aquí su llanto no ha cesado y creo que es mejor dejarla descansar.

-¿Te vas sin despedirte?.- La voz de quien no quería ver, se hace presente detrás de mí.

-Claro que no, pero no sabía donde estabas.- Aún de espalda, ruedo los ojos. Me giro y camino hacia él, mis brazos rodean su cuello y su nariz se apoya en mi cuello. Puedo notar como sus lágrimas mojas mi playera, lo abrazo con más fuerza.- Lo lamento, enserio que sí.- Spencer se aleja de mí, me mira a los ojos y solo mueve su cabeza de arriba abajo.- Que descanses, mañana pasaré a verte.- Me suelto de su agarre y atravieso la puerta principal de la casa de los Monroe.

Me cuestiono si habrá sido bueno contarle todas las cosas que sabía a Deanna, sé que se ha llevado una desilusión por Aiden, que en paz descanse, ¿pero Nicholas?, él sigue vivo y creo que debería pagar por todo el daño causado.

La noche está fría y estrellada, decido ir a una de las bancas que rodean la laguna artificial de la comunidad a fumarme mi cigarrillo nocturno. Pongo mi cigarro en mis labios, pero esa horrible voz me saca de mi tranquilidad.

-No sería bueno que andes sola, ¿qué pasaría si un loco intentara matarte por ser una maldita entrometida en matrimonios ajenos?.- Pete me habla en el oído, puedo sentir su respiración, y extrañamente, no huele a alcohol.

-¿Qué quieres Pete?.-Trato de mantener la calma.

-Que te alejes, de mi esposa, de mis hijos, de mi, eso quiero.- Su mano toca mi hombro y comienza a apretarme.

-Suéltame maldito hijo de puta.- Lo que digo, trato de no decirlo en un tono muy elevado, sé que aún hay gente despierta y no quiero alarmar a nadie.

-¡Hey Rick! .- El hombre que hace segundos apretaba mi hombro fuertemente, ahora me soltó y comienza a hablarle a quien el odia.- ¡Rick!.

-Camina.- Dice el sheriff con sus ojos puestos en nosotros.

-¿Qué?, ¿qué estás diciendo?.- Pete pone su sonrísa diabólica y comienza a caminar. Ahora el sheriff se acerca a mi, y se sienta a mi lado.

-¿Hace cuanto lo sabes?.- Su pregunta es directa.

-Desde siempre Rick, desde siempre.- Mi cabeza ahora mira mis pies.- Ya no sé que más hacer.

-Deberíamos hablar con Deanna, ella es la líder de toda esta jodida comunidad, debería saber lo que está pasando.- El hombre parece estar enojado.- ¿Te estaba amenazando?

-Siempre lo hace Rick. Desde que llegaste tú, lo hace más seguido.- Suelto una pequeña carcajada.- Rick, he visto como ustedes se miran, solo te pido, ten cuidado, y cuídala, ella parece no darse cuenta de la gravedad de todo esto.

El hombre a mi lado me observa y escucha con atención.- ¿El día que estaban en el garaje.. ese día que dijiste todo eso, te referías a él?.- Yo solo asiento con mi cabeza expulsando el humo del cigarro.

-Sam, cuando ellos discuten, debe encerrarse en al armario de su pieza. Pete es un hombre muy violento y se imagina escenarios en su cabeza que no son.- Tomo una pausa antes de seguir.- Con tan solo decirte que una vez golpeó tan fuerte a Jesse que la dejó inconsciente, no la vi por días, y luego ella apareció como si nada.- Nuestras miradas se cruzan y puedo notar en sus ojos rabia.

-¿Qué te parece si mañana vamos a hablar con Deanna?.- Pregunto sin más.

-Me parece bien. Te veo mañana en mi casa a las 09.00 am.- Nos ponemos de pie al mismo tiempo, Rick me regala un abrazo, yo solo me quedo ahí quieta, no soy mucho de dar abrazos, pero al pasar unos segundos, se lo devuelvo, creo que a fin de cuenta, estamos juntos por la misma batalla

Through your eyes | Daryl Dixon +18  ✓ ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora