El sueño que lo cambio todo

Nadie debe saber esto (+18) Parte 2

Habitación de la Reina Alicent (escena +18)

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La Reina estaba notoriamente intranquila, la cena había sido un desastre, sus hijos ofendieron a los de Rhaenyra, su hija Helaena había hecho notar lo mal que iba su matrimonio con Aegon, esto solo demostraba que su vieja ex amiga tenía razón al querer casar a Jacaerys con Helaena, tal vez ella hubiera sido más feliz de esa manera...sin aguantar las constantes humillaciones de su esposo...¿Debió mandar a Aegon a su viejo hogar en Antigua? quizás de esa manera estaría en mejor camino que ahora, sus pensamientos fueron interrumpidos por unos golpes en la puerta, ella dio la orden de que entraran, tal fue su sorpresa al ver a una chica y un chico peliplata de ojos violetas pasar a su cuarto como si estuvieran en su casa.

-Su majestad-dijeron ambos al mismo tiempo haciendo una reverencia para la mujer que los miraba desconcertada

-¿Qué hacen aquí?

-Su esposo nos mando para...complacerla esta noche-Valyria sonrió de manera coqueta haciendo que Alicent se sonrojara hasta las oreja; hace años que su esposo no la tocaba...pero contratar a alguien para que le diera una noche de placer...eso de cierta forma era ofensivo, si la gente se enteraba pensaría que le fue infiel al Rey y sería mal visto ante los ojos de los siete...¿Qué diría su padre?...¿Acaso si Rhaenyra o Daemon se enteraban la echarían del palacio? Y si eso pasaba ¿Qué le ocurriría a sus hijos y nietos?, era demasiado por lo cual negarse, pero una pequeña voz en su interior le decía que nunca se sintió amada o anhelada por alguien, su esposo y la corte solo la veía como un objeto para traer al mundo herederos, jamás gozo del "privilegio" de una noche llena de placer, de autentica satisfacción sexual...esa voz le recordaba los incomodos momentos íntimos que compartió con el Rey y su cara no podía evitar una mueca.

-Por lo que adivino nunca la han complacido como se debe en la cama-esta vez fue Dragomir quien hablo, el chico se acerco hasta rodear a Alicent, quedando detrás de ella, la Reina trato de voltearse para verlo, pero el chico se lo impidió abrazando su cintura y pegando la espalda de la Reina a su pecho, haciendo que la mujer dejará escapar un gemido por la sorpresa-No la obligaremos a hacer nada que usted no desee...estamos aquí para complacerla, pero si usted quiere hablar...hablaremos, si quiere que la atendamos sexualmente...le aseguro que quedará satisfecha

-No...esto no es correcto

-¿Por qué no? Su esposo nos dio el permiso, el sabe que ya no puede dormir con usted y en cambio nos mando a nosotros para darle placer...digo el placer no es un pecado, la gente cae ante el y créame que muchos no se arrepienten de hacerlo-Valyria camino hasta Alicent para abrazar la cintura de la mujer de la misma manera que Dragomir lo hacia- Nunca la han complacido...como sabe si le gustará o no, si jamás lo a probado, solo debe darnos el privilegio de tenerla esta noche...mi Reina

-¿Privilegio? ¿Por qué pasar la noche conmigo sería uno?

-Es un broma ¿Verdad?-exclamo Valyria sonando muy ofendida- Todos dicen que la princesa Rhaenyra es la más bella del reino, nosotros discrepamos con eso...usted es una belleza trágica, un matrimonio sin amor, forzada a dar herederos y a cumplir con un deber...y aun así es hermosa

-Ella tiene razón, tiene un cuerpo hermoso-Dragomir descendió sus manos por las caderas y muslos de Alicent, sacándole un suave suspiro, y con sutileza estaba empezando a levantar el vestido verde de Alicent, mientras Valyria acariciaba los costado al lado de sus pechos-No entiendo como el Rey no puede ver a la belleza que tiene por esposa...déjenos darle una noche de felicidad

-Permítanos compensar todo lo que usted le a dado al reino, todo lo que a sacrificado para llegar hasta aquí-la chica unió sus labios con los de la mujer, Alicent gimió por el repentino beso y aunque algo decía que la alejara...no quería hacerlo; tanto que había dejado atrás para complacer a su padre, al Rey e incluso a sus hijos...¿Acaso ella no se merecía ser complacida también?, esta noche se dejaría hacer por estos dos, ya mañana pensaría mejor las cosas, por ahora su mente estaba nublada, su vientre bajo hormigueaba y el calor se estaba haciendo presente en su cuerpo. Dragomir desato el vestido con un poco de trabas, pero cuando finalmente lo hizo este cayo al piso dejando ver la ropa interior de la Reina, el chico complacido acarició todo lo que sus manos podía tocar, la cadera, la espalda e incluso el trasero que era suave y redondo; pego su boca el cuello de la mujer que estaba besando a Valyria, escuchando como los gemidos morían en la boca de la chica.